2 alfas tienen una relación, no es fácil estar con alguien de tu misma casta, pero apesar de ello los encuentros nunca paran.......puede que sea sólo por el sexo ó porqué realmente se aman, pero nada de eso importa cuándo uno de ellos encuentra a su...
Joaquín desde que se presentó cómo Alfa, supo que estaba dañado.
Él antes de aquel día, jamás se preocupó por cuál sería su casta, pero cuándo se presentó, no se sintió del todo feliz y al pasar los días fué peor.
Todos sus compañeros de clase se sentían felices y orgullosos por sus cambios corporales, pero Joaquín odiaba volverse cada vez más musculoso, odiaba su olor a Café y odiaba no sentirse atraído por omegas.
Tenía 13 años en ese entonces, y su madre le dijo que debía esperar...que no todos lo aceptaban enseguida, que quizás cuándo creciera todo cambiaría.
No pasó.
A los 15 años pasó por primera vez su celo con un Omega de su escuela, el chico estaría sólo el fin de semana en su casa y Joaquín pensó que era una señal y que debía pasar su celo con él.
Por supuesto su instinto hizo todo lo que se supone que debía hacer, pero cuándo la razón volvió a él por completo, se sintió fatal. No quería al Omega cerca de él, no sé sintió correcto estar con un Omega y con eso confirmó su suposición.
Él era un alfa dañado.
Pensó que nadie jamás lo entendería, que estaba destinado a vivir ocultando su rareza, pero todo cambió cuándo conoció a Nikolás.
Nikolás, llegó a su escuela a mitad de año y el primer día los pusieron a trabajar juntos, enseguida congeniaron, Nikolás era un alfa divertido y para el final del día, ya podían considerarse amigos.
1 mes de amistad bastó para que Joaquín le revelara su secreto, le comentó a Niko que no sentía atracción alguna por los Omegas y que odiaba su casta.
El rubio sonrió en grande.
— ¿Y has probado con algún Alfa?
En cuánto esa pregunta salió de los labios de Nikolás, Joaquín se puso rojo...lo había pensado muchas veces, sobre todo cuándo veía a Ethan, el capitán de fútbol, sin camiseta, pero eso lo transformaba en un alfa aún más dañado ¿No?
Nikolás no esperó una respuesta y le comentó que él se sentía igual.
A partir de ahí, su amistad sólo fué creciendo.
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A los 17 años, descubrieron que habían club nocturnos en dónde personas cómo ellos se reunían, siempre ocultos, siempre con cuidado.
Esperaron 1 año y a los 18, por fin pudieron entrar allí, y fué completamente liberador.
Allí fué la primera vez que Joaquín besó a un alfa y también fué allí, la primera vez que se fué con uno.
Tener sexo con un alfa, fué lo mejor...por fin se sintió completo y feliz.
Por supuesto en cuánto terminaron, Joaquín debió tomar sus cosas y marcharse lo más pronto posible ... Pero no es cómo si pudiera esperar que lo tratasen cómo a un Omega ¿No?
A finales de ese año, un poco antes de finalizar la escuela, los padres de Nikolás, descubrieron al rubio utilizando hormonas de Omega, lo cuál hacía que su aroma a cacao se disipara, por supuesto, ningún alfa sano busca eso...al contrario, todos quieren que su olor sea aún más llamativo, todos...pero no ellos.
Gracias al cielo, la familia Caballero fué comprensiva, lo abrazaron y prometieron cuidar siempre de él.
Fué algo tan hermoso que le dió la confianza a Joaquín para hablarlo con sus padres.
Contarle a sus padres fué difícil, su madre repitió una y otra vez que en cuánto apareciera su destinado, esa etapa pasaría. Que su destinado, le haría cambiar de parecer.
Su padre, lloró...con temor de que a su hijo lo descubrieran y quisieran dañarlo, Joaquín lloró con él y le prometió ser siempre discreto.
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Hoy tiene 20 años, se mudó con Nikolás a un apartamento cerca de la universidad y ambos están en su primer año de medicina.
Es feliz...casi todo el tiempo.
Está por comenzar su celo, y Niko está corriendo por todos lados para dejar agua, comida, toallas y algunas cosas que puedan ayudarlo.
Ama a Nikolás, su amigo siempre está allí, cuidándolo antes y después de su celo...apesar de que no está de acuerdo en que Joaquín pase sus celos sólo, siempre lo ayuda.
Mes por medio, debe pasar por éstos 3 días nefastos, en dónde su Alfa le exige a un Omega...y él se niega a ceder.
Está sobre su cama, empapado en sudor y siente que pronto su Alfa tomará el control por completo cuándo entra Nikolás.
— Iré a casa de Eduardo ¿Si? Dejé tu celular cargando justo a tu lado, si te quedas sin provisiones ó el dolor es demasiado por favor llámame. Te amo.
Joaquín asintió y Nikolás cerró la puerta.
Su último pensamiento, antes de que su mente dejara de pensar en algo más que su excitación, fué que quisiera tener una relación cómo la de Nikolás.
El tubio hace un par de meses conoció a Eduardo Barquín, un Alfa que estudia Psicología y es jugador de fútbol, bastante popular, chico de fraternidad y por supuesto, nadie sabe que está en una relación con Nikolás, un Alfa.
Apesar de eso, Eduardo y Nikolás están enamorados. Joaquín llega al apartamento y los encuentra abrazados viendo películas ó buscan panoramas para hacer juntos...salen cómo si fuesen amigos, pero ¿Qué importa? Se aman.
Ellos buscaron la forma médica de poder pasar sus celos juntos y desde ese día, Joaquín supo que Eduardo haría cualquier cosa por Nikolás.
Él quiere algo así, quizás algún día un Alfa esté dispuesto a cuidar sus celos y amarlo.
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