¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
si estaba un poco nerviosa cuando viaje hacia estados unidos por los amistosos, cuando fui a francia podía sentir como todo mi cuerpo temblaba.
con el inglés me podía manejar, algo del idioma sabia, más que nada por mi profesión, pero del francés no tenía idea de nada.
claramente me debía manejar sola, enzo viajó con sus compañeras de equipo, como se hacia. solamente esperaba que entiendan mi inglés y me tratasen, en lo posible, bien. a veces la gente no es para nada buena con los inmigrantes.
cuando llegué viva al hotel me duche para comenzar a preparme tranquila antes de ir al estadio, enzo jugaría por la noche. sabía que venir acá significa que prácticamente confirmabamos lo que sucedia con nosotros pero poco me importaba, estábamos bien de la forma en la que estábamos, no nos íbamos a esconder ni mostrarnos exageradamente.
estaba terminando de maquillarme cuando recibi una videollamada de enzo, atendí apoyando el celular en el espejo del hotel y sonreí saludandolo.
- hola, amor - me dijo sonriendo abiertamente, estaba con la espalda apoyada en el respaldo de la cama
- hola, en - respondi con la mirada fija en el espejo, estaba concentrada en lo que estaba haciendo, no tenía ganas de arruinarlo y tener que volver a empezar
- ¿que haces con esa camiseta puesta?- preguntó extrañado, yo baje mi mirada para observar lo que llevaba puesto y sonreí dando una vuelta para mostrarla mejor
- ¿que tiene? yo soy hincha del equipo dondejuega messi, siempre - contesté sonriendo de forma burlona mientras me apoyaba en el lavamanos
él se mordió levemente el labio inferior y negó con la cabeza.
- vo' sos una traidora, ya vas a ver cuando te tenga conmigo
mis mejillas se sonrojaron logrando que perdiera todo tipo de egocentrismo. fue su turno de sonreír, sabía lo que generaba en mi.
- ¿qué haces llamando? se supone quedeberíasestar yendo al estadio - dije intentando cambiar de tema para que se fuera toda la vergüenza en mi
- si pero quería escuchar tu voz, que el equipo me espere - me respondió acomodandose mejor en el respaldo de la cama
sonreí con ternura ante lo que había dicho, solíamos hacer eso en argentina. me llamaba antes de los partidos para hablar con un poco, según él lo tranquilizaba. me gustaba que hayamos traído otra vez aquella tradición.
- anda con tus compañeros que te van a matar, enzo
él se negó por lo que hablamos un rato más, supuse que debían estar apurados si a enzo no le importaba tanto.
