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DRIFT NO PODÍA CONFIAR EN SÍ MISMO. Y AUREA TAMPOCO. El plan dispuesto había sido el siguiente. La wolf regresaría a la base, pero sola. Informando de la desaparición de Drift, debido a que él mismo se ofreció a atraer la atención de los enemigos alejándolos de la Autobot, y para así proteger a sus compañeros. Eso lo convertiría en un héroe. Una gran estrategia. Y que además lo dejaría al margen de los Autobots un tiempo e incluso de los Cons. Ofreciéndole a Drift el tiempo justo para poner fin a su guerra nterior.
El mech se escondió en las montañas, buscando alejarse de toda guerra física. A pesar de su "odio". Aurea le había concedido una oportunidad más al mech. Algo que le parecía increíble. Pero en el fondo. Aurea tenía fe hacia él, y eso que realmente a penas pudiera creer consevarla.
(***)
Más allá de los rincones de la vieja Cybertron, el antiguo coliseo de la ciudad albergaba a un mech colérico.
El energon de sus cables ardía como la misma lava y sus ópticos casi podían soltar chispas de furia.
Nadie se atrevía a dirigirle si quiera una mirada.
-¡Soundwave!.-gritó con su voz rasposa y profunda.
El mech se inclinó ante él tan solo unos segundos después.
-Mi señor...
Megatron seguía mirando la pantalla frente a él. Que mostraba a uno de los fieles de Soundwave grabar toda una masacre cuyos principales protagonistas eran una lupina y un traidor, además de su huída. Aquellos dos estaban complicando verdaderamente sus planes. Por lo menos los paquetes de ayuda para sus tropas seguían intactos. Pero si lo habían hecho una vez volverían en hacerlo. Aunque aquello le había dado una gran idea.
Megatron se sentía frustrado. Tal vez nunca más pudiera recuperar al desobediente samurai, sin embargo podía hacer algo que si se le daba bien.
La venganza.
-¿Está todo listo? -Sin lugar a dudas, señor.-su visor no dejaba distinguir sus expresiones, pero se le notaba firme y seguro. -Bien. Inicia el plan.-ordenó.-Es hora de eliminar a la escoria. -Si mi señor. ¡Ravage!
El mini-Con se transformó ante Soundwave.
-Iniciando plan, búsqueda y destrucción.
El parecido a un animal gruñó y salió a toda prisa del Coliseo.
(***)
Aquel mech que lo había salvado una vez. Le enseñó cierto truco cuando deseara buscar la paz interior. Algo que hasta ese instante no había puesto en práctica.
Cerró los ópticos y respiró profundamente. Poco a poco su metálico cuerpo se relajó, y se vio transportado a otro plano. Un lugar repleto de paz y calma.
