Deku permanecía inmóvil, con su brazo extendido hacia Himiko, esperando una respuesta positiva de su parte. Sin embargo, la chica continuaba ahí, mirándolo con una sonrisa que comenzaba a asustarlo.
-¿Significa que al fin te unirás a nosotros, Midoriya-kun~?- preguntó Himiko luego de varios minutos en silencio, bajando del columpio para posicionarse frente al peli-verde.
Deku negó con la cabeza.
-Quiero que entres a la UA para convertirte en una heroína.- explicó Deku con una confianza descarada.
La sonrisa de la chica desapareció en ese momento y, sin saber cómo, Izuku terminó de cara al suelo...
...con Himiko sobre su espalda, colocándole un cuchillo cerca del cuello.
-¿Por qué querría estar del lado de un montón de héroes hipócritas?- cuestionó Himiko, con el ceño ligeramente fruncido.
-P-Porque... tú no eres una villana...- tartamudeó el peli-verde, midiendo sus palabras para no enojar más a la rubia yandere.
La hoja del cuchillo se deslizó suavemente por el cuello del peli-verde, sin cortalo, hasta llegar a su mejilla.
-¿Seguro?- susurró Himiko sobre el oído de Deku, haciéndole un corte en la mejilla. -Porque ahora mismo, solo deseo verte cubierto de heridas.- agregó sonriendo.
-Y-Yo... ¡Yo confío en ti!- gritó Deku, cerrando los ojos al sentir el frío acero de nuevo en su cuello.
Esperaba que Himiko lo cortara con él...
...pero no sucedió. Incluso dejó de sentir el peso que ésta generaba en su espalda.
Abrió los ojos y vió que, efectivamente, la chica se había puesto en pie y ahora le daba la espalda.
-Mentiroso...- susurró Himiko de forma casi inaudible. -...nadie nunca... ha confiado en mí.- agregó, apretando los puños con rabia.
Deku se puso de pie, tocando su mejilla, manchándose la mano con su propia sangre.
Una parte de él, pedía a gritos huir de ahí. Y otra, quizás su héroe interno, le exigía un último intento.
Optó por hacer caso a la segunda voz en su cabeza.
-¡Yo confío en ti, Himiko-san!- repitió Deku, acercándose a la chica. -Por eso quiero darte la oportunidad que te fue negada.- agregó.
Himiko giró a verlo, con aquellos orbes dorados...
...tan fijos en él, como los ojos de un depredador sobre su presa.
-Te arrepentirás.- aseguró la rubia, volviendo a sonreír mientras miraba la sangre de Deku en su cuchillo.
-Tal vez... Pero me arrepentiría más si, como futuro héroe, no soy capaz de salvar a quién necesita mi ayuda.
Los ojos de Midoriya ardían en determinación. ¡Ya no había marcha atrás!
Himiko se acercó hasta él y lo abrazó, escondiendo su rostro en el pecho del peli-verde.
-Entonces... sálvame.- más que una burla, aquello había sonado como una súplica.
Deku envolvió a la chica en un abrazo, susurrando un simple "déjamelo a mí".
...
Aizawa miraba a su alumno como si hubiera perdido la cabeza. Pero, al mismo tiempo, sabía que el peli-verde podía tener razón: los miembros de la Liga de Villanos no eran culpables de nada. Habían sido abandonados por la sociedad y no tuvieron otra opción más que luchar contra ella.
El azabache suspiró y miró a la rubia que no dejaba de abrazar el brazo de Deku, como si de una pareja se tratara.
-Himiko Toga... apelaré ante el director para que puedas ingresar en la UA, con la condición de que nos digas todo lo que sabes de los planes de la Liga.- habló Aizawa con su típica voz sin ánimos.
-Muy bien.- respondió Himiko, seria.
Sin más, Aizawa se acercó a la puerta de la oficina para salir. Pero, antes de abandonar el lugar dijo:
-Midoriya, por favor, encargate de mostrarle la residencia.- habló, cerrando la puerta tras él.
Deku sonrió ligeramente, mirando a la rubia abrazada a su brazo, con la mirada perdida.
...
-¡¡MIDORIYA, ¿QUÉ SIGNIFICA ESTO?!!- gritó Tenya, agitando los brazos de manera exagerada, mirando al peli-verde con severidad.
Vale, tal vez se había confiado demasiado...
...y haber llevado a Himiko Toga a una residencia, llena de héroes, no había sido la idea más sabia de su parte.
A penas cruzaron la entrada, Bakugo se lanzó sobre la chica, entre insultos y explosiones, colérico. Y, no era para menos, ¡ella había sido de los villanos que le habían secuestrado!
Y, sin pensar, Kirishima y Cero se lanzaron sobre Bakugo para detenerlo, esperando oír la explicación que Deku podría darles sobre el por qué estaba junto a una villana.
-Ella...
-¡¡¡VOY A EXPLOTARLA EN MIL PUTOS PEDACITOS, MALDITO!!!- gritó Bakugo enojado, luchando por soltarse de sus captores.
-¡Bakubro, cálmate!¡Seguro que Midoriya puede explicarnos qué ocurre!- trató de razonar Kirishima, con una sonrisa nerviosa. A él tampoco le agradaba la idea, pues sabía que el incidente del secuestro aún le causaba pesadillas a su amigo.
Todas las miradas de la residencia se posaron sobre el peli-verde, esperando una explicación aceptable. Mientras Himiko solo tarareaba una canción en voz baja, como si aquel revuelo no la involucrara.
-Himiko-san no es una mala persona, solo...- Deku miró a la rubia antes de proseguir. -...solo ha sido mal juzgada por la sociedad.- concluyó.
-¡Ella hirió a Tsuyu-chan en el campamento!¡Y secuestró a Bakugo!- exclamó Uraraka, para sorpresa de todos, con el ceño fruncido.
Deku tragó saliva con dificultad, agachando la cabeza.
-Nunca lastimaría a Tsuyu-chan, porque ella y yo somos amigas~.- habló Himiko alargando las palabras en un tono burlón.
-¡Serás...!
Y, por suerte Yaoyorozu y Hagakure detuvieron a la castaña, inmovilizandola.
-¡Por favor, denle una oportunidad!¡Si llega a equivocarse, yo asumiré la culpa y la entregaré a las autoridades!- gritó Deku, haciendo una reverencia casi entre lágrimas.
Silencio.
Tensión.
Incomodidad.
Nadie era capaz de dar una respuesta a aquella petición.
Un suspiro.
-Confiaremos en ella, Midoriya. Pero solo tendrá una oportunidad, si falla, se acabó.- habló Shoto, con seriedad.
Midoriya asintió.
Y tomó a Himiko de la muñeca para guiarla a alguna de las habitaciones libres de la residencia.
Mientras unos ojos avellanas no se despegaban de ellos.
💉💉💉
Perdonen que este cap fuese tan largo, me dejé llevar un poco. Pero espero les gustara.
Recuerden dejarle una ⭐ si les gustó y comentar qué les pareció, o que creen que pasará a continuación. Ahora más que nunca, me alegraría saber que mi trabajo es tomado en cuenta :'c
Bueno...
¡nos leemos en otro cap!
¡Los quiero mucho, gatitos!
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Quería salvarte
RandomA veces las buenas intenciones pueden acabar volviéndose una mala idea, en especial... cuando hay una ex villana en la ecuación.
