1 : Quirófano + Gitaramatk

33 5 0
                                    

Capítulo 1






El azul del cielo o el negro del infierno.
Lo bueno o lo malo.
Ángel o demonio.
La vida o la muerte.
Lo correcto o lo incorrecto.

Uno, dos, tres... Uno, dos, tres... Uno dos tres...

Pip... Pip... Pip...

—Doctora la presión arterial del paciente está disminuyendo.


La voz de la enfermera a mi lado me pone en alerta, su presión está bajando y debo de darme prisa.


—La presión sigue disminuyendo doctora —vuelve a avisar.


La enfermera que tengo a mi lado me limpia el sudor de la cara mientras la otra solo espera mis indicaciones.


—Solo un momento más, ya casi termino.


Sigo con lo que estoy asiendo y de repente el sonido de monitor roba toda la atención del cuarto de cirugía.

Pip, pip, pip, pip, pip, pip, pip...

El monitor se vuelve loco de tanto ruido y mis ojos se enfocan en las pequeñas líneas que muestran.



—Doctora Santiago, Doctora Santiago lo estamos perdiendo.


No soy capaz de responder, lo único que hago es ver el monitor.


—¿Yuyu estás bien? —dice la enfermera que está a mi lado mientras me toma del brazo— ¿Yuyu..?

—Si, estoy bien solo... —corto la frase antes de terminarla y regreso la vista a mi paciente quien está perdiendo la vida.— Preparen el desfribrilador.


Después de decir eso me pongo en posición y comienzo con los masajes de reanimación.


—El desfribrilador está listo doctora —avisa.

—Carga a 100 Joules.

—Listo.

—Despejen, 1,2,3.


Acerco el desfribrilador al cuerpo del paciente y no hay ninguna reacción.


—Carga a 150.

—Listo.

—Despejen, 1,2,3.


Hago el mismo procedimiento anterior y el paciente no reacciona.


—Doctora podemos usar epinefrina.

—No, aún no. —respondo de inmediato— Carga a 200.

—Listo.

—Despejen, 1,2,3.


Pip, pip, pip, pip, pip, pip, pip...

El sonido del monitor hace eco en la habitación, y las líneas en el terminan con cualquier esperanza. Demasiado tarde, se acabó...

Alzo la mirada y la fijo en el reloj de la pared.



—Doctora... —susurra la enfermera frente a mi.

—Hora de muerte 4:38 pm. Gracias por su trabajo, lo hicieron muy bien.


Me alejo del quirófano y sin más salgo de la habitación, escucho algunos murmullos pero los ignoro completamente.  Llegó al área del lavado y me quito la bata, después comienzo a lavar mis manos y quitar cualquier rastro de sangre. Su rostro sigue en mi mente, la sangre, el sonido del monitor y el último latido de su corazón.



HopelessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora