Game Of Thrones: House Pendragon español

Capítulo 11 - Poción

Capítulo 11 - Poción

Después de unos momentos en mi habitación, escuché el sonido de los carruajes que llegaban.

Saliendo y dirigiéndome hacia el carruaje vi a mi padre saludando a un anciano.

"Gracias por venir, Maestre Kener, le pediré que investigue la muerte del Maestre Walys y envíe un cuervo a la ciudadela notificando la muerte y el envío de otro Maestre para ocupar su lugar". Habló mi padre.

"No hay problema, Lord Stark, tan pronto como termine iré a verte y te contaré mis hallazgos". Dijo el Maestre del Cerwyn.

"Guardia, lleva al Maestre al cuerpo de Walys" dijo mi padre.

"Sí señor, por favor acompáñeme Maestre". Habló el guardia.

Después de que se fueron, fui hacia mi padre.

"Padre, ¿tienes tiempo para hablar ahora?" Yo pregunté.

"Ahora sí, vamos a mi oficina". dijo mi padre yendo hacia la casa señorial.

Siguiendo a mi padre, pronto llegamos a la mansión, entrando, mi padre se sentó en la silla detrás del escritorio y yo me senté en la silla del frente.

"Así que Arthur, ¿qué necesitas?" Preguntó.

"Si es posible, estos artículos aquí" le dije entregándole el papel que había escrito horas atrás.

Tomando el papel de mis manos y leyendo el contenido, mi padre arqueó las cejas.

"¿Más artículos? ¿Sabes cuánto gasté en esa habitación tuya? ¡Todo ese equipo era bastante caro!" preguntó mi padre.

"Lo sé, te devolveré el doble de todo lo que gastaste en mí, lo prometo". Yo dije.

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"Soy tu padre, no tienes que pagarme nada, te pediré que compres esos artículos, pero tomará unos días".

"Ningún problema."

Llegó la hora de la cena, rumbo al Salón, mi padre y hermanos ya estaban reunidos.

Aunque era el más joven, con mi altura y mentalidad destacaba ante mis hermanos mayores, menos Brandon y Ned, al menos por ahora, por lo que Benjen y Lyanna a veces me veían como un hermano mayor.

Por más bastardo que sea, mi padre y mis hermanos nunca me trataron con hostilidad, incluso los sirvientes de la casa me trataron como si fuera un hijo legítimo.

Por eso hice una promesa ante el arciano del bosque sagrado, que aquellos que dañen a mi familia pagarán el precio de la muerte.