𝐰𝐢𝐬𝐡 | ʰʸᵘⁿᵐⁱⁿ

16

El festival de primavera estaba por llegar, los alumnos lucían emocionados y los preparativos comenzaban. Se organizaban comités y actividades previas al evento principal, todo esto con el fin de promover la sana recreación en el alumnado.

Los profesores y directivos comenzaban a tener días más agitados y atareados. Se mantenían demasiado inmersos en sus trabajos y era poco el tiempo libre del que disponían. Por eso mismo Seungmin no había visto tan frecuentemente a Chan. O eso prefería creer.

—Bien, eso ha sido todo por hoy —Minho sonrió para sus alumnos—, si tienen alguna duda pueden hacerme saber y con gusto los ayudaré. 

En poco tiempo Minho se había convertido en uno de los profesores más queridos de la escuela, todos ahí lo respetaban y amaban su forma de enseñar. Sin embargo, Seungmin no lo soportaba.

Con rapidez los alumnos comenzaron a abandonar el aula una vez se despedía de su profesor; por otro lado, Minho recogía sus pertenencias con calma mientras dirigía suaves sonrisas a sus jóvenes alumnos.

Seungmin evitaba cualquier tipo de contacto directo con Minho, aprendía de él y prestaba atención a sus clases pero nada más que eso. Con algo de apuro guardaba sus cosas, su cabeza era un caos. Ahora mismo, si nada se hubiera ido a la mierda, Hyunjin estaría ahí afuera del salón de clases esperando por él. Lastima que todo se había ido al carajo.

—Joven Kim —habló Minho a sus espaldas, observándolo desde su escritorio.

Seungmin maldijo al haber tardado tanto guardando sus cosas, sus pensamientos lo invadieron y ahora tendría que hablar de frente con quien menos quería.

—Tengo algo de prisa, profesor Lee —contestó con desprecio en su voz.

—Las cosas no van bien, ¿o me equivoco?

Minho una vez más fingía esa estúpida preocupación hacia él, Seungmin sentía su sangre hervir del coraje. Sabía bien a qué se refería.

—Debería de dejar de meterse en los asuntos ajenos, profesor.

—Oh vamos Seungmin, puedes confiar en mi. Al final tenemos mucho en común, deberíamos ser cercanos.

El aula estaba completamente vacía, eran sólo ellos dos frente a frente, una vez más, la tensión era palpable. Era como si tenerlos en el mismo espacio los volviera rivales a muerte, Seungmin ahora mismo deseaba que Hyunjin entrara por esa puerta y lo salvará como la última vez.

Minho lo veía con una sonrisa ladina, una vez más se burlaba de él con esa confianza que solo lo hacía aborrecerlo más.

Seungmin decidió que no valía la pena, él sólo era un chico de diecisiete años que estaba pasando por una etapa de confusión, sin embargo, Minho era un hombre adulto que decía ser todo un profesional y se comportaba de esa manera. Seungmin era más que eso. Tomó su mochila, la colocó sobre su hombre y se dirigió hacia la puerta sin siquiera dirigirle una segunda mirada a Minho.

Pero hubo algo que lo detuvo, su coraje.

—Profesor Lee, ¿qué es lo que tenemos en común? Qué ambos queremos lo que él otro tiene o qué ambos follamos con la misma persona.

El tono de Seungmin era frío y serio, mientras decía eso mantuvo su vista fija, lejos de Minho. Por lo que no pudo ver como su mueca de superioridad se iba poco a poco, aquella sonrisa había desaparecido y sus ojos miraban con furia a Seungmin.

Ellos no habían tenido sexo, estuvieron a punto, pero no ocurrió. Pero Seungmin no pudo evitar decir aquello, una pequeña mentira no dañaba a nadie.

wish

—¿Hyunjin y tú follaron?

Seungmin sintió su jugo atorarse en su garganta, comenzando a toser exageradamente.