C A P I T U L O 93

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Pará conseguir un nuevo día, para crear un futuro se necesita ponerle esfuerzos y eso incluye sacrificios.

- Cómo van con la nueva vacuna, ¿Esta funcionando?

-La tendré listo para la tarde. - El hombre siguió haciendo su trabajo sin girar a ver a la persona tras de él.

-Según me informaron esa vacuna ya debía estar lista hace tres días. - El pelinegro caminaba atento mirando de rincón a rincón.

-Ya ubiera estado lista si alguien no ubiera matado a la doctora Gong. - El mayor giro a verlo con el ceño levemente fruncido. - Estará listo para la tarde. Informale de eso al general Kim.

Asintió sin mirarlo y se concentró en caminar entre las cápsulas y maquinas a su alrededor. - Fueron ordenes doctor Shin. Ella incumplió con su deber y yo solo hice el mio.

El doctor soltó un suspiro antes de dejar lo que estaba haciendo para mirar al oficial tras de él. - ¿Por qué haces todo esto? ¿Por cuanto te vendiste oficial Jung? Creí que eras diferente.

Haein dejo de observar atento el cuerpo inerte de la ex científica Gong antes de mirar en dirección al doctor.

- ¿Por cuanto se vendió usted doctor Shin? Yo también creí que usted era diferente, pero mire, aquí estamos.

- Yo soy viejo, ya he vivido y experimentado mi vida más de lo que esperaba pero mis sobrinos no. Ese fue mi precio. ¿Pero tu? Que yo sepa no tienes a nadie, entonces no entiendo porque decidiste unirte a todo esto. Podías vivir tranquilo sin la necesidad de mancharte las manos.

-No tiene que saber porque lo hice, solo le diré que mi pago será lo suficientemente alto para que yo haga esto y más.

-Estas mal, muchacho. No creo que el precio sea más grande que la cantidad de sangre que tienes en tus manos.

La expresión del menor se oscureció. - Lo será, esto. - Apuntó a los cuerpos inertes listos para llevárselos. - ¿No es lo que ahora hacemos? Matar para sobrevivir.

-No, porque esto. - Apuntó al último infectado qué mataron. - Esto ya está muerto, pero ella. - Ahora al cuerpo de su compañera. - Ella aun estaba con vida, ella aun respiraba y sobretodo pensaba, ella tenía la capacidad de hacer lo que ellos no hacen... Razonar.

Haein lo miro con ojos profundos sin responderle, se dio la vuelta listo para salir de ese lugar. - El doctor Im y la doctora Lee regresaron esta mañana así que ya deben estar por llegar. - Dijo tranquilo Antes de salir de ese lugar llevándose con el los bultos envueltos.

-No se lo que el general Kim te halla propuesto, pero te aseguro que ninguna recompensa será suficiente por todo lo que estamos haciendo.

-Se equivoca. Para alguien débil qué aun no comprende el nuevo mundo como usted esto puede ser demasiado qué soportar pero para alguien que tiene los pies bien puestos sobre la tierra y que entiende como es que ahora funciona las cosas en este mundo, no lo es... - Apretó el botón para subirse al ascensor y salir de ese lugar. - Por cierto, traeré a unos cinco para que empiece hacer su trabajo, el general quiere resultados cuando antes.

Dong-Il suspiro rendido sentándose en uno de los sillones para sacar una botella de alcohol de su bolsillo, estaba demasiado cansado y ya no sabía ni lo que estaba haciendo. Una vez vengan los doctores el por fin se iría de ese lugar, estaba cansado pero también preocupado, le había dejado todos sus pendientes a su sobrino y a un doctor, y sabía que era mucho trabajo para ellos.

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