Labyrinth. 𝄄 Joe Burrow.

5.

La hora más interesante y hermosa de toda mi vida fue compartir caricias, besos y jadeos con Joe, aún que su mano cubriera mi boca para que mi papá no nos descubriera. Por primera vez en años, aquella regla de mi papá se me borró por completo, "no enamorarse" dios.. le fallé cuando tuve esa noche de pasión con su mariscal de campo. No hicimos el amor, sólo.. matamos el rato en una aventura, por qué eso era lo nuestro. 

Recostada sobre el pecho de Joe y mirando hacía la ventana frente a mi cama, comencé a darme cuenta que pronto mi padre despertaría y se podría dar cuenta de lo que había pasado en la habitación. 

- ¿Qué tanto piensas? - Preguntó Joe sacándome de mis pensamientos, cómo un salvavidas.

- En lo qué hicimos.

- No estuvo tan mal, ¿o sí? - Rió.

- No.. en eso eres genial, pero, papá se podría enterar de esto. De que te enredaste con su hija.

Apoyé mi codo sobre la cama y me levanté para mirarlo, muy pronto esto terminaría y volveríamos a ser los mismos desconocidos de ayer. 

- Tengamos un romance a escondidas.

Propuso aún que terminé por lanzarle una almohada.

- ¿Estás loco, verdad?

- Es broma, Elisse.

- Sí, lo sé por que todavía le ruegas a tú ex.- Hice una pausa para levantarme de la cama enredada en la sábana de mi cama y recoger su ropa del suelo para lanzársela.

- ¿Entonces sólo fuimos eso, Elisse? - Se quejó indignado, yo asentí con la cabeza.

- No somos nada, Joe, mi padre me mata sí se entera.

- No sí nos vemos a escondidas.

Lo miré por algunos instantes, sí las miradas pudieran matar, seguramente el equipo de mi padre estaría sin mariscal de campo ahora mismo.

- Ya veremos con el tiempo, Joe, mientras tanto vístete y vete a la habitación de huéspedes, mi padre me mata sí te encuentra aquí.

No dijo nada más y se comenzó a vestir para salir de la habitación, me quedé ahí para darme una ducha y ponerme la pijama, para estar cómoda en mi cama mientras veía alguna serie o simplemente mataba el rato.

Aún que el sueño me terminó por ganar y me quedé dormida, no negaré que esa noche soñé con Joe y algo muy bonito entre nosotros, pero no podía permitirme hacerme falsas ilusiones con él sabiendo lo mal que estaba el fijarme en alguien cómo Joe. 

Mi corazón era muy diferente a mí y el no aguantaría pretender que Joe y yo sólo éramos conocidos con una noche en común, con algo más que probablemente yo no quería aceptar y jamás lo haría por las reglas de mi padre.

¿Quería a Joe? No podía decirlo con certeza, pero tampoco podía asegurar o fingir que no podría llegar a quererlo en un futuro, por qué así funcionaba todo en la vida, siempre era un "tal vez" o quedarse a la deriva del destino y lo que esté pudiera decidir.

So we could call it even
You could call me babe for the weekend
'Tis the damn season, write this down.

A la mañana siguiente el sol estaba molestándome en los ojos, lo que supuse que Joe probablemente se podría haber marchado debido a que no estaba más la lluvia. ¿Debería estar agradecida por qué no estaba más? Por supuesto, pero no lo estaba. Mi corazón pedía a gritos estar con Joe, verlo una vez más y repetir lo de anoche. Pero no podía y jamás volvería a suceder, lo tenía que entender a la manera que fuera.

Bajé al comedor y sólo había una nota de mi padre diciendo que debido a la temperatura y el clima se había ido al entrenamiento con los chicos, así que tuve que quedarme en casa para organizar algunas cosas y después saldría con Kennedy para contarle lo que había pasado anoche.

No tardé en alistarme y salir a la cafetería que acordamos para charlar, necesitaba un consejo y no podría recibir uno mejor que de mi mejor amiga de todo el tiempo.

- Dios, no sabes cuanto necesitaba verte para contarte todo.

Dije cuando llegué, Kennedy estaba presente desde hace minutos, así que me acerqué y la abracé.

- ¿Qué pasa? Me asustaste cuando dijiste que era de vida o muerte, Elisse.

- Es qué lo es.

Tomé asiento dejando mis cosas a un lado, ella se preocupó creyendo que era algo de mi salud, suponía.

- Tiene que ver con Joe.

- Suena raro pero cuéntame.

Primero, me aseguré de que no hubiese nadie escuchando por qué sabía que los rumores corrían rápido por aquí. Y más cuando eres la hija del entrenador de el equipo de la ciudad, el más apreciado por ellos y más querido, también sabiendo que incluía al mariscal de campo quién aseguraban que sería un campeón.

- Me acosté con Joe.- Solté de la nada, sin previo aviso ni medir lo que había dicho, Kennedy se asombró y comenzó a mover sus manos efusiva. 

- ¡Sabía que se gustaban! - Grito, pero de pronto la callé devolviéndola a la realidad.

- No Kend, no me gusta.. o bueno..

- ¿O? ¡dios mío, te gusta Joe Burrow! 

Volvió a gritar captando la atención de varias personas, me sentí apenada cuando noté a la mayoría del local mirando hacía nuestra dirección. 

- No, Kend.. sólo fue una noche.

Murmuré tomándola de la mano para que pudiera tomar asiento en la silla de nuevo. 

- ¿Entonces?, Elisse, tuvieron una noche de sexo, se conocen de meses es obvio que él siente algo por ti.

- No.. no lo hace.

- ¿Segura? Su mirada no dice lo mismo. 

Nunca había puesto atención a la forma que Joe me miraba, ni siquiera era capaz de hacerlo en un futuro por qué yo sabía bien que lo nuestro no podría ser ni en un millón de años. Jamás podría haber algo entre nosotros.