☀ IXX ☀

1.5K 171 11
                                    

- Cómo ______ y Lío son de nuestra misma sangre, sería mejor que se queden con nosotros los evolucionados, junto con nuestro querido Guy por supuesto -comenzó a explicar de forma pacífica en su hablar, mientras cortaba un pedazo de carne-. Y el con los demás sigan su divertido viaje familiar.

Estaba atenta como todos.

- Palabras de Grug, no mias -añadió.

-¡¿Qué?! -dijimos al unisóno, a exepción de los que nos hospedan.

- ¡¿Querias deshacerte de nosotros?! -alcé la voz molesta por la desición- ¿De mi? -sentí como un nudo se me hizo en la garganta al recordar como personas anteriores querian lo mismo, y ahora mi Padre.

- ¡¿Enserio papá?! -Eep se encontraba igual de molesta que yo.

- ¡¿Separarnos?! -añadio Guy, en el mismo tono.

- ¡No chicos, no pienso eso! -comenzó a defenderse- Digo, el me hizo creer que yo lo creia -sus palabras eran acompañadas por ademanes nerviososn hasta que se levanto de la silla y señalo a Félix-. El me engaño, me llevo a su estupida cueva secreta del hombre.

Esto provocó que el señor Siemprebien escupa el agua que había ingerido anteriormente.

- Espera -habló despues de mucho Esperanza- ¿Qué cueva del hombre? -juraria que fulminó con la mirada a su esposo.

- Es donde voy a alajarme de...pfrr -el que olía a vainilla no acabo la frase.

- ¿Alejarte de qué? -insitió.

- Alejarse de ti -respondió Ugga por el hombre, quien no sabia como esconderse entre su cabello.

- ¡¿Cómo te atreves?!

- ¡¿Cómo te atreves tu?!

- ¡¿Cómo se atreven los dos?! -Alba mostró su mano hinchada, lo que provocó mas cuestionamientos y ataques hacia nosotros.

- ¡Si tanto querias deshacerte de mi, lo hubieras echo antes! -dije.

- Pensé que eramos compadres -comentó Lío.

- ¿Querian arreglarnos la vida? -esta vez se atrevió a opinar Fred.

- ¡¿Echar a los invitados?! -preguntó indignada Zoe- ¿Enserio?

- Nunca me hablaron de ninguna cueva -reprochó Chuck.

De un momento a otro la mesa se transformo en un campo de batalla, donde las palabras eran puñetazos y las miradas de ira como cuchillas afiladas.

Mi cabeza comenzo a dolerme demasiado, un zumbido venia de un lado a otro. Era mucho ruido, muchos hablando y discutiendo a la vez; obviamente no iba a callarme en la disputa.

Pero las palpitaciones de mi frente pudieron más, necesitaba aire, silencio.

Rapidamente salí de alli, como no paraban de duscutir no se dieron cuenta de mi ausencia, o no les importo en absoluto.

Bajé escalando por el árbol, me costaba respirar. El zumbido se volvia aun mas fuerte, tanto que lo externo ya no podia ni oirlo. Mi andar era torpe, no sabia hacia donde estaba yendo, hasta que al dar un paso más caí al suelo.

Dure unos segundos allí, en la oscuridad cerca del rio.

.
.
.

Poco a poco el dolor, el zumbido, mi palpitar iba disminuyendo.
Luego de un rato solo escuchaba mis jadeos, pues iba recuperando la respiración.

Exhalar...inhalar..exhalar..inhalar...

Me encontraba mucho mejor, de todas formas no me levante del suelo. Las lagrimas no tardaron en salir, y mis sollozos acompañaron.

《 Pensé que había mejorado, hace tiempo que no me sucedia algo asi》

- Deshacerse de mi -me dijé, me doliá bastante. Pero no solo era la acción de mi papá, ya venia acumulando varias cosas dentro de mi. Era sabido que en algún momento iba a explotar.

Sequé mi mejilla derecha.

Sentí unos brazos rodeandome por los hombros, cálidos, fuertes, los cuales me acogieron dulcemente.

- Tranquila -esa voz, ronca y reconocible-. Puedes llorar, pero no es bueno que lo hagas sola.

Se sentó a mi izquierda, sin dejarme de abrazar. Me sentia a gusto, mas relajada y contenida.

Mis ojos seguian lagrimosos, pero ya me encontraba bien a comparación de antes.

- Gracias Chuck -le agradecí su atención, aún acurrucada.

- Siempre que lo necesites -sonrió-. Se volvió todo un loquero la cena -intentó relajar el ambiente.

No sabia que responder, aún procesaba mis emociones.

- ¿Cómo te sientes? -sentía su aliento cálido sobre mi cabeza.

Suspiré antes de responderle-. No se muy bien lo que me paso allá arriba, no podia respirar bien, sentí que agonizaba -me costó explicarle.

- Debió ser un ataque de ansiedad -afirmó seguro de ello-. Es normal cuando surguen situaciónes asi -frotó su mano en mi brazo, dandome calor.

- Es probable -corrí mi brazo sutilmente, sentía que mucho contacto estaba mal.

Nos quedamos unos segundos así, gire mi cabeza para verle el rostro. Estaba preocupado.

- ¿Tu estas bien? -le pregunté por su expresión, viendo el hermoso rio que teniamos frente donde la luna llena se reflejaba.

- Si si -afirmó con una amplia sonrisa, blanca como la nieve.

Tenia rasgos muy llamativos, su piel bronceada, su hermosa sonrisa, sus ojos verdozos y nariz levemente encurvada.
Era un joven muy atento, géntil y carismático.

Una chispa se despertó dentro de mi, algo que relativamente estaba mal.

- Que lindo encontrarlos asi.

Rapidamente volteamos a ver al pelinegro, su presencia hizo que Cuck me soltara rapidamente como un relampago. Poniendo las cosas más tensas e incomodas de lo que ya estaban.

- Guy -pronuncié nerviosa.

El joven solo tenía su ceño levemente fruncido, intentando camuflar su expresión.

- Vine a ver si estabas bien -cruzo los brazos y me di cuenta que llevaba su cabello como cuando lo conocí-. Pero parece que si -la escena en que nos habia encontrado era muy malinterpretable-. Mejor los dejo tranquilos -sin más que decir y sin que pudiera responder se marcho de allí.

Cuando observe a Chuck, la leve sonrisa que tenia se desvanecio en segundos. Luego me observó e hizo una seña con la mirada para que vaya con el.

Asentí y me reincorpere del suelo, el solo se quedo sentado allí para seguir observando el rio calmo, nuevamente con su pequeña sonricilla.

.
.
.
.
.
.
.
.....









Nuestro Mañana // Guy y tu // [2°do Libro]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora