43. Nam?

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Al día siguiente Jiyu se encargó de preparar el desayuno para nosotras tres ya que mi hijo se fue a trabajar, aunque no quería porque estaba preocupado, pero le insistí en que podía ir ya que no estaría sola pues su tía Jiyu y su hermana estarían conmigo asi que solo asi se fue mas tranquilo, pasamos una mañana muy relajada y emocionadas platicábamos de los arreglos que tendríamos que hacer en casa para la llegada de los bebés aun no podíamos creer que fueran 3,  Jiyu y mi hija fueron a comprar algunos víveres por lo que pude estar un rato a solas en ese momento recibí una llamada de Hoseok quien llamo preocupado por la visita de Namjoon por lo que tuve que informarle todo lo sucedido y solicitándole que desistiera de la pensión que Nam depositaba pues ya no quería mas problemas y este aunque no estaba muy de acuerdo accedió a mi petición, luego tuve que explicarle que me encontraba de incapacidad y pues le tuve que decir que estaba embarazada por ello debía de descansar esta semana aunque le dije que si me necesitaba de inmediato iría a trabajar ya que yo me sentía muy bien a lo que se negó rotundamente, me dijo que no me preocupara del trabajo que él se encargaría, me felicito por mi embarazo y  me dijo que yo me preocupara por descansar mucho ya que me estarían esperando en la oficina a mi regreso de la incapacidad, lo cual agradecí mucho, ya solo le dije de los pendientes que quedaron en la oficina para que pudiera estar al tanto y que cualquier duda me llamara sin pena que yo con gusto lo ayudaría pero este se negó dijo que tenía quien podría hacerse cargo de todo asi que no me preocupara, finalmente nos despedimos y me quede mas tranquila después de hablar con él pues si ya no recibía dinero de Namjoon ya no tendría que topármelo nunca mas o al menos eso es lo que espero, me metí a bañar y al salir me arregle y me senté en la orilla de la cama viendo hacia la ventana pensando en Tae y las jugarretas del destino, yo que creí que no le podría dar hijos a mi edad y ahora me encontraba esperando sus hijos y pensar que lo aleje de mi siendo ese uno de los motivos, aunque nuestra diferencia de edades y el que yo sea divorciada es el mayor de los problemas entre nosotros, su familia nunca aceptará que él formase una familia conmigo y eso me lleno de nostalgia provocando que un par de lágrimas salieran sin permiso por lo que me limpie de inmediato - Ya no mas lágrimas, ustedes se  merecen tener una mamá feliz y soy muy feliz de saber que están aquí conmigo y los amo y los amare por toda mi vida - dije en voz alta mientras acariciaba mi vientre soltando ahora unas lágrimas  pero ahora de felicidad al encontrarme dichosa de estar esperando los hijos del hombre que llenó mi vida de esperanza, de ilusión y de tanto amor, mismo que les daré a mis hijos - Saben, su papi no podrá estar con nosotros, perdón por ello, eso es culpa mía,  aunque no pueda estar con nosotros sé que los amaría muchísimo si las circunstancias lo  permitieran,  lamento mucho que no pueda ser de otra manera pero no se preocupen que yo los amare por ambos además estarán sus hermanos y la tía Jiyu que los amarán mucho...

Jiyu - De eso no deben tener dudas - dijo esta al entrar a mi habitación sorprendiéndome.

Yo - Me has dado un susto - dije soltando un suspiro y esta se sentó a mi lado sonriendo acaricio mi vientre - Y Hyo-ri? - pregunte al no verla entrar con ella.

Jiyu -Fue a la papelería por unas cosas que se le olvidaron - dijo y yo asentí - Amiga, y Tae lo sabe?

Yo - Bueno, él sabe que estoy embarazada pero no sabe que son suyos - dije apretando mis labios esperando los regaños de mi amiga.

Jiyu - Y porque no se lo dijiste? - dijo algo sorprendida.

Yo - Estas loca? no puedo decírselo ahora que sé que se va a casar con otra mujer...nuestras vidas no están predestinadas para estar juntos - dije soltando un suspiro - No puedo  arruinar su vida, después de todo lo que le dije para alejarlo no puedo meterme mas en su vida - dije y comencé a llorar.

Jiyu - Ay nena, no sé qué decirte...

Yo - No digas nada, solo no me dejes sola - dije y esta asintió abrazándome brindándome consuelo. 

ATARDECER EN EL OCASODonde viven las historias. Descúbrelo ahora