¡VOLVÍ! Sé que prometí maratón el lunes pero me enferme está semana y aún así tuve que ir a trabajar ya que no puedo faltar porque como les comenté acabo de empezar y no quiero tener faltas.
La buena noticia es que aún enferma logré editar cinco capítulos más, el maratón iba a ser de 5 capítulos pero ahora para compensarles la falta va a ser de 10 capítulos 🥰. Aquí les dejo el primero de adelanto y mañana estaré subiendo los otros 9 que faltan .
Que disfruten! 💜✨
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Camila
Cuando me despierto estoy alterada, mi mente es un turbio estanque de agua, y estoy tratando de ver a través y hasta el fondo. Sólo me lleva un segundo recordar los acontecimientos de la noche anterior, y mis ojos se abren al mismo tiempo, mi cuerpo se levanta y se sienta. Durante una fracción de segundo, el mareo me sobrepasa y luego se desvanece.
Frenéticamente, miro mi cuerpo y me encuentro todavía vestida. Al apretar mis muslos, no siento ningún dolor.
No me tocó, al menos no sexualmente.
Mirando el lugar a mi lado donde se acostó antes de que me durmiera, me doy cuenta de que está vacío. El alivio me inunda las venas, pero ese alivio es efímero cuando escucho una garganta carraspeando al otro lado de la habitación.
—Buenos días, Camila. —Su voz ronca me hace temblar. (NOTA: a todas nosotras camz, a todas)
Mirando lentamente hacia ella, encuentro que está apoyada contra la pared, sin llevar nada más que un par de pantalones cortos y una camiseta blanca, un surtido de tatuajes grabados en su piel. Puedo sentir sus ojos sobre mí, los siento observando la constante subida y bajada de mi pecho.
Cuando levanto la vista para mirar su rostro, veo los arañazos que dejé en su cara anoche. Todavía no puedo creer que lo haya hecho, y todavía espero una revancha.
Hay una bandeja de comida en la mesa junto a ella, y mi estómago retumba con fuerza mientras la miro. Tengo hambre, pero no me muero de hambre.
—¿Hambrienta? —pregunta lo obvio, claramente capaz de escuchar mi ruidosa barriga—. Hice que una de las criadas trajera el desayuno. Deberías comer mientras discutimos lo que va a pasar a continuación.
—No tengo hambre —me acuesto y tiro de la sábana hacia arriba.
Es como si no importara cuántos trozos de tela nos separen o cuánto espacio, todavía me siento como si estuviera expuesta, a un segundo de estar completamente desnuda.
Encogiéndose de hombros como si no le importara si como o no, saca un trozo de fruta del cuenco y se lo lleva a la boca, masticando muy lentamente. —Como quieras. ¿Quieres oír lo que va a pasar después, o tampoco te interesa?
Me está provocando, y por mucho que quiera entregarme y negarme a jugar su juego, no hay nada como no saber cuál es el próximo movimiento de tu oponente. Para mí está claro que esto es un juego para ella, y yo soy el peón involuntario.
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Inicios Salvajes {Camren GP}
RomanceComenzó con una sola mirada, mi obsesión, mi deseo y necesidad de poseer a la dulce e increíblemente ingenua Camila Cabello. Como una ladrona, llegué en medio de la noche y la robé de su castillo protegido y la inst...