Capítulo 10

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Kara y Lena no pueden evitarse más de lo que la luna puede evitar la gravedad de la tierra, mas de lo que ellas mismas pueden evitar el suelo al dar un salto. Lo que pueden estar lejos de la otra parece ser una fracción de tiempo tan pequeña, que aquí están. Kara no creía estar lista, pero Kara fue quien lo pidió. Ir un poco más allá.

—Kara—Lena gimió mientras sus manos recorrían el cuerpo de la rubia con una armonía y suavidad impecables. Casi parecía que Lena no quisiese tocarla por miedo a romperla.

—Lena—Kara le mordió el labio y la volvió a besar más agresivamente mientras la abrazaba, la acariciaba. Se subió encima de Lena después de apartar el maldito cojín y pudo sentirlo de inmediato, su erección estaba allí, presionando contra la tela y también contra la entrepierna de Kara—¿Si me detengo te detendrás?

—No lo dudes—susurró Lena con labios temblorosos—te quiero Kara, jamás haría algo que no desees—Lena sentía que estaba a punto de reventar, ir tan despacio era tortuoso. Su miembro se sentía incluso dolorido, llevaba un buen rato presionando contra sus pantalones, pero Lena no dejaría que eso la detuviese, Kara era todo lo que importaba.

Kara suspiró, la sangre corría por su cuerpo más caliente que de costumbre, se sentía sensible e instintivamente comenzó a rozar su entrepierna contra la erección de Lena. Ambas gimieron bajamente pero Lena dejaba que Kara guiase toda la acción.

La rubia comenzó a rozar su sexo contra la erección de Lena haciendo que ambas gimieran al unísono.—Lena déjame verte.

Lena obedeció y comenzó a quitarse la ropa hasta que Kara la detuvo para hacerlo ella misma. Era seguida por los ojos verdes que eran suaves y tiernos.

—Haz lo que desees—susurró Lena y cuando Kara desató su pantalón y su erección pudo apreciarse más ella pudo respirar. —Por dios eso es bueno—suspiró.

Kara sonrió—Perdón estaba atrapado ahí—acarició por encima de sus calzones ahora el bulto que se hizo más prominente—¿Lena puedo realmente hacer lo que desee?

—Mi amor, lo que desees—susurró Lena—Aunque me gustaría complacerte primero—un gemido bajo salió de la garganta de Lena cuando Kara la terminó de desvestir y le acarició el miembro con la mano.

—¿Complacerme? Yo no había pensado en eso—Kara estaba tan acostumbrada a Saskia, que había olvidado lo que era ser complacida.

Lena sonrió y la cargó de forma nupcial para luego colocarla en la cama de forma tierna—¿Puedo ver tu cuerpo también?—preguntó con amor.

—Está lleno de cicatrices y marcas, estrías—miró a otro lado.

—¿Puedo verlas? Me encantaría hacerlo.

—¿No te resultan asquerosas? Yo podría complacerte y ya Lena—dijo casi asustada, no quería ser vista.

—Kara ¿Saskia no te complacía verdad?—suspiró cuando vio a la rubia negar con la cabeza.—Cierto que pregunta tan estúpida la mía después de ver lo que vi.—besó sus labios de forma casta—Déjame verte, Kara.

Kara asintió despacio—Pero si te da asco me lo dices y me voy a mi cuarto.

Lena asintió y de forma lenta y cariñosa comenzó a desvestirla poco a poco, Kara realmente tenía muchas cicatrices,la mayoría de heridas causadas por golpes, también tenía algunas estrías pero casi ni se veían y tampoco era que eso a Lena le importara, en realidad la mayoría de las mujeres tenían estrías así que era algo normal.

Kara la miraba insegura mientras era observada—¿Debería irme a mi cuarto?

—Para nada—dijo Lena relamiéndose los labios—Eres perfecta Kara—comenzó a besa cada marca en su cuerpo—Eres la perfección hecha persona—susurró contra su piel, haciendo a Kara sentir su aliento y erizándola.

Black and White (Lena G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora