2 alfas tienen una relación, no es fácil estar con alguien de tu misma casta, pero apesar de ello los encuentros nunca paran.......puede que sea sólo por el sexo ó porqué realmente se aman, pero nada de eso importa cuándo uno de ellos encuentra a su...
Al día siguiente Emilio no apareció en la universidad y Joaquín supo que su celo había iniciado.
No quiso preguntarle nada a Eduardo, pero a pesar de eso el pelinegro al llegar en la tarde al apartamento comentó que Emilio había entrado en celo esa mañana.
— ¿Debió esperar mucho por Diego? — preguntó preocupado, el rizado es un idiota que lo rechazó, pero no quiere que su Alfa lo pase mal.
Eduardo le dió una mirada casi compasiva y negó
— Estaba con Diego en la habitación, así que no — se encogió de hombros — se suponía que irían a las habitaciones que dispone la universidad, pero se quedaron allí...hay varios chicos en la casa que están enojados por ello.
— Cómo si nos importara que el idiota no fuera capaz de arrastrar al desinfectante a un cuarto alejado. ¿Podemos hablar de otra cosa? — dijo Nikolás cortando la conversación al ver a Joaquín afligido
— Bien...yo iré a dormir, los amo y no sean ruidosos — dijo Joaquín levantándose del sillón riendo.
Ambos chicos se despidieron de él y continuaron viendo televisión mientras Joaquín sacaba su ropa y entraba en la cama torturándose con sus propios pensamientos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El segundo día de celo, Joaquín sentía que su alfa estaba por morir de tristeza...desde que despertó, sólo lo siente llorar.
Nikolás entró a su habitación y recién se dió cuenta que debería estar levantado y de camino a la universidad.
— Hola cariño — saludó el rubio — ¿Irás a clases?
Joaquín no dijo nada, sólo negó con un leve movimiento de cabeza.
— Bien...me quedaré contigo, podemos pedir comida chatarra y ver alguna seríe que te haya cautivado.
— No Ni...no es necesario
— Pero lo haré
— No quiero que lo hagas — dijo sonriendo — gracias por querer hacerlo...pero honestamente quiero estar sólo.
Nikolás pareció pensarlo un momento y luego asintió.
— Bien, pero a la tarde traeré comida chatarra ¿Bien?
— Gracias, te amo
— Y yo te amo a tí.
Le lanzó un beso y salió de allí.
Cuándo Joaquín estuvo sólo en su cuarto, volvió a llorar.
Su alfa le pedía que llamara a Emilio, que quizás si daba alguna señal el rizado les pediría que fueran con él. Y Joaquín se odiaba por ser un alfa tan ingenuo...finalmente se durmió.