Un futuro con el

13. Una conversación importante

Era el día siguiente de la discoteca, sinceramente, no tenia ganas de hablar con nadie ni salir de la cama pero lo tenía que hacer. Me levanté y me vestí. Me pude un chándal cómodo y baje al salón. En el salón estaba Ale vestido con el desayuno en la mesa mientras miraba el móvil pero cuando se dio cuenta que había bajado lo dejo.

- Buenos días Ale.

- Buenos días, he hecho el desayuno.

- No hacia falta pero gracias.

- No hay de que. Bueno, tienes ganas de hablar con el?.

- Sinceramente no.

- Por? Llevas tiempo esperando a esto.

- Lo se Ale, pero después de todo no se ni siquiera que quiero hacer.

- Bueno, si quieres, cuando acabemos de desayunar, te vas al entreno del Barça, yo me quedo aquí vigilando y tú hablas con él y tú hermano.

- Seguro que no quieres venir?.

- Segurisimo.

Acabe de desayunar rápido ya que quería ver a mi hermano. Guarde todo y ayude un poco a Ale y después me fui al entreno.

Cuando llegue al entreno, fui a las gradas y me senté a mirarlos entrenar. Estaban ya todos entrenando y aún nadie se habia dado cuenta de mi presencia. Hasta que Pedri se dio cuenta y le hizo un gesto de que si luego podía hablar con el.
El entreno se pasó rapidísimo asique salí afuera nerviosa y me quedé esperando con el móvil.
A los minutos, salió Pedri con mi hermano y vi como Ferran venía corriendo hacia mi. Cuando llegó a mi, me abrazo y yo le abraze a el contenta ya que en verdad, le había echado mucho de menos.

- Dios mio, esto no es un sueño, no? Estas aquí, Emma?.

- Si, tranquilo.

- Joder, te he echado mucho de menos.

- Y yo a ti...

Estuvimos un buen rato abrazados hasta que Pedri tosió apropósito para que nos separamos, cosa que hicimos y los dos nos quedamos mirándolo.

- Emma, podemos hablar un momento?.

Yo solo asentí y me aleje un momento con el.

- Mira, perdón por no cumplir la promesa, si? No se ni siquiera como han sacado esas fotos. Pero en serio, perdón. No sabía que hacía en ese momento y no sabes de verdad cuánto me arrepiento de haber hecho eso. Ya no me habló con ella, asique porfavor, perdoname. Quiero estar igual que antes contigo. Pero si quieres, nos damos un tiempo...

- Pedri, tranquilo, si? Te perdono, y perdón yo también por ayer haberte hablado así. Y si, porfavor, dame un tiempo. Y por cierto, ayer en la discoteca escuché lo que le dijiste a mi hermano de mi.

- Que?

- Si, de que te arrepentias demasiado, y que era la niña que te alegraba el día, y más.

- Joder, que vergüenza.

- Tranquilo, es muy bonito de tu parte.

Después de esa conversación, nos dimos un abrazo y volvimos a donde estaba mi hermano esperándonos de brazos cruzados.

- Que, ya habéis vuelto con vuestro lío parejita?

- Callate Fer.

- Bueno, yo me voy ya que está Ale en mi casa esperándome.

- Es tu novio?- Pregunto Pedri.

- No, es solo un amigo.

- A vale vale.

Después de eso, me fui a mi casa y ellos a la suya.

Llegué a mi casa y estaba Ale en el sofá mirando el móvil.

- Que tal todo?

- Bien, lo hemos solucionado ya todo pero nos vamos a dar un tiempo.

- Ah vale.

- Te pasa algo?

- No, no es nada, tranquila.

- Esta bien. Quieres ir ahora al paseo marítimo de aquí y así ves la playa?

- Si porfavor.

Cada uno subió a su cuarto, nos pusimos ropa de verano y nos fuimos a la playa caminando ya que estaba a unos diez minutos. Al llegar, había mucha gente, cosa que me daba miedo ya que iba con un futbolista de mi edad más o menos y se podían inventar rumores o hacernos fotos pero intenté olvidarme de eso.
Después de estar minutos caminando por el paseo y parando por tiendas, nos paramos en una heladería a comernos un helado ya que hacia demasiada calor.

- Buenas tardes chicos, de que queréis el helado?.

- Yo de vainilla.- Dije yo.

- Yo de lo mismo que ella porfavor.

- Perfecto.

El señor de la heladería, que me conocía perfectamente ya que había ido demasiadas veces a esta heladería, nos hico los helados al minuto y nos lo dio. En total, nos costó 2 euros en total, cosa que me parecía muy barata.

- Tan barato dos helados?.- Pregunto Ale mientras se comía el helado mientras mirabamos el mar.

- Si, aquí es muy barato todo. En Argentina cuanto cuesta un helado?.

- Entre 75 o 80 pesos más o menos.

- Y eso cuántos euros son?

- Pues como 4,09 euros creo.

- El doble, básicamente.

- Pues si.

Seguimos paseando por la playa y sinceramente no pasó nada malo que me podía esperar. Hasta que nos encontramos a Pedri sólo paseando y se acercó a nosotros.

- Hola Emma y hola Garnacho.

- Hola.- Dije yo.

- Que hacéis por aquí?.

- Nada, estábamos hablando.

- Oh entiendo. Y tú Garnacho, cuanto tiempo te quedas aquí en Barcelona?.

- Un poco menos de un mes.

- A vale, pues a ver si otro día nos vemos, chao chicos.- Dijo Pedri aunque lo notaba un poco raro.

Seguimos caminando hasta que nos cansamos y nos fuimos a mi casa a dormir para el día siguiente.