Capítulo 27 - I Know Who Are You.

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returning to the present.

Narrador Omnisciente:

Al llegar a la casa de Ted, los chicos estacionaron el auto y Finn tocó la puerta. Conan fue quien la abrió.

— ¡Qué onda! Pasen, por favor —dijo Conan con una sonrisa cordial.

Al entrar, la atmósfera se tornó tensa por un momento, pero pronto los saludos y las risas comenzaron a fluir, rompiendo el hielo y dando paso a una cálida bienvenida.

— Hola, Stanley —saludó Julia, mientras Stanley levantaba la mano en señal de saludo.

— En realidad, solo vine a entregarles sus regalos. No quiero hacer incómoda la situación —explicó Stanley, haciendo una mueca de incomodidad.

Todos lo miraron, sorprendidos.

— Vamos, quédate —dijo Ted con una sonrisa acogedora.

— ¿En serio? —preguntó Stanley, y al ver que todos asentían, agregó—: Está bien.

Se quedaron y participaron en diversas actividades. Desayunaron juntos, y aunque varios notaron los chupetones en el cuello de Stanley y Liv, optaron por no mencionar nada, manteniendo el ambiente relajado y amigable.

Durante la entrega de regalos, Stanley repartió ropa a todos sus amigos. Sin embargo, cuando llegó el turno de Jenna, Stanley le entregó algo diferente: un cassette acompañado de una carta. Al principio, Jenna dudó en aceptar el regalo, pero tras la insistencia de Stanley, finalmente cedió y lo aceptó.

Más tarde, cuando la noche estaba llegando a su fin y todos se preparaban para irse a casa, Stanley notó que el cassette y la carta que le había dado a Jenna estaban abandonados en una mesa apartada. Mientras Jenna se despedía de todos, Stanley, sin decir una palabra, tomó el cassette y lo deslizó discretamente en el bolsillo de la chaqueta de Jenna. Aunque la decepción y el dolor se mezclaban en su pecho, sabía que era lo correcto dejarle ese mensaje, incluso si ella aún no estaba lista para escucharlo.

La despedida entre Jenna y Stanley fue, en cierto modo, tanto extraña como conmovedora. Después de intercambiar los típicos deseos navideños, Stanley hizo algo inesperado que dejó a todos sorprendidos: se acercó a Jenna y la abrazó. Al principio, Jenna intentó apartarse, incómoda por el gesto, pero algo la detuvo, y finalmente correspondió al abrazo.

Ese abrazo, aunque breve, parecía ser un consuelo muy necesitado para ambas. Sin decir una palabra, Stanley añadió un gesto más íntimo, dejando un suave beso en la frente de Jenna. Jenna se quedó paralizada, sorprendida por el inesperado cariño, pero eligió no decir nada, dejando que el momento fluyera en silencio. Fue un instante cargado de emociones, donde el peso del pasado y los sentimientos no expresados quedaron suspendidos en el aire, envolviendo a ambas en una especie de tregua momentánea.

Los chicos también quedaron sorprendidos por la escena, y el ambiente se llenó de tensión cuando Sadie, siempre la más directa del grupo, no pudo evitar bromear:

— ¡Ya dense un beso, pues! — gritó con una sonrisa juguetona.

Stanley rió al principio, intentando restarle importancia al comentario, pero pronto su sonrisa se desvaneció. El silencio que siguió a la broma fue casi palpable, mientras todos observaban la reacción de Jenna y Stanley.

Jenna, sintiendo la presión de las miradas, fijó su atención en Stanley, sus pensamientos un torbellino. Finalmente, Stanley también dirigió su mirada hacia Jenna, con una mezcla de confusión y curiosidad en sus ojos. Fue entonces cuando Schnapp, siempre perspicaz, levantó sus cejas con un gesto que parecía decir "¿Y ahora qué?", pero Jenna simplemente negó con la cabeza, como si quisiera decir que aquello no iba a suceder.

Soulmates - Jenna Ortega x Fem.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora