nueve

12.8K 951 600
                                    


El vuelo finalizo. Dios mío no daba más de los nervios, sentía como... como si pudiera vomitar todas mis tripas. Asqueroso, pero así me sentía.

En el estacionamiento me esperaba Carl, el escolta de mi papa que también era su mano derecha.

Me llevo hasta mi antigua casa, quien recordaba con mucho amor y cariño. Baje rápidamente saludando a los labradores de mi madre, y al dálmata de mi padre. ¡Que viejitos están! Los perros, claro.

Finalmente abrí la puerta y ahí estaba Rosa, el ama de llaves, y la señora quien había sido parte de mi complicada vida.

La salude con un fuerte abrazo, ella me lo correspondió alegremente y luego tomo mis maletas.

-¿Rosita, sabes dónde están mis padres? - pregunté con dolor de panza.

-Se encuentran en el comedor, están esperándola junto a su hermana señorita. - sonreí y casi corriendo fui hacia dicho lugar.

-¡Gracias Rosita! -

Llegue y ahí estaban los tres charlando. Cuando me vieron se levantaron rápidamente y me envolvieron en un cálido abrazo familiar. Internamente agradecía que los chicos no estuviesen sentados en esa mesa.

-¿Cómo se encuentra la famosa vedette de la familia eh? - bromeo mi padre.

-Ayer estuviste maravillosa hija. - mi madre sonreía mientras frotaba mis brazos. - Mande a enmarcar una foto de una de tus tantas sesiones de fotos.

-Oh, mamá...- ella solía tener la costumbre de tener fotos de mi y mi hermana por toda la casa. En portadas de revistas, entrevistas, de todo un poco.

-Bueno, bueno... ya es mi turno. - Emery me abrazo con muchísimo cariño, cerré los ojos, aguantando las lágrimas. Mierda la había extrañado muchísimo. Ella se alejo observando cada detalle de mi rostro. - ¿Hace cuanto depilaste tus cejas? - pregunto y rodee los ojos empujándola levemente a lo que ella comenzó a reír.

-Yo también te extrañe zorrona. - reí y bese su mejilla. -¿Y los niños? - pregunte mientras me sentaba en la mesa seguida de mi familia.

-Se fueron a Disney con su padre. - conto.

Los empleados comenzaron a traer la comida, cenamos entre risas y mucho cotilleo. Mi familia era única y especial.

Luego pasamos al postre, mi mama le había encargado a rosa que haga un delicioso cheesecake de frutos rojos, mi favorito.

Comencé a comer y a disfrutar de cada bocado hasta que mi padre comenzó a hablar.

-¿Te parece que pasemos a la parte de la charla? - dijo llevando la cuchara hacia su boca. Pude observar como mi madre y Emery se miraban mutuamente.

-¿Sí? - conteste sin importancia.

-Necesito que le des clases de maquillaje a Orianna. - comencé a toser fuertemente hacia su seca declaración. Rosa sirvió mas agua en mi vaso ya vacío a lo que agradecí como pude.

-¿¡Que yo qué!? - casi que grite.

-Si, necesito que le enseñes como maquillar a los chicos. Desde que dejaste la banda, no hemos podido encontrar a quien te siga el paso con los atuendos y con el maquillaje. Necesitan de tu ayuda. -

-Pues que se jodan. - tome más agua.

-¡Rosella! - mi padre me llame la atención. -¡Ya no tienes quince años, compórtate como una adulta! -

-Pues como adulta, te digo que no. -

-¡No seas así! ¡Ya no qué hacer con ellos, eres mi ultima esperanza, esa niña es un desastre, pero Tom se niega a despedirla! - me dieron ganas de vomitar.

𝗕𝗨𝗥𝗟𝗘𝗦𝗤𝗨𝗘 | 𝒕𝒐𝒎 𝒌𝒂𝒖𝒍𝒊𝒕𝒛.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora