ATARDECER EN EL OCASO

25. Te Amo.

Yo - Tae...te amo... - dije con mi rostro sobre su cuello y este se separó repentinamente para mirarme.

Tae - Que dijiste? ...- dijo sorprendido.

Yo - Por...que? - dije tímida.

Tae - Por favor dime que dijiste - dijo ansioso.

Yo - Dije que... te amo - dije sonriendo tímida.

Tae - Es...es en serio?...

Yo - Claro que si, jamás mentiría con algo así, no se cuando ni como solo se que te amo... - dije acariciando su mejilla - Gracias por amarme...

Tae - No...pero si el que tiene que agradecer soy yo - dijo riendo ligeramente - Gracias por dejarme amarte, Sun te amo - dijo y se acercó a mis labios para besarme tan tierno y tan lento como saboreando de cada milimetro haciéndome estremecer - Eres maravillosa y me encantas - dijo soltando un suspiro y me dio un pequeño beso en los labios haciendome cerrar los ojos disfrutando de ese beso y al separarnos me abrazo sobre su pecho.

Yo - Tae, gracias por llevarme al mismo cielo que tú - dije y levanté mi rostro a darle un suave beso pero sin poder evitarlo profundice el beso no se porque pero no resistía las ganas de seguir besandolo me levante sobre mis codos para quedar encima suyo y profundizar los besos sin quererlo mi corazón se volvió a acelerar y me separe un poco asustada por mi actitud - Creo que es mejor que me vaya! - dije y me giré para sentarme en la cama con la sabana enredada pero antes de poder hacer algo mas este me abrazo por la espalda.

Tae - No te vayas...por favor no te vayas todavia - dijo en mi oído y yo solo cerré los ojos ante la sensación de su cálido aliento sobre mi con eso me quitaba las fuerzas para irme, pero como podría ausentarme asi de casa?.

Yo - Me encantaria quedarme Tae... pero aun no puedo - dije sintiendo su pecho en mi espalda y acaricie sus brazos que me rodeaban, entonces comenzó a besar mi cuello dulcemente haciendome estremecer - Tae...por favor... no...sigas... - dije suspirando pero ladeando mi cabeza dandole mas acceso a mi cuello.

Tae - No puedo...no puedo parar, no quiero parar, eres como una droga para mi ...la mas deliciosa y dulce droga.... - dijo y me tomó de la barbilla para girar mi rostro y besarme nuevamene y al compas de nuestros besos nos fuimos recostando en la cama, sin tener las fuerzas para poder negarme sucumbi nuevamente ante sus caricias y la pasión, me descubrí que ante sus besos mi fuerza de voluntad desaparecía por completo y una vez mas me deje llevar por su calidez, acabamos con nuestros cuerpos unidos en un ferviente deseo de sentirnos el uno del otro, llegando una vez mas al clímax, al terminar nos quedamos abrazados por un rato y me sentía casi vencer por el sueño bajo las caricias de sus manos sobre mi espalda mismas que se hicieron cada vez mas lentas hasta que dejo de moverse y antes de quedar atrapada por el sueño me obligue a reaccionar.

Yo - Cielo...

Tae - mhm?...- se quejó apenas.

Yo - Ya tengo que irme.... - dije aun somnolienta.

Tae - mhm!!... - asintió con un sonido de su garganta ya dormido y muy a mi pesar me separe de sus brazos lentamente para evitar despertarlo, me vestí y le deje un suave beso en los labios para irme a casa, al llegar entré sigilosa y verifiqué que mis hijos durmieran, en seguida me metí a la cama sin bañarme pues no queria hacer ruido de mas, ademas de que disfrutaba de sentir su aroma en mi, estaba tan entusiasmada recordando cada detalle a su lado que no podía creer todo lo que hicimos, y me di cuenta que con Tae disfruté como nunca antes lo habia hecho, su ternura y pasión combinadas hacen que mis sentidos se pierdan con tanta facilidad que lo único que puedo pensar es en él y desear estar con él.
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Al dia siguiente me desperté tarde pero revitalizada y muy feliz, tenia tantas ganas de ver a Tae pero el domingo es el dia que pasamos tiempo de calidad mi hija y yo y aunque me acabo de despertar ya siento que lo extraño mucho, me fui directo a darme un baño, mientras mi hija aun dormía, estaba por preparar el desayuno cuando me llegó un mensaje de Tae.