Luego de un camino, silencioso y algo incomodo para la latina,ambos llegaron a la casa de aquel ruso.
Paraguay: mm..... —suelta un suspiro largo—
Rusia: baja y Entremos —suspira y sale del auto—
La mujer solo hace una respuesta afirmativa y baja de aquel veículo, sentia un raro pesar, no conocía al ruso a la perfección, cosa incomoda para ella.
El joven ruso no quería demostrar lo que sentía por completo hacia aquella mujer no la conocía pero que más podía hacer ; era linda mujer. Comenzó a dar pasos lentos esperando a la paraguaya la cual parecía perdida en los pensamientos profundos qué tenía. Grata sorpresa aquéllos perros que entrenó se aparecieron apenas la mujer puso un pie en la casa, para solo ir a atacar a la joven originaria de tierras latinoamericanas, para el joven ruso esto era malo, que pasaría si la ONU se entera de todo esto, sería un caos total.
La mujer al notar la precensia de aquellos animales se queda helada, sin poder moverse ni reaccionar, cierra los ojos con fuerza, espero unos segundos pero no sintió mordidas ni nada, solo pudo sentir un tirón y nada más, de apoco fue abriendo los ojos solo para notar que se encontraba en un ligar alto.
Rusia: ¿Estas bien? — pregunta mientras sinta a la contraria e Su hombro, ya que la había alzado de la ropa—
Paraguay: si lo estoy y gracias—sonríe un poco— puedes ¿bajarme? —
Rusia: ¿quieres que te muerdan? —
Paraguay: ¿quien me va a morder? —
Rusia: — suspira — los perros..., eres ignorante de tu alrededor y olvidaste qué los perros no te conocen y te quieren matar.... Lo que faltaba —
La paraguaya solo se cruza de brazos y rueda los ojos para mirar a los perros, los cuales estaban quietos mirando a su dueño.
Rusia: vamos adentro —
Este entra a la casa y baja a la contraria para poner seguro a la puerta y ir a la cosína para poder tomar un poco de agua.
La joven queda mirando la casa unos segundos para luego quitar su abrigo y colgarlo en el perchero qué estaba serca de la puerta.
Pasaron unas horas y ambos se encontraban sentados en la sala del ruso ambos ya bañados y viendo una película en blanco y negro, pero ninguno de los dos se encontraba interesado en la película, ambos miraban su telefono.
El ruso hablando por chat con su hermano kazajo.
La paraguaya hablando con el argentino.
Chat de Rusia.
Rusia
Y yo que haré con ella en mi casa como estorbo
Kaz
Aja... Te vas a ir acostumbrando
a su precensia hay
Rusia
Dudo que me acostumbre a
tenerla en mi casa
Kaz
Como digas hermano, pero apuesto a que te acostumbras, y luego que se valla la vas a buscar
Rusia
Aja... Dudo
Kaz
Terco.
