CAPÍTULO CATORCE

5K 467 35
                                    

Creo que a lo largo de mi vida he tenido mejores noches de sueño que está, desperté con el sonido de un relámpago, seguido de pasos yendo de un lado a otro, genial la cereza del pastel fue cuando Tyler apareció en la habitación dando alaridos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Creo que a lo largo de mi vida he tenido mejores noches de sueño que está, desperté con el sonido de un relámpago, seguido de pasos yendo de un lado a otro, genial la cereza del pastel fue cuando Tyler apareció en la habitación dando alaridos.

Tal parecía que todos se habían puesto en mi contra para hacer que me despertara de mal humor, me di un baño con agua fría para relajar mis nervios y me cambie por algo más informal que no fuera ropa quirúrgica, en el pasillo encontré a todos de un lado a otro pero sobre todo a un Mason dando órdenes a diestra y siniestra.

—¿Qué está pasando?—lo detuve a mitad del pasillo

—Cambio de última hora, nos vamos...

—¿A dónde?

—Necesitan un cardiólogo y otros especialistas en un hospital de alto prestigio en Durban, el doctor Fiore ya consiguió la autorización para el traslado...

Maldita sea.—¿Ya nos vamos? —asintió algo distraído y siguió en lo suyo, viendo que ya no me haría más caso regresé sobre mis pasos a la habitación, ni modos a recoger todo.

—¡Sara! —una Merry muy agitada se quedó parada en el marco de la puerta—La doctora Peterson está aquí y quiere verte de inmediato...

Por los santos óleos.

Con el corazón acelerado di un par de toques en la puerta y cuando se abrió al primero que vi en ese enorme salón fue a Max, destacaba sobre todo a su alrededor y más porque ahora ya no usaba el pantalón formal si no porque había vuelto a la vestimenta de safari. Malditos shorts se ajustaban con peligrosidad a sus piernas y eso jugaba con mi mente.

—¿Me mandó llamar?—la doctora Peterson a su lado sonrió y señalo la silla al frente del escritorio, el pelinegro se acomodó a mi costado pero observo con dureza a la mujer

—Aquí están los resultados...—soltó un folder seguido de dos carpetas—¿Por quién comienzo? —no miento si digo que compartí una mirada fugaz con el pelinegro que no tuvo más opción que asentir

—Conmigo... —fue su respuesta y Julia sonrió complacida

—Bueno en una puntuación con una escala de minuciosos parámetros donde el mayor puntaje era de cien usted Neurocirujano Maximiliano Fiore ha conseguido noventa y siete...—oh, por dios—Fue minuciosamente examinada su técnica, reacción a las situaciones, temple, inteligencia y sobre todo capacidad de control, entre sus múltiples habilidades y capacidades destacaba por su paciencia he inteligencia...—sonrió en su dirección—Felicidades...

No puedo creerlo.

—Neurocirujana Sahara Van der Wal, con el mismo parámetro de evaluación y tras el escaneo de su expediente se realizó un comparativo con sus antiguas procedimientos médicos y evaluando la misma lista de parámetros alcanzó un puntaje de noventa y siete...—agárrenme que me da algo—Se evaluó su técnica al realizar procedimientos y lograrlos tan limpios junto a su capacidad de reacción, habilidades, empatía y su control personal, entre más habilidades que demuestra tiene un dominio excelente el áreas médicas, Felicidades...

DE VIAJE A SUDÁFRICA (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora