Aristócratas malcriados

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Sebastian y Hunter se encontraban en una de sus tantas peleas, por tercera vez ese día

El resto de los Warblers se encontraban esparcidos por la sala, pasando por alto la pelea, Valentine estaba leyendo un libro, en una silla y con las piernas cruzadas, cuando escucho el primer puñetazo

Hunter había caído al piso y Sebastian aún tenía la mano cerrada en puño, entonces Hunter se levantó y le propino un golpe similar

Valentine suspiró cansada y cerró el libro de golpe

No era común que se golpearan, de hecho no había pasado nunca antes, pero ella estaba cansada de sus peleas

Hunter se encontraba encima de Sebastian, que le puso la mano en la mandíbula para alejarlo, y Hunter le mordió la mano con tanta fuerza que Sebastian gritó, luego uso esa misma mano para darle un golpe en la sien a Hunter, que cayó al suelo mareado

Sebastian se levantó y se quitó el saco, después se la lanzó a Hunter en la cara

-¿Ya terminaron, aristócratas malcriados?- preguntó Valentine

Sebastian apretó la mandíbula, sin responder, y se observó la mano, que tenía sangre porque Hunter lo había mordido, entonces miró a Valentine y se avergonzó porque lo viera en esas circunstancias

-Perfecto entonces- dijo Valentine

Acto seguido, levantó a Hunter del piso y tiró de la parte trasera del cuello de su camisa, después se acercó a Sebastian y le tiró de la corbata, luego los arrastro a ambos como niños pequeños, solo que no se sintió con el valor de tirarles de las orejas

-Ahora, iremos a la enfermería, cuando pregunten que les ha pasado, ustedes dirán "nos hemos comportado como dos chiquillos malcriados e inmaduros y hormonales adolescentes"- les ordenó

Ambos protestaron, pero ella los interrumpió

-¡Sin excusas! Recuérdenlo: "Nos hemos comportado como dos chiquillos malcriados e inmaduros y hormonales adolescentes"

Ambos repitieron lo que ella dijo

-Muy bien, ahora iré con mi padre para evitar que los suspendan, o los expulsen a ambos, deberían agradecerme, sin mi ustedes estarían en academias militares otra vez- dijo Valentine, y luego se alejó de ellos

Cuando la enfermera pregunto qué había pasado, ellos dijeron al unísono:

-Nos hemos comportado como dos chiquillos malcriados e inmaduros y hormonales adolescentes

La enfermera frunció el ceño, pero no dijo nada

Finalmente Valentine regresó por ellos

-Si vuelven a tener una de esas peleas yo misma haré que los expulsen a ambos- les dijo, y se unió al resto de los Warblers

-Esta vez la hicimos enojar- dijo Hunter

-Oh Dios, ¿Entiendes mi caso? Cuando estemos solos... el mundo se acabara- dijo Sebastian asustado

-Hermano, este es buen momento para ir con tus vecinos y decirles: "si escuchan gritos, llamen una ambulancia"- dijo Hunter

Sebastian observó a Valentine, que estaba absolutamente furiosa

***

-¡Bonnie! ¡Bonnie, te juro que me asesinará!- dijo Sebastian al teléfono

-Pues discúlpate- dijo Bonnie

-No lo entiendes, ella está furiosa, creo que tiene ganas de pegarme- dijo Sebastian

-Ella no tiene ganas de pegarte, solo deja que se le pase, sus enojos nunca duran- aconsejó Bonnie

-Pero ¿y si se enoja más conmigo por dejarlo pasar?

-Entonces busca la manera de enojarte con ella, así los dos van a pelear, ustedes pelean por todo, no va a ser difícil

-Bien, mierda me está viendo feo, adiós Bonnie

-Oye, deja de hacer eso- dijo Valentine cuando Jeff le intentaba quitar el libro- es muy viejo, deja de hacer eso, lo estropearas- dijo apartando las manos

A Sebastian algo lo alarmo de pronto

-¡Jeff! No lo toques- dijo Valentine- ¡Basta!- grito

Pero Jeff ya había tirado del libro, y las hojas habían empezado a desprenderse y flotar en el aire

Entonces Sebastian entendió porque se sentía asi

Aquel era su libro preferido, lo había buscado por mucho tiempo antes de irse de Francia, era muy viejo, de las primeras ediciones, se preguntaba cómo era que aún existiera

Se dejó caer de rodillas en suelo, como si algo le doliese, y en parte creía que asi era, la historia ni siquiera le llegaba a encantar, aunque era su libro preferido, era el valor que le daba por el tiempo que lo había buscado, que había sido de las pocas cosas que conservaba de Francia, a pesar de que aquel era un libro inglés

También era el libro preferido de su madre, su nombre era El jardín secreto, no había sido muy famoso, pero el valoraba demasiado ese libro

Cuando Valentine lo vio, se lo pidió prestado, y él se lo entregó, sabía que no le pasaría nada, y también sabía que no era intención de Valentine que aquello pasara, Jeff la estaba molestando

Se puso las manos en el regazo y suspiró, Valentine se disculpaba una y otra vez, Sebastian la observó y simplemente asintió

Valentine no había peleado con Sebastian, ni siquiera volvió a mencionar la pelea, en realidad él no estaba enojado, tan solo deprimido, tan deprimido, que cuando fueron a Lima Bean y Kurt dijo:

-Ustedes siempre están aquí, ¿Viven aquí?- Sebastian solo rodó los ojos

-De verdad no quería que le pasara nada al libro- insistió Valentine

-Lo vi todo, no tienes que disculparte- dijo Sebastian

Valentine suspiró y observo a Sebastian, que tenía la cabeza sobre su propio hombro sin hacer fuerza alguna, y ambas manos en el regazo

-Cuéntame- dijo Valentine de pronto- Cuéntame el libro, no llevaba mucho

Sebastian observó a Valentine unos segundos, luego se incorporó y sonrió a medias

-¿Ya llegó al jardín?- pregunto después

-Sí, estaba justo allí- dijo Valentine inclinándose hacia adelante y poniéndose una mano en la barbilla

Entonces Sebastian le contó el libro, como si en realidad lo estuviera leyendo, estuvieron allí tal vez horas, y él no se detenía, ella escuchaba con mucha atención, entonces Sebastian llegó al final de la historia y suspiró, después giró la vista a Valentine

Ella lloraba como una niña pequeña cuando extrañaba a sus padres, apenas sollozaba y se limpiaba las lágrimas una y otra vez

-Es una historia muy bonita- dijo con voz ronca, y siguió llorando

Sebastian reprimió su risa y la abrazó, después le dio un beso en la frente

-Es que imagina que su padre... y luego regresó... y el caminaba...- después lloró aún más

-Si hubiera sabido que te pondrías asi, no te habría contado nada

-Oh no, me encanto, pero es tan... tan... ¡Oh Dios!- Balbuceo, luego se incorporo

Se quitó las lágrimas una última vez y observó a Sebastian

-Creo que deberíamos irnos- dijo el

-Muy bien

Salieron de Lima Bean abrazados, ella lo rodeaba con ambos brazos, y el la rodeaba a ella con uno, el otro lo usaba para sostener la mano de ella que estaba a su alcance, si él no hubiera hecho eso, ella probablemente habría caído al suelo

Entonces el celular de Sebastian sonó, y su sonrisa se esfumó tan rápido que Valentine se asustó

-Oh Dios- dijo antes de correr a toda velocidad en dirección a su casa


***

WUUUUU! ya subiii! eres feliz?? comenten preguntas para los personajes, lo que se les ocurra, no importa que

Una chica en Dalton?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora