Tenía que ser Clyde

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Craig

Al despertar sentí un sentimiento de felicidad inundar todo mi cuerpo, solo tenía ganas de saltar y gritar de felicidad, y no solo por que fuera sábado, sino por Tweek, había soñado con él, tenía el sentimiento de verle como una persona diferente por cosas que hizo en el sueño, solo recuerdo partes, pero son hermosas, le recuerdo sonreír y reír a carcajadas, relajado, feliz, mirándome, cuando me di cuenta de algo, no recuerdo nuestra conversación pero recuerdo... besarle y darle la mano. Lo único que odio es que fuera solo eso, un sueño.

Me levanté tratando de no despertarle y miré mi teléfono, tenía mensajes de Token.

T: Lo siento, estaba con Nichole ;)
Hay que estudiar de la página 120 hasta la 129, suerte amigo.

Yo: Gracias.

T: El problema es que hoy no vas a poder hacerlo.

Yo: ¿?

T:Clyde y sus ideas, quiere ir a la montaña, dice que ha leído no sé qué de ejercicio, en fin, todo sea por impresionar a Babe o lo que sea.

Yo: Joder, dile que estoy enfermo o cualquier cosa, se lo creerá.

T:...

Yo: ¿?

T:Creo que deberías mirar por la ventana...

Efectivamente miré por la ventana y ahí estaban esos dos idiotas que tenía por amigos.

Hace unos segundos solo fingía no estar emocionado, pero ahora toda mi emoción se había ido a la mierda.

- ¡PREPARA UNA MOCHILA Y TE VIENES!- gritó Clyde haciéndome la seña del pulgar hacia arriba así que efectivamente yo le levanté el dedo del medio.

Cuando de repente a los dos se les ocurrió acercarse, ¿acaso querían entrar?

Bajé a la sala principal y les miré fijamente entrar en mi casa.

- Déjanos descansar un rato, que este idiota me ha hecho patearme toda la ciudad en buscar de comida y bebida.- dijo tirándose al sofá junto a Clyde.

Pensé en Tweek, ellos no sabían que él estaba aquí y como se enteraran me harían preguntas, lo que tenía que hacer era sencillo, mandarlos a la mierda durante un rato y decirle que nos veíamos en la montaña o donde fuera, no me importaba, solo quería que se fueran.

Pero fue demasiado tarde ya que escuché la voz recién despertada de Tweek.

- ¿Craig?- preguntó bajando las escaleras.

Pude ver de reojo como los dos del sofá me miraban confundidos.

- Buenos días, princesa.- habló Clyde subiéndose de pie al sofá para saltarlo y acercarse a Tweek, pero yo lo empujé haciendo que volviera a caer en una voltereta.

- Oh, genial uno más, vamos a ir como diez personas.- dijo Token pasándole una mochila vacía a Tweek.- llénala con lo que te parezca.- le sonrió para luego sonreírme a mi.

Era raro que no dijera nada sobre lo sucedido.

- Vámonos Clyde, tenemos que recoger a Butters y Kenny.- volvió a hablar.

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