¿Amigos?

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Lentamente se acercó al oído del mayor como si fuera a dar un beso pero simplemente susurro.- ¿Quién está sonrojado ahora? 

Él solo atinó a desviar la mirada, realmente se había puesto nervioso por el acercamiento. 

-V-vamos.- dijo en un tartamudeo inconsciente. - 

La castaña solo atinó a sonreír, le gustó verlo ruboroso. 

Asintió mientras lo seguía, realmente con la interacción que tenía con el rubio se había olvidado del pequeño incidente con sus amigos y su molestia.

Llegó al cuarto del Slytherin y se sorprendió en sobremanera, realmente era una habitación hermosa. 

La mezcla de los colores estaba tan coordinada, realmente se unía bastante bien. 

Los colores característicos de un slytherin. En especial el negro, daba tanta imponencia.

Cuando ingreso no vio directamente su dormitorio. Tenía un pequeño espacio de sala - comedor donde podía estar la visita sin problema.

- Bien, voy por las pastelillos.- mencionó el mayor dirigiéndose al repostero donde guardaba sus postres.

Pero T/N estaba dispuesta a molestarlo más. Le gustaba jugar con fuego. 

-Cuando dijiste que íbamos a tu habitación, pensé que te referías a tu cuarto.- sonrió ella mientras se recostaba en en el sillón apoyando una mano en su pierna y la otra jugando con su cabello.

Él la miró sorprendido, nunca creyó que T/N fuera tan atrevida.

Sinceramente, ella tampoco sabía que lo era.

El sueño, le hacía decir cosas extrañas. 

Siempre fue respetable, casi perfecta a la vista de todos.

Sus padres, sus conocidos, todos creían que ella era una santa, mojigata, venerable o puritana.

La chica más inocente del planeta, bien portada, manteniendo una distancia prudente de todos los chicos. Sin ningún pasado que le echen en cara.

Pero realmente esa era una fachada para satisfacer o enorgullecer a sus padres. Siendo la niña perfecta que no daba problemas.

Ahora, no había ningún conocido o adulto que la viera.

Solo estaba ella, y Draco.

Lo que hiciera en Hogwarts, se quedaba ahí, ¿no?

Si era atrevida, osada o descarada, realmente no importaba. Nadie la acusaría ni hablaría mal de ella. 

Podría hacer todo lo que quisiera, sin llegar a los extremos, pero ser más libre. 

Libre de actuar como realmente era.

Una adolescente hormonal, atrevida y quizás divertida.

-Que atrevida te volviste T/N.- dijo el Slytherin sonriendo...- Me gustas. 

La castaña se quedó sin aire por unos segundos. 

¿Había escuchado bien?

Dijo... ¿ME GUSTAS?

-O sea, me gusta tu atrevimiento.- aclaró rápidamente el mayor. - 

-Es obvio que no te gusto.- sonrió ella intentando calmar sus pensamientos.- Somos como enemigos. No, ¿rivales? O algo bien extraño ahí.

-¿Amigos? -  preguntó Malfoy de la nada. - Podemos ser amigos.

La pregunta la tomó por sorpresa.

Realmente no esperaba algo así.

-Bueno, no importa.- dijo él al no escuchar una respuesta inmediata.- Enemigos está bien.

-Ja.- rió ella.- Amigos suena mejor Malfoy. Solo me sorprendiste, claro que me gustaría ser tu amiga. Aunque nunca dejaré de provocarte.

-¿Si? - preguntó extrañado.

-Me gusta verte nervioso, o enojado.- dijo riendo la castaña.-Eres como un libro abierto de expresiones.

-Tú igual T/N, eres completamente predecible.- sonrió el mayor.

Ambos pasaron un tiempo juntos, comieron los bocadillos y hablaron pacificamente.

 Era algo extraño que ambos conversen tan tranquilamente y no intentando molestarse mutuamente.

Pero realmente, nunca fueron enemigos en sí. 

Ambos tomaban sus bromas como parte de una especie de amistad secreta que tenían, ambos lo sabían... Sabían que podían ser amigos pero nunca lo hablaron directamente hasta ese día. 

T/N dudó por un momento en preguntar si él cuando era pequeño quería ser amigo de Harry. Pensó que quizás más adelante lo preguntaría.

Sabía que el Slytherin tenía muchas actitudes que no eran justificables, pero también entendía hasta cierto punto el contexto.

-Por cierto T/N no me dijiste porqué estabas enojada. - preguntó el pelirrubio cuando recordó que ella estaba peleada con Gryffindor. - ¿Qué te hicieron?

Ella lo miró, tenía razón, ambos habían iniciado esa conversación porque él se dio cuenta de que se molestó con los que consideraba sus amigos. 

Realmente intentaba considerarlos amigos, pero tantas veces sentía que no encajaba. 

Incluso llegó a sentir que solo la mantenían cerca por su hermano. 

-No fue algo umm...- dijo ella.- Se enojaron porque no les gustaba como te contestaba, sentían que teníamos confianza o algo así.

-¿Te enojaste con ellos por mi, enana? - preguntó sorprendido el mayor.

T/N se sorprendió, realmente no había pensado de esa manera. 

En que momento empezó a defender al Slytherin, ¿por qué le molestó como hablaban de él?

Se supone que no debería importarle en lo más minimo. 

-No te hagas ilusiones tontito.- rio la menor intentando desviar el tema.- Bueno, me voy a descansar. 

Por alguna extraña razón Draco quería que ella se quedara. 

Le gustó pasar tiempo con ella.

Era distinto a hablar con sus "amigos" que en realidad sabía que solo lo seguían por ser Malfoy.

Verla tan desinteresada, diferente, extraña... Se sentía tan cómodo hablando con ella. 

-Descansa bien enana.- dijo cuando se despidieron en la puerta.

-Igualmente.- sonrió extrañada la pelicastaña.

Ambos sonrieron cuando la puerta fue cerrada.

Internamente, un sentimiento iba creciendo.

Pero, ¿le harían caso?

O simplemente ignorarían sus emociones.

Para empezar, ¿se darían cuenta?

¿Saben que se gustan?

Continuará

Mil disculpas por el retraso, estoy estudiando duro para ingresar a la universidad lit de 8am a 8pm. Estoy tratando de escribir a tiempo.

Gracias por leer 😘

.・゜゜・𝙇𝙖 𝙎𝙤𝙢𝙗𝙧𝙖 .・゜゜・  {T/N Potter ♡ Draco Malfoy}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora