Cuentos para Soñar ✨ (Kiri ×Ao'nung )

Capítulo VIII

Lo'ak, Neteyam, Roxto, Tsireya, Tuk y Ao'nung estaban esperando afuera de la cabaña. Después de que Neteyam llegó a la orilla con Kiri, entre el y Ao'nung habían cargado a la na'vi hasta su cabaña donde estaban sus padres.

Jake Sully había llamado a sus amigos para que le ayudarán, y, después de llegar en un helicóptero (o como le decía Ao'nung, un barco extraño-volardor con una cosa giratoria), estaban ya adentro con aparatos extraños.

—¿Kiri despertara pronto?—le dijo Tuk con tristeza a Ao'nung.

—Tranquila, ya la están atendiendo—le respondió Ao'nung.

—No confío en ellos—le murmuro al oído Tsireya—, no creo que la logren despertar...

—Si, pero...

Una voz adentro de la cabaña dijo:

—Todo parece normal, no hay nada malo en el cerebro...

—Hay que decirle a mamá, ella lo logrará—dijo Ao'nung.

—Tienes razón, yo le diré -se ofreció la chica

—No, yo le digo

—Es más seguro que acceda si yo le digo—razonó Tsireya.

—¡Pero yo quiero ayudar!

—Bien...—respondió Tsireya rindiéndose.

Ao'nung corrió hasta la cabaña de su madre, ella estaba haciendo cosas de sajik.
El na'vi entro, saludo a su madre y...

—Má, yo...Te quería pedir si puedes curar a... Kiri

—Si, ya sabía que uno de ustedes me lo pediría. Pero por que me lo pides, después de todo ya tienen a esas personas el cielo—dijo esto con rencor.

Parecía estar ofendida porque no habían acudido a ella para pedir ayuda.

—Pero ellos no lograran despertarla, ¡Por favor mamá! ¡Solo tu puedes hacerlo!—suplico Ao'nung.

Ronald suspiro y asintió con la cabeza diciendo:

—De acuerdo, trae a Tsireya para que me ayude.

◉◈◉

Cuando Ronal llegó a la cabaña seguida por Tsireya, los científicos aún estaban ahí.

—Parece que no me necesitan aquí—dijo enfadada.

—Tu eres la sagik—susurro Neityri tomando a Ronal del brazo.

—Renuevan esas cosas—exclamó Ronal después de una pausa.

—¡Fuera! ¡No han hecho nada!—les grito Neityri a los científicos.

Estos recogieron las cosas de inmediato, mientras Jake huía de su esposa.

✺✽✺

Mientras su madre estaba con Kiri los chicos estaban afuera, esperando.

—Kiri...—murmuraba Ao'nung.

—Te veo muy preocupado, Ao'nung—le dijo Lo'ak mirandolo suspicaz.

—Pues claro, es mi amiga—le espeto el aludido.

—¡Ya! ¡¿De verdad no pueden dejar de pelear ni en esta situación?!—exclamó Neteyam.

Pero antes de que alguno pudiera responder Tuk salió corriendo de la cabaña, sonreía y saltaba de alegría.

—¡Kiri despertó!—grito mirando a los chicos.