Comic (Camren)

INDY TIENE A SU MUJER MARAVILLA

—Cuando era niña me compré un juego de tragamonedas antiguo Speed Racer con mis ahorros. — Sonrío mientras ella toma un sorbo de su Taza Starbucks estilo Speed Racer. En el dibujo ella es conduciendo su coche de carreras Mach 5 y ha dejado pistas dónde ella es corrió dando vueltas y vueltas a su copa.

—Si eres de ese tipo, Lauren.— Ella se ríe

—¿Y eso no es lo que te gusta? —, bromeo de vuelta.

—¿Vendrás esta noche, Indiana Jone?

— Infierno si, — respondo, pensando acerca de mi vestuario y accesorios en la cama.

—¿Estás seguro de querer a la mujer maravilla esta noche? —Ella pregunta.

—Camila...— Afirmo categóricamente. —¿Te das cuenta de quién eres? ¿En realidad crees que dejaría pasar la oportunidad de verte cómo la mujer maravilla? —Doblo mis brazos encima mi pecho, y agito mi cabeza en burla incredulidad. —Realmente mujer, pensé tú me conocías mejor que eso.

Ella se ríe y tira sus manos arriba en señal de rendición.

—Vale, vale... Las braguitas azules y busier rojo harán presentación hoy a las siete en punto.

Mientras salgo de la oficina de Camila, escucho a alguien llamarme.

—¿Lauren?

Me detengo y me doy la vuelta.

—¿Sí, Morgan? —Pregunto, sonriendo. Solo porque he pasado tiempo con Camila.

—No sé que has estado haciendo ni que droga le has echado a sus cafés pero ¿Puedes hacerme un favor?

—Cualquier cosa, dime.

—Mantenla feliz, nunca la había visto así.

Sonrío ampliamente.

—¿En serio? —No puedo creer lo que escucho.

—Sí, de verdad. —Dice sonriendo.

—Es un trato.

Su expresión se convierte seria.

—Sabes que debes ser más cuidadosa cuando vuelva Arnauld. Así que, si puedo ayudar en algo, es que sepas eso.

Ella estalla mi burbuja, recordándome acerca del mono y su regreso.

—Gracias, Morgan. Eso significa mucho. —Ella asiente. —Y si alguna vez puedo hacer algo para ti, solo avísame.

—Claro. —Está de acuerdo. —Pero nada de estupideces. Camila es la mejor jefa que he tenido en años. Por lo que me hace feliz que esté feliz.

***

Después del trabajo me dirijo a casa y preparo mi disfraz para mi gran cita con Mujer Maravilla. Cuando finalmente me pongo el sombrero y me miro en el espejo, tengo que sonreír y admitir que me veo muy bien. El aspecto es correcto, pero eso es solo una parte del efecto. Así que durante todo el camino sinuoso hasta lo de Camila, me doy una charla de ánimo para ponerme en el personaje de mi chica.

¡Soy Indiana Jones!

El sol está bajo en el cielo mientras me acerco a mi Mujer Maravilla que espera en la puerta abierta de su casa. Requiere mi concentración total para mantener mi valentía de Indiana Jones cuando todo lo que quiero hacer es detenerme y disfrutar de su gloria de superhéroe. Desde su majestuoso tocado dorado, hasta sus sexys botas, ella es todo lo que esperaba y más. Con gran concentración me las arreglo para mantener mi arrogancia mientras me acerco a ella.

—Oye, Mujer Maravilla— digo en voz baja, quitándome el sombrero. —Te ves muy bien.

Wow, la forma en que me mira... Es un poco salvaje.