Una chica en Dalton?

Quiero ir a tu academia

Valentine se había ido a su habitación al llegar, solo le pidió a su madre que le dijera a su padre que necesitaba hablar con él

Se encontraba detrás de la cortina en el balcón, cuando la puerta se abrió dejando pasar a su padre

-Tu madre me dijo que quieres hablar conmigo- dijo

-Así es- dijo ella con ese tono oficial con el que hablaba frecuentemente

-Mira, se todo lo que pasó, y entiendo que estés triste por todo lo de tus amigos pero...- empezó el, pero ella lo interrumpió

-Y justo por eso quiero hablar contigo- dijo ella girando la cabeza, para ver mejor a su padre- Quiero ir a tu academia- dijo convencida

-¿Cómo dices?- dijo el confundido- ¿A Dalton?

-Solo eres director de esa academia ¿No es cierto?- dijo ella girandose de nuevo a la ventana

-Pues si, pero...- titubeo buscando las palabras- Es una escuela solo para chicos, estoy seguro de que puedo hacerte entrar, pero no estoy muy seguro de si te adaptarás

-Lo haré, padre- dijo ella con su tono oficial de siempre

-Aún así, deberás esperar a que pueda hacer todos los cambios necesarios, y tendré que pedir que hagan un uniforme para mujer, y a tu medida, eso puede llevar semanas- dijo el, aún dudoso

-Puedo esperar, pero te pido que no te lo tomes con mucha paciencia, realmente no quiero seguir en McKinley- dijo sincera

-Haré lo que pueda- dijo su padre, y tras unos segundos, salió de la habitación

Valentine se giró con una sonrisa triunfante en su cara, sabía que podía contar con su padre, sólo le quedaba esperar, estaba consciente de que tardaría en adaptarse, y que seguramente solo tendría amigos varones, si es que la aceptaban, porque en aquel instituto, sería la única mujer

Al día siguiente asistió a McKinley como si nada, con su mismo andar de siempre, su misma actitud un tanto arrogante, y la misma seguridad de siempre, pero estaba ansiosa, cada vez que pensaba en irse de aquel lugar, y empezar otra vez, la recorría una oleada de emoción

Los de New Directions estaban sorprendidos, esperaban que ella se viniera abajo, pero cada día que pasaba parecía estar más feliz, como si no le importara nada, y cantaba en los pasillos a todo pulmón sin importarle lo que dijeran de ella, no era insolencia, ella solo estaba entusiasmada

Cuando la habían sacado del grupo, empezaban a tener mucho problemas con los Warblers, ella tenía muchas intenciones de entrar a los Warblers, pero seguramente sería difícil poder hacerlo, porque como ya lo había pensado antes, ella sería la única mujer allí, y seguramente ellos creerían que solo estaba allí como "espía", pero ella era todo menos eso, había perdido toda relación con New Directions, y le hacía feliz que ya había pasado una semana, y seguramente ya sabrían que no estaba allí con malas intenciones

Pero le preocupaba el chico, Sebastian, eran muy parecidos, cuando se hacían frente ambos grupos, el estaba a la cabeza de los Warblers, y aunque Rachel y Santana, algunas veces Artie o incluso Finn lo intentaban, ella siempre se ponía a la cabeza de New Directions, solo para poder hacerle frente

Ambos tenían esa sonrisa arrogante cuando se veían, ella lo miraba desafiante, aunque era unos veinte centimetros más pequeña, y el le correspondía la mirada

-¿Te crees un principe de cuentos con ese peinado y esa cara?- le decía Valentine

-¿Y tu? ¿Te crees una princesa con esos ojos, y el resto de tu cara?- le preguntaba el

-No realmente, pero no me respondiste- le dijo ella en una ocasión

-No, solo me creo Sebastian Smythe, ¿Y tu?- respondío inclinandose a ella

-Yo me no me creo, soy Valentine Merryweather- dijo ella levantando la vista para no ver el perfecto nudo de su corbata

-¿Eso no es como "tiempo de felicidad"?- pregunto el, con una ceja alzada

-Algo parecido- asinitio Valentine

-Pues no me causa nada de felicidad tenerte cerca, ardilla, deberías cambiarte el nombre- dijo el sonriendo triunfante

-¿Cómo me dijiste?- pregunto ella enojada, tirando de el hacía abajo, y quedaron a la misma altura

-Ah... Calmate Valentine- dijo Rachel

-No, insulta mi nombre, no lo puedo permitir- dijo ella sin apartar la vista de los ojos de Sebastian

-No no no, la preciosa ardilla tiene razón- dijo el

Y Valentine estallo

-¡No me llames ardilla, y no me llames preciosa!- grito a punto de golpearlo, Finn y Puck la tomaron de los brazos para que no pudiera hacerlo

-Uy, controlate ardillita, te pondrás mal- dijo el acomodandose la corbata

-¡Que no me llames asi! ¡Mi nombre es Valentine Merryweather, no respondo a ningun otro! ¿Entiendes?- grito enfurecida

-Como digas querida ardilla- dijo marchándose con sus amigos

Cualquiera hubiera considerado aquello coqueteo, pero ellos sabían el profundo odio que se tenían, y no iba a ser fácil borrarlo asi de repente, tomaría tiempo, y muchas complicaciones

Desde ahora les digo, aqui Sebastian no es gay, no estoy muy segura de como funcionaba todo en glee, tiene un tiempo que no lo veo, asi que porfavor, si me equivoco corrijanme, pero no dejen comentarios feos