Mentes sincronizadas

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Qué le pusiste a ese slushie?- preguntó Santana irrumpiendo en la sala en la que se encontraban

Sebastian y Valentine rodaron los ojos

-¿Acaso importa?- preguntó el

-Pues sí, Blaine podría perder el ojo- dijo Santana

-¿Hablas en serio?- preguntó Trent, Valentine y Sebastian lo miraron con cara de "cállate, idiota"

-Debes saber que estoy preparada para ponerme como Danny Larusso contigo, ahora, ¿Qué le pusiste?- insistió Santana

-Rojo, número cuatro- dijo Sebastian restándole importancia

-No es cierto- dijo ella

Sebastian alzó las cejas, Valentine sonrió de lado

-Cuestiona mi honor- le dijo Sebastian a Valentine- Demando satisfacción de acuerdo a tradición de los Warblers- dijo dando media vuelta

-¿Quieres un duelo? Bien, voy a patear tu trasero, chicos del cello, ¿pueden quedarse? Los voy a necesitar para esto- dijo Santana

Valentine se acercó a Sebastian y le susurro algo al oído, con las manos cruzadas en la espalda, él sonrió y asintió

-Váyanse, no quiero que me vean hacer llorar a una niña- dijo Sebastian

Cantan Smooth criminal, no es como que importe mucho en la historia

-Lo hice mejor- dijo Santana

-Ni siquiera te acercas- dijo Sebastian, dándose la vuelta para irse, y los Warblers entraron en la sala

-Solo dime que le pusiste- dijo Santana

Valentine sonrió, y Sebastian también

-Sal de mar, pero no importa- dijo Valentine con su típica sonrisa arrogante

-¡Acabo de decirles que Blaine puede perder el ojo!- gritó Santana evidentemente furiosa

-No importa porque no le pusimos nada a este- dijo Sebastian, aun dándole la espalda a Santana

Entonces se giró, frente a él estaba Valentine, que le tiró el slushie a Santana

Sebastian sonrió, y se fue, Valentine se despidió con la mano y le dijo:

-Si yo fuera tú, no ocultaría cosas en ese lugar

***

-Tenía una grabadora, la vi- dijo Valentine

-¿Cómo la llevaba? No vi nada- preguntó Sebastian

-Uno de sus pechos se veía deforme, era obvio- dijo Valentine

-¿Cómo diantre te diste cuenta?- preguntó Sebastian

-Si fueras mujer, entenderías- dijo Valentine

Sebastian rodó los ojos

-Como yo lo veo, solo hay dos opciones- dijo Sebastian- Opción uno: hacemos como que nada está pasando y seguimos siendo los mismos cretinos de siempre

Valentine hizo una mueca

-Opción dos: nos disculpamos- dijo después

Valentine se apoyó en la pared y se dejó caer

Estaban en la habitación de Sebastian, solos, nótese que era increíble que no estuvieran haciendo nada

-¿Opción tres?- pregunto Valentine

-Me temo, Señorita Merryweather- dijo Sebastian, dejándose caer a su lado-, que no hay opción tres

Valentine suspiro, y puso la cabeza en el hombro de Sebastian

Una chica en Dalton?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora