PERPETUUS Dos almas destinada desde siempre, claro ellos no lo sabían, ser amigos era lo único que estaba en sus planes, pero la vida les tenia preparado otra cosa, no seria fácil pero las almas destinas siempre lograban encontrase.
Netetam x oc
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Neteyam tenia claro que iba hacer de su vida al crecer, convertirse en el Olo'eyktan y ser el mejor guerrero de todo el clan, era lo único que giraba en torno a su vida, y al estar cerca de cumplir sus quince años, su padre, Jake Sully conocido por todo como Toruk Makto el hombre del cielo que logro ser parte de los na'vi y liderarlos a la victoria, si ese era su padre, sabia que era una carga muy grande querer llegar a ser como si padre pero era lo único que quería, así que cuando tomo la decisión de que era hora de que su hijo aprendiera a ser un guerrero no pudo negarse.
—Este es"El campo"así le llaman los guerrero mas jóvenes — habla su padre al chico mientras caminan por un campo lleno de de na'vis, algunos practicaban con arcos y otro con armas, el ya sabia como dispara pues era uno de los cazadores mas jóvenes del clan pero entrenas con los guerreros era diferente, tenia que ser mucho mejor de lo que ya era — desde ahora, si quieres ser un verdadero guerrero vendrás aquí, cada tarde hasta que estés listo para tener tu ceremonia y ser un guerrero, pero eso ya lo sabes — termina su padre dejando de caminar para mirarlo.
El joven se encontraba algo emocionado y nervioso a la vez, era el mas joven de todos ahí.
— Te mostrare quien te ayudara con — empezó nuevamente su padre pero fue interrumpido por un grito femenino.
—¡Cuidado!
El adulto voltea rápidamente y si dar tiempo de reaccionar al menor toma su cabeza haciendo que se agachase tapándolo con su cuerpo, su padre deja de cubrirlo y dirige su mirada hacia un flecha que acaba de pasar sobre sus cabezas, un suspiro atónito sale de los labios del menor, la mirada molesta de su padre va hacia el lugar de donde provino la voz.
Los ojos de Neteyam lo imitan encontrándose con una chica, sosteniendo un arco entre sus manos con cara preocupada, a su lado había otro chico que tenia la mano en su cara con decepción mientras negaba, el chico parece decirle algo y ella reacciona.
—¡Mierda!— La escucho maldecir mientras suelta el arco dirigiéndose a su dirección — No puede ser, lo siento tanto Eyktan — se disculpa con el padre directamente agachando su cabeza, el joven la repara se vía menor que el por lo que no entendía que hacia ella ahí.
Su padre también parece notar y habla— ¿Qué edad tienes niña? — su pregunta parece sorprender pues la orejas de la menor suben al instante y sus ojos muestran confusión.
