Let Me Fix You || Simon "Ghost" Riley

Capitulo 9.

-¡Cam! -llamó Soap con esa voz energética que sólo él podía tener luego de entrenar.

La mujer observó de reojo a quien la llamaba y tras terminar su conversación con uno de sus compañeros enfermero, se volteó sonriendo.

Una vez cerca, el sargento abrió sus brazos con la intención de abrazar a su amiga como parte de su saludo, sin embargo, no abrazó absolutamente nada pues esta se agachó y evitó al hombre.

-Demasiado sudado. -explicó.

Tras Soap se encontraba Ghost, a quien realmente no sabía cómo saludar. No lo había podido ver en toda una semana desde que se volvieron pareja, por lo que no habían conversado más detalles de su relación.

Tratando de no hacer obvias sus dudas, sonrió y lo saludó como siempre, saltando directamente a platicar.

-¿Entrenaron juntos?

-No.

-Si. ¡Hey! Si solo estamos tu y yo en el gimnasio entrenando, ¡Entonces estamos entrenando juntos!

Ghost giró los ojos irritado, a lo que la chica rió. Ver al par con sus típicas interacciones luego de una larga misión la hacía sentir feliz, especialmente cuando no regresaban en una camilla o llenos de heridas.

-Bueno, los dejo para que vayan a tomar un baño, apestan.

MacTavish sonrió y se adelantó, cuando este por fin desvió la mirada de sus acompañantes Ghost tomó la muñeca de su pareja y simplemente hizo un gesto para que lo siguiera.

Oh.

Ella entendió de inmediato, lo siguió a una distancia razonable y con muchísimo sigilo llegaron a la habitación del mayor. No había necesidad de dar instrucciones, tan pronto ingresaron al lugar se dirigieron a la ducha, donde se deshicieron de todas sus prendas.

Una vez dentro, dejaron que sus cuerpos se mojaran por completo en busca de la comodidad que traía el agua consigo. Una vez que estaban más cómodos, la chica envolvió a su pareja en un abrazo frente a frente.

-Te extrañé. De haber sabido que tendrías una misión tan pronto aquel día, hubiera aceptado el baño juntos.

-Lamento no avisar.

-No hay problema, ambos estábamos distraídos. -rió ella, alzando la mirada con una gran sonrisa.

Iba a besarlo, pero pararse de puntillas podría hacerla resbalar, así que mejor se quedó en su lugar. A Ghost no se le pasaba nada, cuando notó sus intenciones sonrió levemente y la alzó, sacando un grito ahogado de sorpresa de parte de ella.

Al pensar que se caería, se aferró con sus piernas y brazos al torso de su contrario.

Ah, así que esto no iba a ser una ducha conmovedora.

[...]

Cameron quería conversar sobre ellos luego de la ducha, pero habían perdido ya un montón de tiempo y los dos eran de las personas más ocupadas en la base.

Recién llegó un helicóptero con montones de heridos, causando que quien hace unos minutos estaba felizmente despreocupada con su pareja, ahora caminara por toda el área médica atendiendo personas.

Estaba acostumbrada a tratar a cientos de personas a la semana, después de todo eran soldados en una base militar y ella era la directora de aquel hospital. Sin embargo, ver a aquel escuadrón con heridas por todas partes le daba mala espina.

Claro que conocía a sus pacientes, tenía que, por ello es que estaba al tanto de la misión a la que habían sido mandados hace un tiempo. No eran de los mejores, y el hecho de que regresaran así significaba que habían subestimado el nivel de dificultad de la misión.

Todo eso significaba una sola cosa. Pronto mandarían a uno de sus mejores escuadrones a lidiar con la situación. ¿Y quién más si no la Task Force 141?

La mujer chasqueó la lengua irritada con su propia conclusión. Una vez finalizó su trabajo en cirugía y le dejó lo menos complicado al resto de sus compañeros, salió en medio de la madrugada para ir a descansar en su habitación.

-Dios, que hambre. -se quejó con la nada, cuestinandose si debería hacer una parada rápida en la cafetería común o volver al área médica por uno de los dulces que guardaba en el cajón de su escritorio.

Sus pensamientos se dispersaron cuando un gran cuerpo tras ella, y que no había percibido en lo absoluto, la rodeo de manera que reaccionará como reaccionará, no tenía forma de escapar. Al principio se asustó, preguntándose si así moriría, luego notó que aquella figura la rodeaba con tanta delicadeza que terminó por sonreír bajo la mano que tapaba su boca.

-¿Simon? -cuestionó cuando la mano se desprendió de ella, girando su cuerpo para encararlo. -Tu forma de saludar me sorprendió, casi pensé que moriría. -comentó riendo.

El hombre frente a ella se mantuvo en silencio, Cameron siendo incapaz de leer cualquier emoción que hubiera tras la máscara de cráneo, simplemente sonriendo hasta que este deseara hablar.

-Saldremos en una misión. -espetó por fin.

Ella lo miró con tristeza por un momento, estaba segura que sería una misión larga y peligrosa, probablemente de donde volvió aquel escuadrón en su hospital hace un rato.

-Vayamos a mi cuarto, ¿Sí?

Su contrario asintió y caminaron hasta el área de mujeres, solo concurrido a esa hora por una que otra guardia de turno nocturno.

Una vez en el lugar, se pusieron cómodos en la cama luego de que la chica se cambiara a prendas más cómodas y limpias de sangre.

-Vamos, dime los detalles, aunque me hago una idea general.

Ghost comenzó a hablar sobre la misión, omitiendo detalles innecesarios o que entraran en lo confidencial. Resultando que era una misión de 3 meses al otro lado del mundo, casi estraba en lo suicida, pues tenían poca información del lugar y a lo que se enfrentaban.

Ella se mantuvo en silencio pensando, hasta que su contrario la sacó de sus pensamientos.

-Cam. -llamó.

-Así que tres meses fuera, "mínimo" eh... Luego de que por fin vuelves de una misión de 1 semana, parece que los superiores están en contra de nuestra relación. -bromeó tratando de levantar los ánimos.

Se acomodó entre los brazos de su pareja y suspiró resignada, puesto que no había mucho que pudiera hacer más que esperarlo con los brazos abiertos y desear que no le pasara nada.

-Estaré bien, preguntaré aquí y allá como te va en la misión, tak vez eso relaje mis nervios.

Sintió el cuerpo del hombre tensarse, lo cual le recordó que tenían que hablar de su relación.

-Si, quiero hablar de nosotros.

Ghost pensó lo peor con esa frase, no llevaban más de una semana y ya lo había arruinado, estaba seguro de que ella ya se había arrepentido tras darse cuenta que salir con alguien como él era aburrido y estresante. Sin embargo, sus preocupaciones fueron interrumpidas por su mano siendo tomada con cuidado.

-No lo había pensado porque no nos habíamos visto, pero hoy me estuve cuestionando si deberíamos mantener la relación como un secreto. Sé que la milicia no prohíbe las relaciones entre compañeros, pero desconozco si tu te sientes cómodo con la gente sabiendo de nosotros.

Tras el silencio pensativo del hombre, ella solo esperó.

-No creo que sea una buena idea. -respondió por fin. -Tengo muchos enemigos y no confío en casi nadie dentro de la base.

-Ya veo.

-No quiero que te vuelvas víctima de algo por mi culpa.

-No te preocupes, Si. Si te hace sentir más seguro podemos mantener las cosas como ahora, solo entre nosotros. Y si es necesario, podrías solo comentarle al capitán John o a Soap si te sientes cómodo.

-Lo pensaré.

-De acuerdo, sin presiones. Creo que eso era todo lo que tenía en mente. ¿Quieres descansar? Mañana viajarás un largo rato.

Su contrario asintió y se recostaron a como pudieron en la pequeña cama.