20. Cógeme aquí.

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¡Cógeme! Sí, aquí

Aunque estén todos afuera y pregunten por nosotras,

Cógeme, así no seamos nada,

O lo seamos todo,

Prometo gemir suave,

Prometo ahogar mis gritos,

Mordiendo la almohada con fuerzas,

O besando tus labios carnosos

Pero cógeme aquí mismo

Quiero sentirte adentro,

Quiero sentirte conmigo.

Ponme como quieras, tócame como quieras,

Bésame con fuerzas y reclama lo que te pertenece,

Te doy mi permiso...

Úsame, átame las manos y hazme suplicar

Quiero sentirme tuya,

Que mi cuerpo no quiera olvidar tu nombre,

Quiero que mi fuente sea sólo para ti,

Porque sé que eres una persona egoísta

Y a usted, le gusta tenerme de rodillas.

Mira, observa cómo me tienes;

¿Lo ves? ¿Ya? ¿Ya estoy lista para ser cogida?

De mí, querida ¿Qué más quieres?

¿Así? ¿Sola para ti?

Eso no lo tienes que pedir,

Sabría que me podrías de esa manera,

Sabes el efecto que haces en mí,

Te aprovechas de ello,

Además de mí, tú también me sabes seducir,

Te gusta que te oiga gemir

Te gusta sentir mis manos sobre ti,

Quiero que me cojas, quiero cogerte a ti,

Aunque sea en mentiras, dime que eres solo para mí,

Por lo menos está noche,

Donde eso desearás.

Cállame la boca, para que no hable más,

Pero solo si me ahogas en tu prohibido mar.

Cógeme, ya no aguanto más,

Que te ves preciosa con ese vestido,

Que muero por arrancar. 

El árbol de Roble Blanco (Poemario)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora