Maximiliano Fiore es el jefe de cirugía del equipo treinta y cinco de voluntarios de la asociación Save the Children. Todo el equipo está realizando su última ruta de cinco meses por las zonas rurales y aisladas de Sudáfrica antes de regresar a casa...
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(Septiembre) (Aliwal North)
Max pasó a mi lado y con toda la hipocresía y cinismo del mundo me rodeó con un brazo la cintura jalándome más a él, no le interesaba que estábamos a mitad de una reunión con Mason, Merry y los chicos de seguridad.
—Hagan lo que sea necesario...—fue firme con sus palabras a la par que apretó su agarre, trate de disimular el calor que apareció en mis mejillas y asentí en repetidas ocasiones dándole la razón al pelinegro
Los cuatro pares de ojos nos observaron con intriga pero ninguno dijo una sola palabra.
Por fortuna la reunión no tomó más de veinte minutos y cuando todos los presentes salieron de la carpa pude darme media vuelta con toda libertad y enredar mis brazos en el cuello de Max.
—Sigue distrayendo a esta neurocirujana y habrá problemas Doctor Fiore...—agacho la cara y rozó su nariz con la mía, su colonia varonil me impregno en las fosas nasales y esa sonrisa de anuncio dental le pintó la cara
—No le creo ni tantito, Doctora Van der Wal...—beso mi nariz y bajó con lentitud hasta mi boca donde con la misma devoción y pasión de días anteriores me beso
Cada beso de los últimos días ha tenido la capacidad de dejarme hecha trizas, desmorona mis muros, se deshace de mis barreras y le entregó en un puño mi control y voluntad a este pelinegro.
—Nos veremos esta noche...—dejo un último beso en mi frente y lo veo salir de la carpa.
Hay señor que estoy haciendo.
***
Por varios días después de regresar de la fundación nos costó acoplarnos a lo que sea esta relación que tenemos.
Pero ahora vernos juntos está resultando muy normal no solo para nosotros sino también para todo el equipo que nos rodea. A nadie pareció caerle de sorpresa que ahora pasemos más tiempo juntos, que entramos juntos a quirófano o cuando la situación parece conveniente nos pasamos de mano larga y de beso en beso.
Hanna, Loraine, Salome y Paola estallaron de alegría cuando nos vieron por primera vez juntos pero Tyler se voló la barda cuando nos vio y soltó un "ya era hora".
Aun no decido que nombre darle a esto, ¿Somos novios?¿Somos amantes?¿Somos amigos con derechos?, no lo sé, pero ni a mi interesa justo ahora darle un nombre y ha Max parece tampoco importarle.
Tenemos una relación en proceso y eso es lo único que me importa.
—Sara...—Merry me da un beso en la mejilla y deja más folders con expedientes sobre la mesa—Tengo que pedirte un favor mi niña...y es un favor urgente...
—¿Qué ocurre?
—Una de las urgenciólogas estuvo de guardia ayer pero esta mañana amaneció con mucha fiebre y está en reposo, el turno nocturno de urgencias está libre y no tengo más médicos disponibles, ¿crees que podrías quedarte?, se que es tu noche libre y tu con Max salen pero...
