Era una noche normal en ciudad de Nueva York, solo que es este caso había un grupo de niños divirtiéndose en una mansión de clase alta, esto por parte de Dolly y su familia dueños de una compañía farmacéutica que vendía muy bien. Esto le permitía a Dolly tener algunas cosas lujosas cómo lo eran una cama grande y cómoda, unas consolas de videojuegos tanto nuevas como antiguas, una colección de libros de edición especial de algunos de sus autores favoritos, unos juguetes de colección, y no menos importante, una mascota lujosa la cual era nada más ni nada menos que un ajolote.
Así es, una mascota muy delicada la cual Dolly cuidaba como si fuera un hijo para ella, ¿Y como no?, Una criatura tan adorable e interactiva con su dueño era una muy buena opción.
En estos momentos, Dolly observaba hinoptizada la belleza de aquel animal, pero el aspecto que observaba especialmente eran sus colores, colores que eran iguales a su cabello, rosado claro.
–Dolly, ven a jugar con nosotros –le pidió Claude mientras jugaba con una de las consolas en compañía de Helen.
Dolly al instante de escuchar eso procede a alzarse y meter ligeramente su nariz en la pecera grande y adaptado para el animal. Al instante de hacerlo, el ajolote nada hacia arriba alcanzando la nariz de Dolly la cual frota con su cabeza, cosa la cual hace que Dolly se sonroje por la ternura del animal a su vez que retiraba lentamente su nariz de la pecera para ir a jugar con sus amigos.
Mientras tanto con Sara, la menor estaba subida a la bicicleta de alguien conocido, este mismo era Casey Jones, el adolescente que conoció en su tiempo como mutante, ¿Y como se lo encontró?, Bueno, resulta que ella la menor no se le ocurrió mejor idea para llegar a la morada de su agresora que ir caminando, y para su suerte, Casey estaba patrullando la zona en la que Sara estaba caminando, por lo que la reconoció y le ofreció su ayuda a cambio de darle algo de información.
–¿Así que… llevaste el Tephone que Donatello te obsequio después de haberte curado a la escuela y que una bravucona te lo robó? –le pregunto Casey mientras seguía pedaleando.
–Si –dijo Sara completamente avergonzada.
–¿Y quisiste ir personalmente a recuperarlo? –le cuestiono Casey una vez más.
–Si –le respondió Sara aún más avergonzada.
Ante esto, Casey se detiene rápidamente, cosa la cual confunde a la menor.
–No se por donde empezar –comento Casey mientras se frotaba la cien –Primero, no debiste traer a tu escuela el Tephone, si te ven con eso en la primaria no dudarán en llamar a tu padre, y lo segundo, ¡¿Por qué pensaste que ir caminando sola en la calle era buena idea?!, ¿Sabes a cuántos idiotas atrapé acosando chicas? –fueron las dos reprimendas que Casey le dió a la menor mientras está ocultaba su rostro por la vergüenza.
–Lo siento Casey… es que… quería recuperarlo por mi misma, y no quería que los demás se enteraran de lo irresponsable que fui –le dijo Sara muy avergonzada y apunto de llorar.
–Sara, tranquila, se que cometiste un error, pero se que no lo volverás a cometer –le dijo Casey agachándose a la altura de la menor –Solo a la próxima no hagas eso hasta que entres en la preparatoria, ahí serán un poco más accesibles sobre traer teléfonos, creeme –le consoló Casey –Ahora, ¿Dónde vive esa chica que dices exactamente? –le pregunto Casey nuevamente.
–Bueno, por lo que se, no vive en un barrio adinerado, vive en una zona algo alejada de la ciudad –le respondió la menor un tanto dudosa.
–Bueno, eso es muy específico –dijo Casey para acto seguido poner sus dedos pulgar e índice en el mentón para pensar –Creo que… vamos a tener que pedirle ayuda a Donatello –le comento Casey a Sara haciendo que está última palidezca.
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Nuestra hermanita (Teenage Mutant Ninja Turtles)
FanfictionSe ubica durante y después del episodio Slash el destructor, eso es todo lo que voy a decirles. #1 Kraagn 24/06/22. #1 Karai 04/04/23 #1 Destructor 09/02/24