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Hola a todos, ¡lo prometido es deuda! Espero que esta parte los satisfaga. Nota importante: Suelo ir haciendo revisiones una vez subo la parte. Esta no será la excepción. Continuemos con esta aventura...

-En otra parte del planeta se encontraba un pokémon contemplando la luna. Ya habían pasado muchos años desde su nacimiento. Había adquirido mucha experiencia. Lo que hacía lo llevaba a cabo porque era lo correcto, lo había aprendido de un niño entrenador tiempo atrás. Los recuerdos de su encuentro, sus palabras, sus acciones, las pocas veces que lo volvió a ver, lo que le comentaba su hermano sobre el mismo... ¿Por qué no podía dejar de pensar en todo eso? Mewtwo bajó su cabeza, observando a los pokémon que tenía a su cuidado. Se decía a sí mismo que cuidarlos debía ser su único objetivo o meta, pero su corazón ansiaba otra cosa... y lo único que este hacía era negárselo.

Minutos más tarde, un pequeño rosado llega a su lado. Ya tenía unos cuantos de días que no lo veía. Mewtwo lo recibe con amabilidad, cuestionándole el dónde se escabulló en esta ocasión; ya que no era algo novedoso que el pequeño se fuese a gastarle bromas a pokémon y humanos por igual. Mew saludó a su hermano, soltando unas cuantas risas en el proceso. Luego iniciaron su conversación por medio de la telepatía-

>Esta vez no fui a hacer travesuras, hermanito –Mewtwo se irritó ligeramente, pues no le gustaba cuando este le decía así, aunque literalmente sí fuera el menor-. Fui a ver a alguien importante.

>¿Quién puede ser tan importante como para que vayas a visitar por tanto tiempo? ¿Ho-Oh volvió a sus montañas acaso? –interrogó ya calmado-

>No, no tengo idea de dónde se metió Ho-Oh. ¿No quieres adivinar a quién fui a ver? –Mewtwo cerró los ojos, a sabiendas de que su hermano no le iba a decir si no le seguía el juego- Bueno, parece que no quieres saberlo; je, je.

>Ya, adivino... Fuiste a ver a Arceus –solo lo dijo porque sabía de sobra que Arceus es como el padre de su pequeño hermano mayor-

>¡No! Ja, ja, ja, ja, ja, ja... Te daré una pista, para que veas que soy muy bondadoso –Mewtwo rodó los ojos-. Es un entrenador.

>¡Un entrenador! –Sin dudas esa revelación sí que le llamó la atención- ¿Qué entrenador, Mew? Dímelo sin rodeos.

>Así no es divertido –levitó a su alrededor, pero Mewtwo lo sujetó de su cola-. ¡Ay!, ¡ay! Está bien, ya te digo. Deja mi colita, por favor –su hermano lo soltó-. Es ese entrenador que te confrontó hace tantos años y que viste hace poco en las montañas –Mewtwo se mostró sorprendido-. Sí, es Ash Ketchum.

>¿Y a qué fuiste a ver a Ash Ketchum? –Mew rio una vez más, pero esperó con paciencia para que le diera respuesta-

>Porque tú no dejas de pensar en él y los hechos vividos antes y después de conocerlo –Mewtwo frunció el seño-. Hermano, yo sé de sobra por qué te crearon los humanos, y aunque tú hayas tomado las riendas de tu propio destino, la verdad es que yo sé que tú amas las peleas. Por lo que fuiste creado nunca se desligará de ti y no sabes cómo estar en paz.

>¿A qué te refieres, Mew? –Ese comentario lo molestó, más que nada porque sabía que Mew tenía razón, pero quería seguir negándolo-

>No engañas a nadie, hermano. Es verdad que ayudas a los pokémon para evitar que los usen como te quisieron usar a ti en el pasado, pero la verdad es que tú amas enfrentarte a quien sea. Tú quieres demostrar que eres el mejor, el más fuerte, por eso siempre vas y luchas con otros pokémon legendarios, con el pretexto de que lo haces para no perder la forma y estar preparado ante cualquier peligro, porque no deseas que te vuelvan a someter como alguna vez lo hizo el Equipo Rocket –Mewtwo iluminó sus ojos, pues estaba comenzando a sentir mucha ira-. Está bien, tampoco puedo decir que eso sea un total pretexto, porque es bueno estar en forma y sé que en verdad no quieres llegar a pasar por una situación así –eso lo relajó un poco, volviendo sus ojos a la normalidad-. Mewtwo, fui a ver a Ash porque me enteré de que él participará en un enorme campeonato donde se determinará al mejor entrenador de todos los tiempos; lo llamarán Maestro Pokémon. Y aquí es donde entras tú. ¿No te gustaría ir a su lado y enfrentar a toda clase de pokémon para demostrar que tú eres el mejor?

Tengo que ser siempre el mejor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora