Cruel amor ~ Ed, Edd y Eddy ~ Fanfic EdsxCrueles

Parte 16

Pasaron unos días y la escuela continuó siendo la escuela, el día ya terminó, y los estudiantes podían retirarse a descansar.

-Esa tiene forma de cono de helado- señala Nazz una nube.

-Esa parece un osito- Le dice Edd señalando en otra dirección.

-Para ti todas las nubes tienen forma de oso- ríe la rubia acostada en el pasto junto con su novio.

-Pero osos de distintas especies- explica el delgado haciéndola reír ligeramente.

Edd amaba su voz, especialmente cuando se reía, el chico voltea la cabeza para verla, a lo que ella hace lo mismo.

Sus miradas se unieron -Nazz, me gustas mucho- dijo el de gorra tomándole de la mano a la rubia.

-Tú también me gustas mucho, Edd-.

La rubia apretó un poco más su mano tomada en símbolo de amor, y luego se giró desde su posición para quedar más cerca del delgado, se miraron unos segundos antes de que Nazz cerrara suavemente sus ojos para juntar sus labios con los de Edd, el delgado sintió una explosión de emociones y lindas sensaciones por todo su cuerpo, los colorados labios de Nazz eran muy suaves y no quería que ese beso terminara por nada del mundo.

Por otro lado ni Eddy sabe como se metió en cierto lío.

-¿Qué quieres? dinero no tengo- Eddy le dirige la palabra a Lee, que lleva un rato siguiéndolo.

-No te preocupes, yo no cobro- le dice coqueta la pelirroja corriendo su dedo índice sobre el rostro, cerca de los labios del bajo.

-Aléjate de mi- dice enfadado quitándole su mano de encima mientras se aleja unos centímetros -¿ya se te acabaron los otros hombres?-.

El odio de Eddy sobre las Crueles evita poder tener sentimientos subidos de tono, a pesar de que ellas ya crecieron, y que especialmente Lee adoptó un cuerpo que llama mucho la atención de los hombres.

-¿Qué? ¿no te quieres divertir un rato?- dice suave y algo triste para que el sujeto se compadezca. 

-¡No! no quiero, no la agarres conmigo, siguen siendo igual de besuconas y acosadoras- exclama el bajo, dejando sola a Lee.

Más o menos por esos momentos, Ed fue a entrenar basquetbol como suele hacerlo, pero por su camino se encontró unos sollozos, curioso siguió el ruido para ver de donde provenía, era una cabellera rubia sentada en una banca que estaba entremedio de los arboles de un parque, Ed había pasado el suficiente tiempo con esa persona como para reconocerle la silueta.

Ed se acerca a May hasta su lado para poder posar su mano en su hombro, la rubia da un pequeño brinco por la sorpresa que hizo retirar la mano del alto, miró hacia arriba para ver de quien se trataba y de inmediato se giró apenada para que no la vea llorando. El alto sintió una ternura por ver la reacción que tuvo May al tocarla, pero también estaba conmovido por ver su cara llena de lágrimas, sentía que quería ayudarla y protegerla.

Sabía que esto podría tener que ver con su desánimo del otro día -¿pasó algo?- pregunta el alto sentándose al lado de ella.

May subió sus rodillas hacia su pecho y las abrazó haciendo una bolita, viéndose más pequeña y vulnerable -Hay unas chicas que me molestan.. dicen que soy fea y que nadie se fijaría en mi, junto con otras cosas horribles- refriega su mano sobre su ojo para secarlo.

-No deberías hacerles caso- le aconseja el alto.

-¿Por qué no? tal vez, tiene razón- habla con tono deprimido.

 -Mi mamá me dice que la gente que te trata mal lo hace por envidia, seguramente piensan que eres linda-.

-No, no creo, solo lo dices para hacerme sentir mejor- da una leve sonrisa agradecida de que el chico intentara subirle el ánimo -nunca me han dicho que soy linda-.

-Entonces te diré la verdad- Ed corre un mechón que tapaba la cara a la pequeña con su mano -May, eres linda-.

Por la seriedad con que le habló el alto entendió que hablaba con la verdad, May esconde su cara debido a su sonrojo, no esperó que Ed le fuera a decir eso y mucho menos un chico guapo como él. Por la parte de Ed, se sentía bien acompañando a la pequeña, tanto que ni le importó faltar a su practica.