V E I N T I O C H O

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Lukas miró muy enojado al sujeto que se estaba llevando al menor, se acercó a él impidiendo que siguiera caminando y lo tomó del antebrazo apretando fuertemente.

--Déjame imbécil--ordenó Tony con un tono amenazador, pero al ver que Lukas no pensaba soltarlo, inconscientemente apretó más su agarre, provocando que pequeñas lagrimas cayeran por el rostro de Alex.

--Lukas... Por favor, basta--suplicó apoyando su mano temblorosa encima de la del castaño.--Por favor...--volvió a suplicar.

--Lo soltaré, pero que él te suelte primero--dijo no tan convencido, estaba un poco más calmado, pero su mirada seguía clavada en Rojas.--Lo estás lastimando, suéltalo--ordenó.

--Si lo lastimo o no, no es asunto tuyo.
Él es mío, es mi novio y puedo hacer con él lo que se me de la gana--
respondió quitando bruscamente la mano del castaño de su antebrazo. Eso solo provocó que la sangre del contrario comenzara a hervir, y reaccionó como un supuesto novio celoso.

--Ah... Alex, cielo, por favor no intervengas--dijo con un tono tranquilo, mientras tomaba la muñeca de Tony para apretarla tan fuerte que acabó por lesionarla, provocando que éste gritara de dolor y suelte a Alex.

--Dios...--murmuró Alex alejándose de ambos chicos que al instante comenzaron a matarse entre ellos. El pelinegro se puso tan nervioso que llamó a Damián, suplicando que viniera por él.

Cuando éste llegó, pudo presenciar la horrible escena de los dos chicos todos ensangrentados, y uno más alejado que estaba muerto del miedo, supo enseguida que era Alex, se acercó a él y lo abrazó.

--Damián... Esto es mi culpa--dijo sollozando mientras lo abrazaba con fuerza.

--Hey no, no digas eso... Esto no es tu culpa. Tranquilo--murmuró tratando de calmarlo, para luego volver su vista a los dos chicos--¡Lukas!--gritó provocando que éste lo mirara de reojo aún a la defensiva--¡Ya fue suficiente!
¿Qué no ves como acabas de poner al pobre de Alex?--preguntó, logrando que el castaño reaccionara y deje de golpear a Rojas, el cual estaba mucho más lastimado que él.

Lukas se alejó de Tony mientras le hacía señas como diciéndole "te estoy observando." Se acercó a Alex, pero cuando intentó tocarlo, Damián se lo impidió.

--Sé que solo lo estabas defendiendo, pero ahora está alterado, deja que se calme para hablar con él--dijo con el ceño fruncido, comenzando a caminar hacia la casa de Alex, Lukas suspiró y los siguió con un paso lento, su cabeza estaba como loca, quería matar a aquel imbécil que se atrevió a lastimar a su chico, pero al mismo tiempo se sentía culpable, jamás pensó que afectaría tanto al menor verlo así.

Cuando estaban por llegar, Alex ya se encontraba más tranquilo, y como Lukas iba detrás de ellos, volteó para verlo.

--Lo siento...--murmuró, los dos chicos pusieron su vista en él.--Esto... Es mi culpa, si me hubiera defendido desde un principio... Tal vez tú...--no pudo terminar ya que sus lágrimas comenzaron a caer de nuevo, Damián se alejó un poco, como dándole a entender a Lukas que el menor era todo suyo.

Lukas se acercó al bajito y lo abrazó con fuerza.

--Escúchame--murmuró en su oído, mientras Damián se adelantaba un poco para darles privacidad.--Esto no es tu culpa, no deberías de disculparte por nada, en cambio yo me comporté muy mal. Lo siento mucho, pero no pude evitar reaccionar así cuando vi que ese idiota te lastimó--

--Aún así... Me defendiste... Gracias--
murmuró sonriéndole, el contrario le devolvió la sonrisa y limpió sus lagrimas con mucho cariño.

--¿Te lo dije no?... Haría lo que sea por ti--dijo dejando un beso en su frente, para volver al camino junto a Damián.--
Gracias por detenerme, no estaba pensando con claridad--

--No me lo agradezcas, cualquiera hubiera reaccionado así ante tal escena--respondió dándole una palmadita en el brazo al castaño, luego miró a Alex quien miraba con tristeza el nuevo moretón de su brazo, el cual tenía marcado de color azul con morado.--Alex ¿ya estás mejor?--

--Lo estoy... Gracias por venir de inmediato, no sé que hubiera hecho si no llegabas--murmuró avergonzado.

--Sabes que cuentas conmigo para lo que sea--respondió sonriendo--oye...
Alex, sé que no deseas tocar el tema, pero... Yo te vi pelear, peleas muy bien, como si fueras cinturón negro... ¿Por qué no te defiendes de las personas que te lastiman?--preguntó con curiosidad.

--Desde niño... Los chicos me golpeaban, siempre me quitaban el almuerzo, o dinero, o cualquier cosa que trajera conmigo... Siempre que llegaba a casa golpeado, mi padre se burlaba, me decía "¿tan débil eres? Ni siquiera puedes defenderte de unos niñatos. Solo eres un inútil, mantenido de mierda." Mamá siempre peleaba con él por como me trataba, y se preocupaba por mí, tanto que me anotó en karate. Unas pocas semanas después, mataron a mi madre... Según lo que oí, papá debía demasiado dinero, y nosotros tres quedamos con vida, aunque eso no cambiaba el hecho de que mi vida fue un infierno... Solamente tenía once años... Como papá no podía pagar las cuentas, esos mismos hombres que asesinaron a mi madre, se llevaron a mi hermana para prostituirla y así saldar cuentas con mi padre. Él no se negó, simplemente comenzó a beber como un loco...--Lukas y Damián escuchaban su historia con atención, fue así como llegaron a la casa del menor. Los tres entraron y se sentaron a seguir escuchándolo.--Mi padre dijo que yo me convertiría en su nueva esposa... Me dijo que yo tomaría el lugar de mamá, para complacerlo en todo lo que él quería...--murmuró.

--Alex, ¿Él te...?--antes de que Damián pudiera acabar, Alex negó.

--No llegó... Él... Bueno, yo limpiaba, cocinaba, lavaba la ropa y todo eso... Era como una empleada, con la diferencia de que... Cuando me agachaba estando cerca de él... Él apretaba mi trasero y lo golpeaba... A veces tomaba mis mejillas y me besaba a la fuerza, metiendo su asquerosa lengua hasta mi garganta--contó con asco, sintiendo como su estómago se revolvió por completo.--Cuando se sentaba a mirar la televisión, me hacía sentarme en sus piernas... Aunque había veces que sentía un bulto apretarse en mis nalgas...--

--Alex... Eso es abuso--dijo Lukas.

--Déjame terminar, necesito desahogarme--suplicó--como decía... Sentía el bulto, entonces él sacaba su miembro y se masturbaba por mi pierna... Nunca me llegó a meter nada...
Pero aún así, a veces hacía que yo lo masturbara... Cuando lo mataron a él, al día siguiente me enteré que mi hermana también había muerto, que uno de sus clientes la ahorcó en uno de esos fetiches raros y terminó por dejarla completamente sin aire... Quedé solo... Pero al quedarme solo, sentí mucha tranquilidad, tan solo tenía quince años cuando eso pasó y comencé a dejar que me golpeen a los catorce... Porque sentía que todo lo que pasaba era mi culpa, sentía que merecía esos golpes... Por alguna razón, me hacían sentir bien... Pero eso cambió cuando los conocí a ustedes...
--confeso--sé como defenderme... Pero aún no deseo hacerlo, necesito un poco de tiempo, pues la culpa no se ha ido...
¿Podrían soportarme un poco más?
--preguntó viendo a los chicos, quienes estaban llorando por aquella historia--

--Te esperaré, pero tú tienes que saber que nada de eso es tu culpa...--dijo Damián sollozando--las personas que mataron a tu madre, tendrían que estar tras las rejas... Tu padre tenía que estarlo, porque abusó de ti, tú no tenías que ser el reemplazo de nadie, jamás podrías serlo, pues eras su hijo, no su esposa--explicó.

--Damián tiene razón Alex, aunque estemos dispuestos a esperar... Nada de esto es tu culpa. Tú no tenías porque sufrir todo eso...--murmuró Lukas abrazándolo.--Eres muy fuerte... Ahora más que nunca, deseo verte feliz--dijo besando su frente.

--Lukas... Con el simple hecho de que estén para mi, es más que suficiente, pues esta es mi mayor felicidad... Tener amigos como ustedes--murmuró correspondiendo su abrazo.

I HATE YOU? [CARLUKAS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora