La Luz De Mí Ángel (Saga Tu Luz # 2)

Capítulo: 9

Gina.

Salgo de mi pequeña pero acogedora cabaña para caminar rumbo a mi primer día de trabajo en el bufete de la manada.

Hoy escogí un ouffit que consiste en un jeans ajustado negro, botas del mismo color de tacón bajo, una blusa rosa palo y un blazer blanco.

Dejo mi cabellera pelirroja suelta y sujeta de un lado con un broche de medio lado. Y mi rostro con maquillaje suave.

Estoy regia para impactar a estos licántropos. Enserio quiero encajar.

Aspiro hondo para mantener a raya mis nervios. Todo saldrá bien, lo sé.

Eres una Italaina empoderada.

Sonrió ante el inmenso bufete que se yergue frente a mí. Y con paso seguro ingreso como lo que soy.

Una Diva.

Ya dentro del ascensor subo hasta el piso tres área de los abogados júnior.

Voy caminando hacia la Pelinegra que viste un ajustado vestido negro con sus ojos castaños que me escanean y le sostengo la mirada con  la misma altivez que ella a mí.

__¿Así que Gina Fioretti? La amiga humana de la Omega que resultó ser La Luna de nuestro Alfa.

__Habla la loba despectivamente logrando que la Ojiazul arquee una ceja sonriendo de lado.

__ Y tu debes ser Paulet Oslek, la jefe administrativa.... Será mejor que cuides tu lengua querida, ya que esa Omega como tu la llamas es tu Luna, y le debes respeto...A no ser que quieras que llegue a los oídos de tu Alfa como te expresas de su Alma.

__Destaco serena, ella me mira con rabia y sonríe irónica.

__Te crees mucho por ser la amiguita de la Luna ¿verdad? Pues no te acomodes mucho linda. Porque aquí mando yo ..Asi que prepárate porque no durarás aquí.

__Amenaza la Castaña sonriendo pérfida ante las miradas curiosas de los demás que luego se ponen en lo suyo al ver que su jefa les mira mal.

__Ooh querida aquí te estaré esperando...Que empiecen los juegos del hambre.

__Respondo jocosa sin amendrentarme por sus amenazas.

Estoy acostumbrada a lidear con gente así. Las cuales creen que pueden humillarme, haciendo me quedar como hueca o tonta.

Y ninguna de las dos lo soy. Soy todo lo contrario.

Realmente ella no sabe lo que le espera. No por nada hice huir a varios prospectos de prometidos y niñeras malvadas.

La muy perra me dio el cubículo más pequeño que encontró, pero bah, me adaptaré y lo haré mi lugar perfecto.

Paso el día entre acomodarme en mí lugar y mirar los documentos que por supuesto nada tiene que ver con algún caso.

La verdad es que sólo sería una ayudante aquí, y muero por aprender.

Las seis de la tarde marca el reloj para levantarme de mi puesto y tomar mi cartera. Suena mi nuevo teléfono porque el otro lo boté junto con el número.

Ya que mi familia podía rastrearme si me lo quedaba, acepto la llamada al ver que es el bobo de Tristán.

Él casi nunca me llama, y es raro cuando lo hace. Siempre es porque no ha podido comunicarse con Isabella.

Eso me alerta.

__¿Sabes donde está Isabella?

__Pregunta la voz gruesa del lobo logrando que la humana se vuelva a sentar por causa de oírle y en especial saber que algo malo le pasó a su amiga.