Nadia
Tal vez ya te estés preguntando, ¿por que te pones nerviosa si la invitas a tu casa "SOLA", cierras la puerta de la habitación y le dices que hace mucho calor a una persona tan intensa cuando se trata de situaciones "comprometedoras" ?, tal vez no tan especifica la pregunta, que me ponga nerviosa no quiere decir que no quiera, ya lo que siento no es deseo, es necesidad, NECESITO, la sensación del éxtasis recorriendo mi piel, el aire que abandona mis pulmones con fulgor, el estremecimiento completo de mi cuerpo, la leve humedad que queda sobre las sábanas de mi cama, las finas gotas de sudor que se deslizan en distintas partes de mi cuerpo, su tacto por toda mi piel, sentir su cuerpo sobre el mío, frotar cada extensión física que poseo con las suyas. No hay nada en este mundo que necesite más.
Guarde silencio por unos minutos, sentía como el ambiente se tensaba y provocaba un cosquilleo en mi entrepierna, pensar esas cosas no me hace bien en esta situación, nunca he tenido sexo, lo mas cercano que tengo a eso es masturbarme, lo hago cuando estoy sola, aburrida, estresada, incluso cuando quiero dormir, también veo pornografía como cualquier persona común, y debo confesar que no fue fácil admitir mis preferencias y poner en el buscador de la pagina "lesbianas", descubrí mi orientación una noche con una "amiga", la cual no se si llego a hacer eso, las cosas se descontrolaron y terminaron mal, muy mal realmente, confieso que le temo a eso, a que todo acabe mal con Alina.
Estaba de espaldas a ella y jugaba con las sábanas para controlar mis nervios, voltee la cabeza para ver no se que, ¿otra pared de la habitación?, y por el rabillo del ojo vi su sonrisa, perfecta, ensanchada y carece de buenas intenciones, y lo hice de nuevo, voltee a ver otra pared, ya no sabia que hacer, estaba llena de nervios, ganas, y sobre todo necesidad. Ella se acerco a mi por detrás, acarició mis hombros con sus manos mediante movimientos circulares haciendo que mi piel se estremezca, seguí apretando con fuerza las sabanas y susurro en mi oído
-Me invitas a tu casa" SOLA", cierras la puerta de la habitación con seguro, te pones de espaldas a mí, ¿y no me pides que te toque?-
Solté un pequeño suspiro, cruce mis piernas y luego empecé a respirar agitadamente cuando sus manos empezaron a recorrer mi cintura y torso de arriba abajo con presión y rapidez, de mi salieron varios jadeos seguidos y aun estaba sin decir nada, ella respiraba en mi cuello y eso hizo que mordiera mis labios con fuerza, luego pasó a recorrer mis piernas con los mismos movimientos apresurados que me hacían necesitarla mas y mas, quito mi camisa y la lanzo a no se donde, en estos momentos me había limitado a no soltar nada más que jadeos y suspiros, pero luego puso sus manos bajo mi sostén, pellizco mis pezones y gemí, tomo mi rostro con su mano derecha y con la otra masajeaba uno de mis pechos, volviendo a susurrar en mi oído
-¿No quieres que te toque?...-
Cerré mis ojos mientras aún mordía mis labios, cambié mi posición y me recosté ahora sobre mis brazos que estaban lado a lado a mi cuerpo frente a ella, mis piernas cambiaron a estar recostadas de lado en la cama, una sobre la otra mientras las apretaba con fuerza, sus manos seguían recorriendo mi cuerpo, y para que no se le ocurriese detenerse asentí varias veces con mi cabeza, la tensión seguía elevándose, soltó mi cabello y comenzó a besar mi cuello, volví a gemir, luego sentí su sonrisa sobre mi piel y comenzó a lamerlo, me apretó con fuerza por la cintura y dejó una mano libre para colocarla sobre mi cuello dirigiéndola esta vez de arriba abajo por mi sostén, lo quito dejando mi pecho desnudo, me recosté sobre ella y los recorrió con la mirada, paso a mirarme fijamente a los ojos, sus ojos brillaban y sentía como si pudiesen quemarme si le mantenía la mirada, así que voltee mi cara y la deje continuar.
Estaba tan envuelta en la situación que me sorprendí cuando apretó mi cuello con fuerza, ahorcándome, así que me sobresalte, mordió una de mis mejillas, la lamió y dijo
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Cadenas De Perdición (Girl x Girl)
RomanceLa madurez llega con un cambio que sucede para bien o para mal, y eso es algo que está más que claro, pero, ¿qué representa la pérdida de inocencia en algunas personas?, ¿cuál es el precio a pagar por crecer?, ¿el fin de todo es el comienzo de nada...