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Blaster City
HABÍAN HUÍDO DESPAVORIDOS AL VER A LOS DECEPTICONS ATRAVESAR EL PORTAL TERRESTRE. Al ver aparecer al asesino Deadlock las sparks de muchos temblaron de miedo. Si Deadlock estaba allí eso solo podia significar una cosa. El fin
Los gritos llenaron los receptores de audio del samurai causándole un inmenso placer. Gritos, sollozos, gemidos. Nadie escapaba de la katana, ni del arma de fuego del asiático. Nadie escapaba del filo brillante. El energon no tardó en verse gotear por las armas o por la misma armadura del Decepticon. El color rosado sobre el negro de la armadura le sentaba de maravilla. No se inmutaba de nada, el solo perforaba, sacaba y al siguiente, una y otra y otra vez sin descansar. Se carcajeaba sin cesar, riéndose, claramente disfrutando de todas esas almas arrebatadas enviadas al valle de Primus
-¡Por favor! ¡Piedad!
El asesino sonrió macabramente antes de asesinar a aquella femme. Sus ópticos se apagaron parpadeando un par de veces antes de perder su brillo azulado. El líquido vital del Transformer salpicó el rostro del mech, algo de la sangre se introdució entre los labios del metálico, asique este pudo probar algo de la víctima. Enseguida escupió, estaba asqueroso
Piedad pensó el mech en aquellas palabras. Y una carcajada se le escapó inevitablemente. ¡Piedad! ¿Qué era aquella palabra? ¿Qué significaba? Deadlock lo desconocía completamente, jamás se vio en una situación de vida o muerte. Nunca, era demasiado bueno como para estar alguna vez en un lugar como el de una victima
Pudo verse a si mismo el rostro a través del brillo de la katana, sus hambrientos y brillantes ópticos rojizos centellearon. Vio su sonrisa curvada hacia un lado. Vio su rostro de satisfacción
-¡Deadlock!.-uno de los Cons lo reclamó
El asesino sacó la espada y volteó firme, con total naturalidad
-Quedan edificios que revisar, ve
Odiaba recibir órdenes. Decidió seguir su propio camino y seguir matando a su libre al bedrio. Pronto los gritos fueron desvaneciéndose y solo quedaron los pasos del asesino sobre el suelo. Se concentró y oyó unas voces
-¡Ugh!
Una rezagada. Una superviviente
Dead sonrió y sacó la katana mientras aminoraba el paso. Su otra mano sostenía un cañón de alta potencia. Se guió por la voz femenina y se ocultó como una sombra. Y allí estaba. Una femme, esbelta y malherida que se arrastraba por las paredes de Blaster City tratando de huir. Estaba a punto de sufrir un cortocircuito. Sostenía una pistola mientras su servo derecho estaba apegado en su costado, perdiendo energon
Deadlock sonrió. Era dura, pero no escaparía de allí. Guardó el arma de fuego. Usaría su instrumento favorito. La katana
Se acercó sigilosamente, blandió el arma con firmeza. ¿Cómo la mataría? ¿La decapitaría? ¿O dejaría que desangrara lentamente? Estaba detrás de ella, tan débil, tan vulnerable, tan...
