Tiger [Minlix]

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La lluvia fuerte no fue una excusa, ni mucho menos el horrendo barro que manchaba sus patas, haciéndolo resbalar y caer hasta ensuciarse. Minho jadeaba mientras corría en busca de su hermano, sus ojos tan profundos y furiosos del color azul intenso que adoptaba el mar al atardecer o en días nublados, con el notorio y triste brillo de preocupación delatando al tigre. Atrás de el, corría la silenciosa pantera tratando de detenerlo porque Minho podia estar segado de la furia y el miedo que no notaría el campamento de los cazadores cerca.

¡Minho, jodida sea tu madre detente de una puta vez! Dijo Hyunjin jadeante a través de su mente.

Mi hermano me necesita. Respondió Minho rápidamente, su corazón desprotegido latía tan fuerte, temeroso de lo que sus ojos azules pudieran apreciar al llegar a la jodida celda donde se encontraba su hermano menor Jisung.

Debía salvarlo, pedirle perdón por haberlo perdido de su campo visual y joder adorar al segundo y último ejemplar de los tigres híbridos con toda la potencia de su corazón.

El oído agudo del híbrido capto sonidos que no eran que no eran las pisadas de ellos sobre el barro y las ramas, parando curiosamente sobre sus cuatro patas, la pantera un poco más baja y delgada, con su pelaje fino y brillante se pñdetuvo a su lado, ambos mirando con atención el maldito campamento sin actividad.

Dónde esta mi hermano. Minho se apresuró a preguntar, sacando sus garras silenciosamente listo para descargar piel humana si encontraba a su pequeño hermano herido o peor aún... sin vida.

Hyunjin ladeó su cabeza yéndose entre sigilosamente entre los árboles, era impresionante la habilidad de aquél felino majestuoso por tener unas almohadillas tan silenciosas como la soledad misma, pero Minho no se fijaría cuan majestuosa era la pantera cuando su hermano estaba entre la vida y la muerte en ese mismo momento pensar en lo último lastimaba su corazón.

"El te necesita" La vocecita dulce de Felix apareció como relámpago en sus pensamientos, haciendo que el gatote se sintiera débil, había salido disparado de su hogar apenas Felix le ordenó irse para salvar a su hermano.

"Yo no soy más importante que el" Nuevamente aquélla melodia hizo eco en su mente haciendo gruñir al felino ¡¿Cómo se atrevió a decir aquello?! ¡Amos eran igual de importantes en su apestosa vida! Jisung era su hermano menor, su mimado y malcriado cachorro, su compañero de aventuras y travesuras, y Felix era su pequeño bebé, su precioso rubio, molesto preguntón de labios dulces como la misma miel y mejillas regordetas cómo bombones, era su pequeño pero gran amor. Porque eso significaba Felix para Minho: amor puro.

Minho sin dudar estaba derramando lágrimas que se clamuflajeaban entre la lluvia que caía sobre su naranja y rayado cuerpo, se sentiría tan vacío si alguna de esas dos personas le llegaba a pasar algo, el híbrido tenía miedo, mucho miedo.