𝙈𝙐𝙍𝘿𝙀𝙍𝙀𝙍 ↬ ᵈᵉᵃᵈˡᵒᶜᵏ/ᵈʳⁱᶠᵗ

ESCENA VEINTE. ADIÓS AMOR, ADIÓS

DRIFT NO SE PLANTARÍA SIN MÁS EN LA PUERTA PRINCIPAL. HABÍA ESTADO VIVIENDO EN KAON MILENIOS, SE CONOCÍA CADA SALIDA Y ENTRADA.

Abrió la rejilla de ventilación con cuidado y se introdujo en ella. Era lo suficientemente ancha como para entrar. Pero lo suficientemente estrecha como para queda encajado si no se tenía cuidado. Antes de avanzar depositó una de las cargas de demolición.

(***)

Avanzó varios kilometros de tubería antes de llegar a su destino. La sala principal del viejo coliseo. No parecía haber nadie. Deadlock avisó a Drift en sus pensamientos.

Aquello era una trampa.

Y aun sabiendo el riesgo, levantó la rejilla y se dejó caer elegantemente en el suelo metálico, blandiendo su katana. Estudió la sala rapidamente. Entre las rejas electrificadas se encontraba la joven wolf, hecha un ovillo.

Drift abrió los ópticos mientras su spark palpitaba fuerte.

-¡Aurea!.-chillaron tanto Drift como Deadlock.

Aurea abrió los ópticos totalmente manchados de lágrimas. No pudo articular una sola palabra.

-¡Háblame! ¿Estás bien? ¿Estás herida?

Drift destruyó el panel de control que mantenía presa a Aurea, y el campo electrificado se desvaneció en el aire.

La wolf seguía ajena a todo lo que sucedía. Drift preocupado la sacudió entre sus brazos.

-¡Aurea!

Involuntariamente los ópticos del mech se volvieron rojizos. Y su expresión profundamente sombría.

Deadlock.

-Qué te ha hecho.-exigió de alguna forma.
-Por fin nos volvemos a ver, hijo.

El gran mech los observaba firmemente. Deadlock se dio la vuelta.

-Cabronazo...
-Sabías que era una trampa, y aun así veniste, no es propio de ti Deadlock. Enamorarte así de un inmundo perro...

Aquello enfureció al mech. Antes de que cualquiera de los dos pudiera hacer o decir algo. Aurea saltó estrepitosamente contra el gladiador consumida por la rabia.

-¡No!

Deadlock trató de ir por ella, pero el suelo bajo sus pies comenzó a impedir sus movimientos. Un imán.

Megatron no tardó mucho en deshacerse de ella y la sostuvo por el cuello. Aprentando con gran fuerza el delgado cuello de la wolf.

-Voy a quitartelo todo Deadlock. Y solo entonces te quitaré yo mismo la vida.
-¡No! ¡No! ¡Me querías a mi! ¡Mátame a mi! Yo he sido quien empezó esto, acábalo conmigo.-gruñó.

Megatron le miró friamente.

-Nunca supliques en la guerra, muchacho, solo hace que muestres tu debilidad.-le miró duramente, aquellos Autobots habían hecho añicos el esfuerzo de Megatron por convertir a Deadlock en un arma.
-Drift...-susurró Aurea.-Está bien.

Ella le dio una sonrisa rota. El mech se removió furioso. Cuanto hubieran añorado sus sparks tener un solo instante para demostrar aquel profundo y extraño afecto que se tenían, sincerarse con la mirada, sin necesidad de hablar.

Un amor que ambos sabían que sentían más jamás florecería. La guerra nunca perdonaba.

-¡No! ¡No! ¡No!

La wolf cerró los ópticos aceptando su destino. Cansada de una vida llena de dolor y sufrimiento...aceptó cuando Megatron le atravesó la spark con una mano, dejando que la vida se le escapara de entre sus pulmones metálicos...

Ni siquiera sintió dolor. Solo alivio. Ya estaba. Ya no había que luchar más.

Su inerte cuerpo cayó al frío y duro suelo ante los horrorizados ópticos de Deadlock/Drift.

-Así aprenderás, muchacho.

El imán fue desactivado y el mech la envolvió en sus brazos cayendo de rodillas duramente. Su módulo de voz se desgarró del horrible grito que estalló de sus pulmones.

Aquella estúpida esperanza de sentirse amado, de llegar a ser algo, tal vez incluso de ser una familia. Sus absurdas ideas se borraron de esa mente trastornada. Rota. Finalmente destruída a manos de quien eligió seguir. La acarició, y depositó su primer y último beso en los labios suaves de acero de la wolf.

-Conmovedor.-rió el grisáceo.-¡Matadle!.-señaló.

Deadlock fue rápido y asesinó a todos los que osaran acercarse a él. Miró una última vez los ópticos de aquella osada femme. Que había despertado su rota spark. Su inerte cuerpo.

Megatron había desaparecido. Y después de abrirse un hueco entre sus asaltantes. Saltó por el ventanal principal.

Se vengaría.

Lo juro por Primus. Voy a matarlos a todos.