Una chica en Dalton?

No me odies

Valentine y Sebastian no hablaron en todo el fin de semana, ni siquiera un mensaje, no se habían llamado, ni habían salido juntos, y ambos parecían muertos vivientes, tenían ojeras y caminaban lentamente, nadie los soportaba, ni siquiera Bonnie, que los aguantaba a los dos siempre, ella se había negado a hablar con ninguno

Y finalmente el lunes había llegado. Valentine quería disculparse, porque estaba consciente de que ella había provocado gran parte de la pelea, nunca debió decir eso de la hermana de Sebastian

Ese día su padre la llevó, y ella no dijo palabra alguna durante el camino, ese fin de semana no había hablado mucho con nadie

Al llegar, no vio a Sebastian, solo a Nick

-¡Valentine! ¿Qué te ha pasado? ¿Por qué tienes los ojos rojos? ¿Por qué tienes ojeras? ¿Estas enferma? ¿Te drogaste? ¡Volviste a la anorexia! ¡Ya habíamos hablado de eso! Te...- dijo rapidamente, pero Valentine lo interrumpió

-¡Deja de hablar! Estoy bien, no tienes que preocuparte por todo lo que hago- dijo ella de mal humor

-Oye, eres la única amiga que tengo, tener amigos es cool, pero tener una amiga es mejor, por supuesto que me preocupo- dijo el un tanto enojado por la actitud de Valentine

-Lo siento, pero esto no es contigo- dijo ella cortante

Nick suspiró, y Valentine se alejó de él. Sebastian llegó apenas unos segundos antes que el profesor, y no tenía un mejor aspecto que el de Valentine

-¿Por qué hoy ambos lucen terribles?- preguntó Jeff

-Solo callate- le dijo Nick

-¿Qué diantres?- preguntó Jeff

-¡SOLO CALLATE!- le dijeron Valentine y Sebastian al mismo tiempo, y al contrario de lo de siempre, no rieron, se dedicaron una mirada furiosa

Entonces tanto Jeff como Nick, comprendieron que habían peleado, y que ellos sin saber nada, se habían puesto en medio

Pasó gran parte del día, y lo único que ellos hacían era fulminarse con la mirada, Jeff y Nick se encogían en sus propios asientos

Cuando terminaron las clases, el resto salió con calma, Nick y Jeff prácticamente huyeron

-¿Podemos hablar?- le dijo Valentine a Sebastian

El suspiró, y se giró para verla

-Bien- le dijo cortante

-Nunca debí decir nada de tu hermana, y debí hablarte de mi hermano- dijo ella sin mirarlo a los ojos- lo siento mucho- dijo en un susurro, porque sentía que lloraría si hablaba alto

El miró el techo unos segundos, suspiró otra vez, y finalmente habló

-Yo también lo siento, no es tu obligación decirme nada- dijo con voz ronca

-Pero tu me hablaste de tu hermana, ni siquiera tus amigos lo sabían, y me lo dijiste, aún asi yo no te dije nunca nada- dijo ella

-Tal vez ninguno de los dos debió decir nunca nada- dijo él con voz seca

-Solo deja de odiarme- susurró ella, pero aun asi su voz se rompió, y un sollozo escapó

-No te odio- dijo el casi riendo, y sin decir nada más abrazó a Valentine- no puedo odiarte Valentine, te amo- le dijo en voz baja

Ella finalmente empezó a llorar de verdad, y lo rodeo con ambos brazos, Sebastian apoyó su barbilla en la cabeza de Valentine, quién se pasó llorando los siguientes diez minutos, y Sebastian no la soltó, ni por un segundo, y ella se aferró a él como si su vida dependiera de ello

***

-¡TE DIJE QUE ERA UNA PESIMA IDEA! ¡TE DIJE QUE TE DESCUBRIRIAN! ¡Y TE HAS DELATADO SOLO!- le gritó una furiosa Valentine a un avergonzado Hunter

-Pero no ha sido mi culpa, "el sol" ha dicho todo- se defendió

-¡Me importa poco o nada lo que el haya dicho! ¡Fue tu idea lo de los esteroides, y tu lo has sacado del coro, además de que tuviste un maldito ataque de rabia esteroide en la cafetería! ¿Te pusiste a pensar en las consecuencias cuando hiciste esto?- le gritó Valentine

-Ya he dicho que lo siento...

-¡Eso no arregla nada! ¡Nos han descalificado en la audiencia! ¡Y POR SI ESO FUERA POCO, ATACASTE A UN ENTREVISTADOR!- gritó Valentine golpeando un escritorio

-¡El me ha insultado!- gritó Hunter

-¡NO LE LEVANTES LA VOZ!- le gritó Sebastian

Hunter suspiró

Valentine salió disparada de la sala, e irrumpió en la oficina de su padre tan solo unos segundos más tarde

-Por favor, dime que Hunter Clarington será expulsado de Dalton- le dijo a su padre

Él la miró extrañado por unos segundos

-¿Por qué sería expulsado?

-¿Acaso no ves las noticias?

-¡Ah! ¡Hablas del chico de los esteroides!- dijo su padre- Ahora entiendo porque Sebastian y tu pelean tanto- agregó luego

Ella lo fulminó con la mirada

-Si, será expulsado- le dijo finalmente

Ella suspiró. Luego salió de la oficina tan pronto como llegó

-¡SERAS EXPULSADO MALDITO IDIOTA! ¡Por fin vas a dejar de joderme a mi y a mi novio, hijo de puta!- le dijo Valentine a Hunter, que al instante se puso furioso

-Nunca creí que serías tu la que lo llamara hijo de puta, siempre creí que sería yo- dijo Sebastian

-¡Pues te gané!- le dijo a Sebastian- ¡LARGO HUNTER! ¡Nunca podrías ser un warbler de verdad!- le gritó Valentine

Y por primera vez, todos le gritaron a Hunter, todos juntos, era sorprendente... y también desastroso

-¿Esta todo en orden?- les preguntó un profesor que pasaba por alli, y había escuchado su ruido

-¡Todo esta perfecto!- le dijo Valentine, para luego cerrarle la puerta en la cara

El profesor alzó ambas cejas, pero luego se fue, no tenía interés en entrar a una sala repleta de hormonales adolescentes eufóricos, sonaba riesgoso

Pasaron el resto de la tarde como si nada, Hunter se iria tan solo unos días después, asi que ya no había nada de que preocuparse... era extraño, siempre pasaban la mayor parte del año pensando en las nacionales, pero ya no quedaba nada que hacer, aquella parte del año había terminado casi tan pronto como había empezado

Y algo más acabaría, a estas alturas imagino que sabemos que es, algo que empezó de golpe y de manera inesperada, había sido duradero, algo que tal vez tendría nueve meses de iniciado, pero que tendría tres para acabar. Todos sabemos que es

***

Lloren con el final, ¿Que les esta pasando? No comentan, no votan, me siento peor que cuando me dejan en visto, en verdad es triste, ¿Y recuerdan lo de los Wattys? sus votos ayudan mucho, y estuvimos en el lugar 89, pero ahora estamos en el 273 ¡es triste! no esten tan ausentes, me deprimen