Brisa del mar

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- POR FIN!- Se escucha a Yoongi gritar, saliendo del auto de Namjoon.

Habíamos llegado por fin. Juro que no podía durar un minuto más sentada en el asiento del auto.

La arena estaba blanca y el cielo pintaba ese hermoso atardecer con todos los colores. Me encantaba el olor que emanaba el mar, fresco con ese toque salado de sí mismo.

- Siento que perdí la forma de mi trasero- Dice Jimin mientras caminábamos hacia la casa en la que nos quedaríamos.

- Lo dices como si tú fuiste el que manejo. No dejabas de moverte y hasta dormiste- Dice Jungkook, recogiendo su maleta.

Estaba recogiendo la mía e intentaba levantarla ya que no podía arrastrarla por la arena pero pesaba demasiado. Hice un segundo intento y unas manos me la arrebataron llevándose la consigo.

Mire hacia el frente y Jungkook la había tomado. Me acerqué a él e intente tomarla.

- Yo puedo llevarla- Dije intentando quitársela pero no hubo forma o manera.

Se detuvo y me miró con ambas maletas en sus manos. Como podía hacerlo?

- Quieres dejar el egoísmo de lado y dejarme ayudarte? Si crees poder llevarla, adelante... tómala- Quise tomarla pero la verdad es que si pesaba. De inmediato quedó en la arena y casi caigo en ella por lo mismo.

- Bien.. llévala entonces- Dije y retome el camino, sin embargo me quede a su lado.

Tomo la maleta con su sonrisa arrogante y seguimos caminando. Los chicos venían un poco más atrás debatiendo quién cargaría las cosas.

- Elena.. acaso te desagrado?- su pregunta me causo sorpresa, no esperaba que me dijera algo así.

- Que? De que hablas?- Dije volteando a verlo.

- No lo se.. siempre que hablamos tienes una mirada de disgusto y la mayor parte del tiempo esquivas mi lado- Si lo dice así suena como si yo fuera Cruella de Vil.

- Te recuerdo que en un inicio intenté ser amable pero tu actitud fue la que me hizo dejar de serlo- Dije a la defensiva.

- Ay por favor.. chocaste conmigo y tomaste el celular equivocado, ademas, eran días complicados.

Días complicados? Acaso sufría del periodo o que?

Suspire- Bueno...- Me cruce de brazos- No te odio.. la verdad es que ni yo misma se porqué actúo así. Supongo que soy alérgica a ti o algo.

Se rio mientras volteaba la cabeza hacia arriba, lo cual lo hizo desequilibrarse un poco con las maletas.

- Enserio se te ocurren las cosas más absurdas, Elena...- Me mira directo a los ojos y sonríe, se veía tan distinto cuando lo hacía, la mayor parte del tiempo siempre estaba serio- Empecemos de nuevo. Duraremos aquí un fin de semana, conozcámonos mejor.

Lo mire igual y lo pensé. Tenía razón, tampoco nos podíamos tratar como desconocidos el resto de la vida. Quizás solo estaba exagerando con él.

- Bien... un gusto, Jungkook. Soy Elena.

- Te daría la mano Elena, pero traigo las manos ocupadas y una de ellas está acalambrada porque alguien al parecer echo en ella cemento- Dice mientras sonríe.

- Ay no pesa tanto... solo un poco.

- Si.. solo un poco. Al menos ya llegamos.

Era cierto, la casa era enorme. Tal cual la describían los chicos cuando hablábamos de los planes que haríamos cuando llegáramos.

A la vista tuya - Jungkook (EN PAUSA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora