Capitulo 51

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La ira carcome mi cuerpo. Muerdo mi uña para no empezar a gritar. Contengo las lagrimas y guardo silencio. Respiro una y otra vez pero la ira solo aumento. Pienso y me destrozo. Me enfada como mis cosas son tan insignificantes, incluyendo mi propia salud mental.

Se vuelve doloroso ver como la única persona a quien rescatabas de entre la oscuridad, se vuelve un monstruo que solo busca su beneficio, sin importarle el tuyo. 

Al ver la puerta abrirse y no ver una peluda cabecita asomándose me hace sentir aun mas sola.


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