21 Misión

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Quackity hijo, vamos, debes despertar, estás en el campo de las flores eternas, vemos que te gustan mucho las plantas, siempre apareces en lugares así. ¿Te gustó nuestro regalo?

¿Mmm? ¡Dioses! Muchas gracias por devolverme mi lado híbrido.

Quackity extendió sus alas y comenzó a elevarse tratando de seguir las voces de los dioses. Estaba muy feliz de estar ahí, sentía el aroma dulce de las flores, la refrescante brisa y el cálido clima. La mayoría de las veces dudaba sobre ese tipo de sueños, los dioses en Karmaland eran muy diferentes a los que conoció en su antiguo hogar. Se recostó sobre el pasto viendo el cielo, aún no entendía como llegaba a esos hermosos prados. 

Dioses quisiera preguntarles algo, bueno, 2 cosas.

Si está en nuestras manos podremos contarte, hay cosas en las que no podemos inmiscuirnos.

Bueno pues. ¿Por qué siempre llego a estos prados? ¿Estoy en peligro nuevamente? Porque tuve un mal presentimiento ayer en casa de Rubius.

El prado está disponible para todos nuestros hijos, solo que deberían aparecer cuando dejan el plano terrenal, en tu caso casi lo abandonas la primera vez, es por eso que lograste una conexión con este lugar, puedes ir y regresar cuando desees, a menos que dejes el plano en el que vives.

Es verdad, casi me doy de baja esa vez.

Con respecto a tu segunda pregunta, tu instinto de híbrido te advirtió d-

¡Quackity! ¡Vamos que tienes una misión! Willy vino a recogerte, no deberías hacerlo esperar.

El pelinegro abrió los ojos confundido, pudo notar que Lana estaba frente a él pasándole la voz, se dio cuenta de que había regresado del prado, no pudo escuchar lo que los dioses le iban a contar.

Buen día Lana, me hubieras dado unos 5 minutitos, igual iba a levantarme.

Willy está esperando hace 15 minutos, dice que Merlon los llamó a la plaza central. 

¿El viejito? Bueno ya voy, iré a lavarme la cara...

Quackity no se molestó con Lana, si había regresado del prado podía volver a intentar comunicarse con los dioses. Había olvidado por completo la misión del día de hoy. Merlon no les dijo de que trataba, solo que les daría el anuncio en la plaza.

Willy, buen día, lamento la demora.

Hola Quackity, descuida, Vegetta me dijo que recién estaban en camino.

Si cierto, tenía que hablarte de Vegetta, le avisaste lo de Rubius, sé que no fue con mala intención pero ¿Y si se moría? Piense señor, casi se nos va.

Lo sé, pero Vegetta jamás dejaría a Rubius morir, confiaba mucho en que sería de ayuda. Si nadie le avisaba y pasaba algo malo... él jamás nos perdonaría.

Quackity vio con algo de sorpresa al albino, quizá era cierto. A Vegetta no se le puede ocultar nada, aún así sentía que hubo algo en el pasado que lo obligó a ser así de recto.

Ya ya apá~ todo salió bien al final. 

Sí, estoy muy feliz por eso. Dijo Willy sonriendo. El azabache admiró sus mejillas rosadas acompañando la gran sonrisa de su "padre". Desde que llegó al pueblo fue adoptado por 2 de los héroes. Aunque fuera un simple juego de roles no le molestaba la idea. Se sentía cómodo.

En el centro de la plaza se encontraban Vegetta con Rubius en silla de ruedas, Alexby, Luzu, SapoPeta y Merlon. El mensaje fue breve, tenían informes sobre avistamientos de personas ajenas al pueblo en las afueras, tenían que vigilar la zona para descartar cualquier peligro. Ya que algunos tenían tareas pendientes y no todos debían irse, se le asignó la tarea a Luzu y Quackity, quería que el castaño le enseñe la zona y la manera de cumplir las misiones. Hubieran elegido a Rubius y Quackity pero el oso seguía recuperándose.

Luzu se aproximó a Quackity para acordar verse en unas horas para salir, era mejor apresurarse para descartar que los avistamientos sean un peligro inminente para el pueblo. El azabache se fue hacia su casa y comenzó a alistar sus cosas. Ropa, armas, comida y semillas. Observó el diario que le dio Luzu sobre su mesita de noche. Quizá escribir lo ayudaría en caso de un bajón de ánimo. Lo alistó y fue al comedor a dejarle una nota a Lana. En ese momento escuchó un toque en la puerta, era SapoPeta.

Hola Quackity, veo que ya alistaste tus cosas, vine a traerte un regalo. ¿Te sientas conmigo en la entrada?

¡Por un regalo lo que quieras SapoPeta! Perame tantito que le dejo esta nota a Lana, me matará sino. -Dijo dejando la nota en la mesa y saliendo con sus cosas. A ver pues, suelta.

Seguro que Luzu ya te contó sobre nuestro proyecto de contenedores de magia. 

Ah eso... pero SapoPeta... es desperdiciar magia...

Nada de eso Quackity, ya eres nuestra familia, cuidarte no es un desperdicio de nada. Mas bien avances como estos contribuirán al futuro.

Pues que soy el puto conejillo de indias ahora...

Ten, supuse que píldoras te recordarían a medicina y el punto no es que te sientas enfermo. Hice dulces de tamarindo con magia en el interior, espero te gusten.

¡Ora pero que buen regalooo! Me dan ganas de comerlo todo ahora mismo.

Tienes que racionarlo, irán a las afueras y no sabemos que puede pasar, es probable que les tome 2 semanas, puse regular.

Gracias SapoPeta, espero no haya nada malo fuera, quiero que el pueblo de Karmaland viva su vida en paz sin caos ni desgracias...

Somos un pueblo fuerte, pequeño. Aún así entiendo tu punto. Como druida siempre veo por los demás antes que por mí mismo, no me incomoda dedicarle casi 451 años de mi vida a eso.

¿Tan viejo estás? Ni pareces por lo mamado de tu cuerpo.

Pues gracias Quackity -dijo SapoPeta riendo- supongo.

Ya llamé a Luzu, dijo que vendría dentro de poco. ¿Me cuidas a Lanita SapoPeta? Sé que puede sola pero ya sabes, me gusta saber que está bien.

Claro, te prometo que la cuidaré muchísimo. Es una bruja poderosa también, quizá hasta ella me salve a mí antes que yo a ella.

No me sorprendería -dijo riendo el azabache.

Luzu comenzó a divisarse a la dstancia, veía con su maleta de escursión en la espalda, por su parte Quackity solo tenía su espada en la espalda y su collar de slime con las demás cosas. Luego de un saludo comenzaron a caminar a las afueras del pueblo. SapoPeta se despió de ellos deseándoles buena suerte. Que nada malo les pasara.






Holi, no se porque pero me dio como unas punzadas en el corazón y me asusté feo, conclusión: ando muy estresada, por eso vine a escribir lo que me faltaba de este capítulo, 3 más y me daré un descanso para no sobrecargarme con nada.

Justo me salieron sugerencias como pericarditis en google y me acordé de la enfermedad que le puse a Quackity capítulos anteriores, cuando le dolía mucho el corazón xd ¿Coincidencia? I dont know.

Los dioses no le iban a especificar de qué tenía que cuidarse Quackity, solo que debe estar alerta, pero lástima que no escuchó eso.

No, no les pasará nada malo en el viaje a las afueras de Karmaland, luego sí jajaja ok ya~

Espero estén disfrutando la historia :3

Muchas gracias por leer, no se olviden de votar y tomar awita. Loviuuu lectoreeeeeess~


Una Parte de mi Corazón 1ra Temporada (Hanahaki) Luckity~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora