PERPETUUS Dos almas destinada desde siempre, claro ellos no lo sabían, ser amigos era lo único que estaba en sus planes, pero la vida les tenia preparado otra cosa, no seria fácil pero las almas destinas siempre lograban encontrase.
Netetam x oc
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Las horas pasaron, la pareja continuaba en el lugar, solo que esta vez estaban recostados en el piso sobre una manta que el chico llevaba en la alforja de su ikran, iba preparado, Feyret estaba recostada en su pecho escuchando su latidos, después de mucho consolarla por fin Neteyam había logrado que Feyret de calmara, su respiración aun era pesada pero estaba tranquila, Neteyam acariciaba su espalda levemente mirando al cielo.
Las ramas del árbol brillaban a su alrededor, el eclipse había dado lugar, la oscura noche los abrazo pero eran iluminados por el árbol de los espíritus, no decían nada solo estaban ahí en silencio disfrutando la compañía del otro.
—Tey — La menor llama su atención, Neteyam solo murmura un "Mmm" para darle a entender que la escuchaba.
La menor se remueve de su brazos y levanta la cabeza de su pecho para poder mirar su rostro, los ojos del mayor permanecían cerrados — Gracias— susurra ocasionando que el chico abriera sus ojos encontrándose con el rostro de la chica mirándolo— Por todo, si no fuese por ti no habría tenido el valor para verlo...— sus ojos se cristalizan un poco e intenta esconder su rostro.
— No tienes que agradecerme Fey — le asegura sonriendo— Yo haría cualquier cosa por ti.
Una risita se escapa de los labios de la menor, acerca su rostro al chico y lo besa, el mayor recibe con gusto su beso y con ayuda de sus manos toma su cintura y la sube sobre el, se levanta de la manta quedando sentado sin despegarse del beso, las rodillas de la chica terminan a los costados del mayor quedando a horcadas sobre el, el beso continuaba lento, la manos de la chica van al cuello de Neteyam pegándolo mas a ella.
—Te veo —susurra esta vez Feyret rozando su nariz con la de Neteyam.
El mayor sonrie y vuelve a unir sus labios con ella, toma la parte de atrás de su cuello profundizándolo. se separan nuevamente pero había algo diferente en sus ojos, el chico parecía preguntarle con la mirada si deseaba lo mismo que el en ese momento.
La manos de la chica van a su espalda tomando su cola neuronal confirmándole al chico, rápidamente también toma la suya.
— ¿Estas segura? — Miro a la chica y esta solo asintió.
Lo estaba, quería estar con el, estar unida con el para siempre, ver como se preocupo hoy por que dejara sus miedo atrás y ver a su padre confirmo las dudas que ni siquiera tenia.
Ambos acercaron sus colas neuronales lentamente hasta poder unirse por completo, una corriente pasa por sus cuerpos, su piel se eriza, sus pupilas se dilatan y su respiración se vuelve pesada, jadeos salen de la boca de la menor y sus orejas se pegan a su carneo por la sensación en su cuerpo, el mayor hace lo mismo.
