"Como de telenovela" | «Litiago»

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A la mañana siguiente, Mauro se dirigió a la cocina para saludar a su madre.

Luego de un bostezo, dijo:

—Buen día Ma.— Habló con cara y voz de dormido.

—Aaaaaaaaaaay no aparezcas así por favor.— Dejó caer los utensilios que tenía en la mano sobre la mesada y corrió para abrazar a su hijo. —¡Feliz cumpleaños mi nene hermoso!

—Gracias Ma.— Dijo entre complicadas risas ya que el abrazo estaba siendo fuerte.

—¡Sos tan hermoso, no sabes lo feliz que me haces hijito!

—G-grac-ias

—¡Te amo mucho!

—N-no r-res-piro

—Ay.— Lo soltó riendo. —Perdón. Feliz cumpleaños bebote.— Acarició su mejilla.

—¿Bebote? ¿Una palabra más desagradable no había?— Hizo cara de asco.

—Oy que amargo.— Rió. —Bueno… YO, para empezar este bello sábado, estoy haciendo tu comida preferida mi amor.

—¿POSTA?— Sonrió y miró hacia el horno.

—Sí mi amor. Estoy haciendo supremas con puré, que gustos tan exóticos.

—No hay nada mejor que no tener gustos de mierda.— Se acercó y miró hacia las sartenes y ollas.

—Habló el fan de la menta granizada.— Rodó los ojos con una sonrisa.

—Uuuh me re cabió.— Rió. —Bueno, mami, tengo algo re lindo para contarte.— Se sentó en una banqueta para quedar enfrente de su madre.

—¿Vos algo lindo? Mmmm

—Callate… bueno, de verdad es algo que te quiero contar, algo re lindo que pasó anoche.

—Nooo… jodeme que la pusiste hijo.— Hizo cara de sorprendida.

Mauro se puso serio y se cruzó de brazos.

—Todos los días la pongo.

—No, no, no.— Negó con el dedo índice. —Que te la pongan no es lo mismo que ponerla.

—¡AY CALLATE! ¿VOS QUÉ SABES?

—Yo sé mucho y aparte tengo oídos.— Señaló hacia la parte humana en cuestión.

—¡Basta basta basta no sigas que me voy a pegar dos tiros! Hablemos en serio, te quiero contar algo lindo mamá.

—JAJAJAJ bueno amor, a ver contame.

—Mmmm… ADIVINÁ…— Sonrió con dientes.

Ella hizo un gesto pensativo.

—Mmmmm… ¿Estás embarazado?

Mauro volvió a ponerse serio.

—No se puede hablar con vos.

Ella soltó varias carcajadas.

—¡Te estoy hablando de algo que pasó! ¡O sea que es posible! ¿¡entendés!?

—JAJAJA o sea que lo de que la pongas tampoco es posible

—Ay mamá por favor, hablemos en serio, ésto es serio.— Se cruzó de brazos.

—Bueno pero contame tarado, no ves que no puedo adivinar.

Mauro suspiró y destensó su hombros.

—Bueno, viste que a veces la gente para dar un a noticia dice: DOS PALABRAS o… TRES PALABRAS… Bueno, yo no voy a decir nada, solo haré un movimiento con mi mano y todo estará dicho, ahre.