Nuestro ser Mercurial [Bellamione]

Capítulo 45

Hermione se dio cuenta del final de su quinta visita a Ma Griesly. Pasó a Coram por las escaleras y extendió la mano para sacarle la manga.
"¿Dónde están todos los jóvenes?"

En la penumbra del patio, los ojos marrones de Coram brillaban con algo oscuro. "Sospecho que la mayoría de ellos están almorzando en casa ahora mismo".

Ella agitó la cabeza: "No los niños, la gente de mi edad". Coram era el hijo mayor que había visto. La siguiente persona más joven fue una mujer unos años mayor que Hermione. "¿A dónde van los adolescentes?"

Coram tragó y miró a su alrededor. Cuando sus ojos se volvieron a ver con los de Hermione, estaban muy abiertos. "Se los llevan".

Se inclinó más cerca: "¿Quién los lleva?" Una mosca zumbaba alrededor de sus cabezas, y ella la apartó de su cara. "¿El Ministerio?"

Asintió con la cabeza, con los ojos más anchos. "Cuando la magia llega más a menudo, se los llevan".

"¿Por qué?"

Un encogimiento de hombros. "A las personas mayores no les gusta hablar de ello, pero los llevan a centros donde pueden vigilarlos mientras su magia madura. Cuando se hacen mayores, los atacen y los envían al mundo". Sus ojos cayeron: "La mayoría de ellos terminan aquí, o en Gryphon Rook".

Hermione asintió, comprensiva. Gryphon Rook era un barrio mágico al otro lado del callejón Knockturn. La mayoría de sus habitantes trabajaban en las fábricas, al igual que los habitantes del Programa de Vivienda del Ministerio, pero se sabía que era un lugar oscuro y sombrío. Lleno de crimen y pobreza. Hermione se había desviado demasiado cerca de la calle que condujera a Gryphon Rook en su segundo año, y su padre le había dado la conferencia más larga de su vida esa noche.

Entonces ella recordó la otra cosa que él había dicho: "¿Te atan?" El vínculo se guardó para aquellos que eran incapaces de aprender a controlar sus impulsos mágicos. Era lo más cruel que le podía pasar a una bruja o mago, en su opinión.

Coram se encogió de hombros: "No hasta el final. La abuela dice que todavía tenemos suficiente para marcar la diferencia. Es para que no tengamos demasiados accidentes, supongo". Su pie trazó un patrón en la tierra. "No podemos permitirnos varitas adecuadas, o escuelas de lujo, por lo que quieren asegurarse de que no podamos hacer mucho más. La abuela dice que vendrán por mí antes de que pase mucho tiempo. Ella trató de raspar lo suficiente como para enviarme a la escuela, pero..." Sus ojos oscuros brillaron con anhelo cuando los elevó a los de ella: "Haría cualquier cosa para ir a la escuela".

Algo se encendió dentro de ella, y ella puso una mano en su hombro. "No te rindas todavía".

xx

"-¡y luego atan a los niños!"

Hermione estaba en el salón de Malfoy Manor. Sentados frente a ella estaban el Señor Oscuro, el Cangrejo, los Carrows, el Tío Sev y Bellatrix. Su padre se sentó en la última silla, pálido pero alerta. Los había sorprendido al comienzo de la reunión, y aunque Amycus había hecho varios comentarios sobre la "delicada constitución de la línea Malfoy", el resto de ellos parecían felices de verlo. Hermione estaba ciertamente agradecida de que él estuviera allí, ella no quería hacer su propuesta sin su plena comprensión.

"Tengo dos propuestas", continuó, pasando el pergamino que llevó al Señor Oscuro. "Primero, liberar a los niños bajo custodia y comenzar a desvincularlos..."

Los murmullos de Crabbe y Amycus Carrow se dispararon, y el Señor Oscuro hizo un gesto agudo para callarlos. "Vamos, Hermione".

Tranquila por su expresión de interés, ella tragó. "Con la orientación adecuada, pueden volver a establecer el control sobre su magia. He estado leyendo la teoría de Corson sobre las encuadernaciones..."