Prólogo

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                Son tantos los días que han pasado desde el momento que esta historia comenzó a tener sentido, que ya no sé cómo fue posible llegar a este punto. Siempre he dicho que la vida es frágil, cualquier paso en falso te llevará al fondo del abismo, y para lograr salir, se sufre; tantas veces lo dije, pero no lo entendía... Es más, ni siquiera sabía de qué trataba cuando esto comenzó, simplemente me lancé a la vida como quien se lanza al mar para salir de su infortunio, sin saber que un hombre no puede escapar de su destino. De esa manera, tan... efímera, nace un día "Nuestro camino al cielo" sin tener la más mínima idea que el verdadero camino al cielo lo estaba viviendo, pero no podemos saber lo que hemos tenido hasta el momento donde todo acaba. Me gustaría decir que aprendí gracias a los buenos momentos que pasaron dentro de esta historia, pero le prometí que sería sincero luego de tanto...

              Los días más importantes de un hombre, son el día que nace y el día que descubre para qué; en este camino he dejado plasmado esos momentos donde lentamente fui entendiendo el porqué de muchas, dudando de mí mismo y poniendo mi confianza en las cosas equivocadas. Pensé que lo mejor que yo tenía ya lo había dado, sin entenderlo hasta el día en que me desarmé escribiendo estas líneas. Espero que todos ustedes al leerlas noten la magia en cada párrafo, queriendo siempre a una, pero diciéndoselo a mil; en cada palabra hay un sentimiento, una realidad que sé que todos llegamos a vivir en un momento de nuestra vida, pues en ocasiones es demasiada paz, y esperamos ese golpe que le dará sonido a nuestras vidas, para que no tengan que pasar por esto de encontrar un buen camino que seguir, pero te sigues sintiendo perdido.

                  De todo corazón, deseo que la vida les sonría, a pesar de su mala costumbre de darnos la felicidad, elevarnos a lo más hermoso para luego soltarnos, dejándonos caer en el limbo entre lo que soñamos y no tenemos. Deseo que nunca lleguen a conocer la diferencia entre perderse y estar perdido. Deseo que el espejo del baño nunca retrate una persona triste que se encuentre nublada por tantos miedos por luchar sin alcanzar. Deseo que cada día soleado les llene la piel de ese calor para cada minuto demostrarle al mundo el brillo que tienen. Deseo que cada día lluvioso el frío de la ciudad les recuerde que somos sensibles y lo que no nos mata, nos hace más fuertes. Deseo que cada taza de café esté acompañada de una sonrisa. Deseo que esta historia les sirva de espejo para ver el reflejo de lo que no deben pasar para darle valor a lo que valor merece. Deseo que el tiempo les alcanza para ver todos sus sueños realizados, a pesar de todos los obstáculos que se interpongan en el camino, pues no conocía lo que era un obstáculo hasta que comenzó este camino al cielo... Sin más que decir, sean todos bienvenidos a un nuevo espacio de mi vida, a una nueva historia en la cual viví con mi piel lo que es perderse lentamente mientras tratas de que los demás no se pierdan...


                                                                                                Anthony D. Bastidas (2023)

Nuestro Camino al CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora