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Después de una noche larga, tanto Jungkook cómo Taehyung olvidaron que debían ir a la escuela.

Por otro lado, los señores Jeon habían llegado en medio de la madrugada, Areum, al no poder dormir decidió que era una buena idea preparar el desayuno de su hijo.

Más de las 6:30 de la mañana y Jungkook no sé dignaba a bajar.
Así que Areum, decidió caminar tranquila escaleras arriba hasta llegar a la habitación de Jungkook.

Al ser tarde, ni siquiera se molestó en tocar la puerta antes de entrar.

Grave error...

La habitación desordenada, con ropa por todos lados y unos cuantos paquetes metálicos adornaban su vista.
No necesitó más pruebas que dos cuerpos desnudos y semi cubiertos con una sábana sobre la cama.

Estuvo a punto de dejar la habitación y no involucrarse en el asunto, hasta que reconoció esa melena rizada y castaña.

Una leve sonrisa se pintó en su rostro antes de adoptar una expresión seria y caminar a pasos lentos para abrir las persianas, asegurándose de hacer suficiente ruido para despertar a ambos chicos fallando en el intento.

Luego, se acercó a la cama para mover suavemente el hombro del pelinegro quién poco a poco abrió los ojos, sonriendo.

Pero luego, recobró la consciencia, y ver a su madre ahí lo hizo palidecer.

Santo cielo.
Estaba en serios problemas por aprovechar indebidamente (ante los ojos de su madre) su hogar.

– Despierta a Taehyung y dense un baño antes de irse a la escuela, ya es tarde, pero tenemos que hablar antes de que se vayan. – Dijo Areum con un tono aterradoramente tranquilo para Jungkook.

Luego salió de la habitación cerrando la puerta detrás de sí yendo directamente a la cocina para preparar un desayuno extra.

Mientras preparaba todo lo necesario, tomó su teléfono para llamar a una de sus mejores amigas.

Kim Hannah.

– ¡Hola Areum! ¿Cómo estás? – Pregunta la señora Kim del otro lado de la linea.

– Muy bien Hannah, ya sabes, siempre trabajando.

Es muy temprano, ¿Está todo bien? – Inquiere preocupada.

– Oh, todo está perfecto, Seung y yo llegamos hace un par de horas, pero no podía dormir así que decidí hacer el desayuno de Jungkook, pero nunca bajó. – Hace una pausa para vaciar los huevos en la sartén caliente y previamente engrasada. – Entonces fuí a su habitación para despertarlo y sorprenderlo, se suponía que íbamos a llegar hoy a medio día, pero la sorprendida fui yo. – Termina.

Hubo un segundo de silencio, y al siguiente, Hannah comenzó a reírse.

– ¿Qué es tan gracioso? – Pregunta Areum confundida.

Oh Dios mío, me alegra que hayas sido tú la sorprendida, tenía miedo de que me tocara a mi. – Responde aún riendo. – Tae está en tu casa, ¿No? Creo que ya imagino lo que viste.

– ¿Qué está pasando Hannah? ¿Por qué nuestros hijos estaban desnudos y abrazados en la cama de Jungkook con varios paquetes de condones abiertos al rededor? – Cuestiona provocando que las risas de Hannah se intensifiquen.

Deja que ellos te lo expliquen, pero no seas dura. – Dice una vez que el aire regresó a su sistema. – Me aseguraré de hablar con Taehyung cuando regrese, solo no me lo envíes con un trauma. – Pide.

– No prometo nada. – Susurra la señora Jeon.

Hablamos luego, Areum, estoy a punto de irme.

– Claro Hannah, ve con cuidado, te quiero.

Y yo a ti. – Dice antes de cortar.

Segundos después, dos pares de pisadas resonaron en el comedor.

Entonces tomó el plato frente a ella y lo llevó a la mesa donde Taehyung y Jungkook yacían con la mirada baja totalmente avergonzados.

Después de dejar el plato frente a Kim, rodeó la mesa para sentarse frente a ellos.

Minutos que parecían horas para ellos pasaron en silencio.

– ¿Cuando pensaban decirme que ya no son precisamente amigos?. – Dice Areum después de un rato.

– Yo... Nosotros íbamos a hacerlo. – Toma la palabra Jeon. – Ayer estuve en la casa de Tae, hablamos con sus papás.

– ¿Y cómo es que llegaron aquí? – Pregunta masajeando sus sienes.

– Bueno, Kook me invitó a pasar la noche acá, mis papás estuvieron de acuerdo. – Susurra Tae aún con la mirada baja y una ansiedad enorme recorriendo su cuerpo.

– Sin entrar en detalles, díganme ¿Por qué?

– ¿Que crees que pasa cuando un par de adolescentes están solos en una casa? – Contesta el azabache.

– Dios mío Jeon Jungkook, yo no te crié así. – Responde Areum. – No puedo oponerme a el tipo de relación que están llevando, pero por favor, no lo hagan en mi casa, llevenle este tipo de sorpresas a Hannah. – Pide provocando que ambos chicos estallen en risas.

– Lo siento mucho, yo no sabía que iban a llegar pronto. – Dice Taehyung apenado.

– Y yo tampoco. – Segunda Jungkook.

– Bueno, yo tampoco sabía que llegaríamos en la madrugada, así que los perdono, pero por favor no vuelvan a hacer nada aquí. – Les pide suplicante.

– Mamá, Tae y yo... Somos novios. – Anuncia el azabache luego de unos cuantos minutos apretando la mano ajena por debajo de la mesa.

– Yo sabía que ustedes iban a terminar juntos, parece que de enamoraron desde que estaban en la cuna pero les tomó 16 años darse cuenta. – Dice Areum, ya más tranquila.

» Prefiero mil veces que estés con Tae a qué estés con una persona diferente cada semana; más te vale que lo cuides porque soy capaz de desheredarte si le haces daño a mi Tae. – Amenaza a su hijo antes de pararse a abrazarlos.

– ¡Mamá! Deberías protegerme a mí.

– Los quiero, pero aún deben hablar con Seung y soportar las burlas de Junghyun y de Haneul.
»No seré parte de ningún plan maligno que tengan en mente, ¿Okay? – Advierte. – Ahora desayunen, que ya van demasiado tarde a la escuela.

Solo eso bastó para que Taehyung se sintiera más tranquilo.
Después de eso, la vergüenza se esfumó y se permitió disfrutar ese momento junto a su novio y su ahora oficialmente suegra.

Areum podía parecer una mujer muy seria, pero por dentro era una persona muy dulce y amable, pero aunque Taehyung lo sabía, le daba miedo.

A ella realmente no le preocupaba nada, porque los conocía a ambos, y estaba segura de que serían incapaces de lastimarse.

Por fuera, se veía mortificada, pero por dentro, aún los miraba con burla, no podía ser severa con ellos, y después de todo... estaba orgullosa de saber que sabían cuidarse, sabía que habían hecho un gran trabajo.
Solo le falló el enseñarle a su hijo a respetar su hogar.

Verlos en esa posición era divertido, le recordaba a esos momentos en que su relación con su ahora esposo recién comenzaba.
Así son los adolescentes.

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¿Sorpresa? jajaja
Dios mío, solo voy a decir que no tengo excusas y que estuvo muy mal abandonar Circles por tanto tiempo.
Sean leves con la clase de asesinato que van a llevar a cabo por favor.

Es todo por el momento y prometo intentar actualizar seguido. 😔

Gracias por leer, no se olviden de seguirme en ig cómo @gguk.jeon1

Manténganse sanos y nos leemos en la próxima :]

‧₊˚𝗴𝘨𝘶𝘬 ִֶָ⸙͎

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