Ready or Not? | Scream 4

Capítulo 21

El sol de la mañana luchaba por hacer una gran impresión a través de las nubes cuando el jefe de la policía de Roseville, Marvin Rorke, pisó el acelerador para acelerar su camino por las calles despobladas de la ciudad. Su segundo al mando acababa de llamarlo para que se levantara de la cama donde se había cometido el último crimen en la ciudad.

El Sheriff normalmente tardaba más de cinco minutos en prepararse y salir de su casa. Después de todo, los muertos podían esperar un par de minutos más. Entonces, ¿por qué se había apresurado a salir en un tiempo récord ahora?

Fue porque este fue el primer caso en el que la víctima fue descubierta con vida. Aunque esto por sí solo daría la impresión de que el sospechoso no era el objetivo de su asesino, el sheriff discrepaba. Podía sentirlo en sus huesos.

Al llegar, dobló la curva y frenó, deteniendo el coche hasta donde ya había estacionado una fila de coches de policía de aspecto similar. La cinta de la escena del crimen que rodeaba el área le daba una sensación de aprensión, junto con las luces rojas y azules que atravesaban la relativa oscuridad. Ya había innumerables equipos de noticias en la escena, ocupados filmando el área, y aunque no tener un cuerpo hizo que el crimen fuera menos sensacional, parecía que eso no impidió que los buitres se abalanzaran.

Al salir de su coche, el Sheriff Rorke sintió un escalofrío recorrer su columna y tiró de los bordes de su chaqueta para cerrarla un poco más. Se volvió hacia el enjambre de reporteros en la escena, dándoles su sesión de fotos a través del ruidoso coro de preguntas.

"Señor, ¿cree que esto está relacionado con Ghost Face?"

Sheriff Rorke, ¿cree que el asesino se ha llevado el cuerpo a otro lugar?

"Sheriff, ¿alguna pista?"

"¿No es hora de poner la ciudad bajo toque de queda? ¿O no te importa la seguridad de tus ciudadanos?"

Una y otra vez llegaron las preguntas, pero se negó a responder a ninguna de ellas. Tenía un caso que resolver y finalmente tenían buenas noticias. Tal vez este era el avance que necesitaban. Tal vez esto podría inclinar la balanza a su favor.

Por suerte, su detective vino a saludarlo con una taza para llevar antes de que levantaran la cinta sobre sus cabezas y entraran en escena.

"¿Dónde está la víctima?" El Sheriff sacó algo de su bolsillo con la mano que no sostenía su bebida.

"Nara Valisakis ha sido trasladada de urgencia al hospital en las primeras horas de la noche".

"Quiero hablar con ella tan pronto como esté disponible, ¿entendido?" El detective asintió en respuesta, mientras Rorke miraba a su alrededor. En su mano derecha había una foto de Nara arrugada, sonriendo.

Había estado lloviendo casi sin parar durante los últimos dos días, por lo que la mayor parte de la evidencia ya había sido eliminada, lo que hizo que encontrar cualquier rastro posible fuera una tarea aún más difícil.

"¿Jefe?"

La cabeza del Sheriff se levantó de golpe hacia uno de los oficiales más jóvenes de su cuerpo, que estaba de pie frente al otro lado del callejón, a unos pasos de distancia. Un dedo de látex blanco hizo un gesto hacia uno de los muchos ladrillos húmedos que, tras una inspección más cercana, tenían una inconfundible mancha roja oscura salpicada. Sangre.

Rorke tomó un sorbo del líquido marrón con cafeína y se estremeció por lo mal que sabía, limpiándose un poco de su bigote. Probablemente no había cafés decentes abiertos tan tarde o tan temprano en el día. Aunque cualquier cafeína estaría bien en este momento mientras parpadeaba para olvidar las apenas dos horas de sueño que había tenido.